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Red Internacional
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Luchas Obreras. La huelga de Chapingo a las puertas de Palacio Nacional

Más de 100 días han pasado desde el estallido de la huelga en la Universidad Autónoma de Chapingo. Frente a la negativa de las autoridades universitarias, los trabajadores universitarios han buscado respuestas favorables en otras instituciones de gobierno.

Martes 23 de junio de 2020

Se cumplen 110 días del estallido de la huelga en la Universidad Autónoma de Chapingo y como parte de su plan de acción, los trabajadores iniciaron sus protestas frente a Palacio Nacional, dónde arribaron previo al inicio de la conferencia vespertina para entablar dialogo con el gobierno federal.

La primera respuesta que ofreció el gobierno federal fue la presencia de granaderos cerca de Palacio Nacional, donde impidieron el tránsito y el derecho a la manifestación a los trabajadores de Chapingo.

Frente a la fuerte presencia de la base trabajadora y la presión que ejercieron, mediante el bloqueo a las puertas de Palacio Nacional, Alejandro Encinas y Hugo López Gatell entablaron un dialogo con los trabajadores y ofrecieron una mesa de negociación en las inmediaciones de la Secretaria de Trabajo y Previsión Social en Ajusco.

Ya en las inmediaciones de la STPS Ajusco y frente a la negativa de las autoridades, los trabajadores decidieron bloquear la carretera Picacho Ajusco. En redes sociales, los trabajadores de Chapingo denunciaron el hostigamiento de la policía de la Ciudad de México desde Palacio Nacional.

Los trabajadores de Chapingo han sostenido la huelga de manera valerosa, quienes pese a la pandemia han mantenido con determinación 110 días de huelga.

Solidaridad, la clave para vencer

Las demandas de los trabajadores de Chapingo, ponen en relieve lo que ocurre en el conjunto del gremio universitario: más precarización laboral, recortes a la educación y una posición cada vez más intransigente de parte de las autoridades universitarias.

Es decir, la huelga de Chapingo no es resultado de la intransigencia de las autoridades de la Universidad Autónoma de Chapingo, sino que es expresión de la resistencia de los trabajadores a un ataque a la educación superior. Esto se demuestra mediante la posición de la Secretaría de Educación Pública que en estas semanas anunció la cancelación del rescate a las once universidades en quiebra, dejando a la deriva a más de 60 mil trabajadores universitarios.

A la par de una serie de decretos presidenciales que recortan el presupuesto a las universidades, del cual ya hemos profundizado a detalle en anteriores notas.

Leer: Salud, educación y cultura los afectados por el nuevo recorte presupuestal

Esta situación, impone a los trabajadores universitarios la necesidad de responder de manera unificada, mediante la solidaridad activa con las huelgas en curso, misma que debería ser encabezada por las direcciones sindicales que se reclaman democráticas.

El 18 de junio realizaron una videoconferencia desde radio STUNAM con la presencia de representantes de Chapingo y Notimex en huelga, dónde nuestro secretario de relaciones, Carlos Galindo, se conectó en los últimos 15 minutos del foro para externar su solidaridad con Chapingo.

Pero el duro ataque al gremio universitario que recorre desde la Universidad Autónoma de Baja California hasta los Conalep de Quintana Roo y la negativa a resolver las huelgas en curso, requiere más que un saludo de solidaridad.

Es fundamental que todos los recursos con los que cuentan nuestros sindicatos, agrupados en la Federación Nacional de Sindicatos Universitarios y la Coordinadora Nacional de Sindicatos Universitarios, de Educación Superior, Investigación y Cultura, se pongan a disposición del fondo de huelga, para que la huelga no sea vencida por hambre.

En segundo lugar es fundamental que se informe a la base trabajadora de todos los sindicatos. Pese a que la pandemia ha impuesto el cierre de nuestras universidades y dependencias, es posible organizar asambleas departamentales y generales por distintas plataformas y aplicaciones para que la base pueda discutir democráticamente qué hacer en solidaridad con las huelgas en curso y cómo responder frente a los recortes al gremio universitario.

Hay posibilidad de organizarnos pero falta la voluntad política de las direcciones sindicales para romper el silencio y denunciar contundentemente el recorte y la negativa a solucionar los conflictos por parte de las autoridades universitarias y el gobierno federal.

Si la huelga de los trabajadores de Chapingo, que luchan contra los ataques de pe a poco se muestran en las universidades, resulta vencedora, todos estaremos en mejores condiciones para pelear en defensa de nuestros derechos laborales, por eso es importante que nos solidaricemos de manera activa con la huelga de Chapingo, Notimex y la lucha de los docentes de la UACM, despedidos por exigir derechos laborales elementales.

En esa perspectiva es que trabajadores de distintas universidades nos sumamos al movimiento nacional contra la precarización laboral, al que invitamos a nuestros lectores a sumarse, contáctanos dejando un comentario en esta nota e infórmate sobre todo lo referente al movimiento y sus propuestas aquí.

Leer: Un llamado a los trabajadores universitarios de todo el país