Mientras Bergoglio pronunciaba su discurso de “dolor y vergüenza”, excusando a la iglesia de los crímenes de abusos a menores, se encontraba el obispo de Osorno, Juan Barros, encubridor de uno de los mayores abusadores de menores del último tiempo: Karadima.
Miércoles 17 de enero de 2018

Mientras el Papa Francisco pronunciaba su discurso referido al mea culpa de la iglesia católica sobre los innumerables abusos de menores por parte de sus sacerdotes, entre los asistentes se encontraba en la procesión el obispo de Osorno, Juan Barros, uno de los encubridores de Karadima.
Te puede interesar: ¿A quiénes beneficia realmente la visita del Papa?
Al mismo tiempo, se desarró la “Marcha de los Pobres”, en donde se denunció la incongruencia de la iglesia, por su complicidad en los atropellos de los derechos humanos, entre otros. Movilización que fue fuertemente reprimida por Carabineros.
Te puede interesar: "Marcha de los pobres" termina con represión policial
Esta clase de incongruencias dentro de la Iglesia Católica no son hechos aislados, ya que el mismo Papa Francisco declaró sobre las movilizaciones que se estaban desarrollando en contra del Obisco Barros: “Osorno sufre, sí, pero por tonta, porque no abre su corazón a lo que Dios dice y se deja llevar por los ‘macanas’ que dice toda esa gente”. Añadiendo que: “Piensen con la cabeza. No se dejen llevar de las narices de todos los zurdos que son los que armaron la cosa”.
Te puede interesar: Siete frases que denotan el machismo del papa Francisco