A poco más de un año de la rebelión en Chile, analizaré la fuerza de la juventud que fue reconocida internacionalmente por saltar los torniquetes días anteriores al 18 de octubre de 2019, habilitando con su decisión a movilizarse contra el Gobierno de Sebastián Piñera.
(Artículo publicado en el libro Rebelión en el Oasis, marzo 2021)
En el siguiente artículo buscaremos reflexionar acerca de la juventud de estos 30 años que fueron impugnados desde la rebelión de octubre, como una denuncia y un grito de masas: “no son 30 pesos, son 30 años”. Veremos cómo la juventud secundaria, sacudió a millones de la situación de agobio y hartazgo luego de aguantar años de abusos, tanto de quienes habían gobernado el país los últimos 30 años, que no hicieron más que profundizar la herencia de la dictadura, como de los empresarios que han hecho trabajar en condiciones precarias a millones, para pagar sus negocios a costa de pensiones miserables por medio del sistema de pensiones (AFP), salud y educación de mercado, en donde estudiar y enfermarse es sinónimo de endeudamiento de por vida.
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