Dirigentes juveniles de patria grande, el Partido Socialista y el Frente de todos local debatieron en el diario El Ciudadano sobre como afectará el pago de la deuda a la juventud de cara al nuevo periodo que se aproxima. Desde En Clave Roja y No Pasarán, polemizamos con los discursos de resignación y sometimiento con el fondo monetario internacional. Porque el futuro que queremos, es el futuro que peleamos.
Jueves 17 de febrero de 2022 11:24
Mucho se ha escrito desde que se hizo público el acuerdo del Gobierno Nacional con el Fondo Monetario internacional, un acuerdo que implica legitimar no solo la estafa de la deuda contraída por el gobierno de Macri, sino también más de una década de ajustes, ataques y más deuda que pagarán los sectores más desprotegidos de la sociedad, lxs desocupadxs, lxs jovenes precarixs y el conjunto del pueblo trabajador.
Mientras el gobierno de Alberto Fernandez acomoda los porotos de cara a la votación del Congreso para poder cerrar este acuerdo, surge idas y vueltas, por parte de sectores oficialistas y de la oposición con el propósito de oponerse a los términos de la negociación con el fondo para despegarse todo lo posible de la responsabilidad del ajuste, pero tampoco ser una referencia contra el acuerdo, vetarlo y enfrentarlo, ni en el Congreso, ni en las calles, ni en ningun lado.
Con esta línea, dirigentes y referentes juveniles ligados al Frente de Todos (el Frente Patria Grande y el Partido Comunista), y al Partido Socialista, declararon en esta semana en el diario ElCiudadano, donde critica más, crítica menos, todos coinciden en una sola cosa con claridad, que la misma nota resalta: “es una auténtica tragedia de donde sólo se puede aspirar a lo menos peor”, o en otras palabras no nos queda otra que resignarnos a la miseria de lo posible, aunque eso signifique décadas de ajuste, hambre y pobreza para toda la juventud.
¿Pero esto es realmente así?
Una juventud que se plante con los trabajadores y lxs desocupados contra el plan del FMI
Desde En Clave Roja y No Pasarán (Juventud del PTS + Independientes) en el Frente de Izquierda Unidad hemos denunciado las consecuencias de la bota del FMI en nuestras espaldas, no solo en nuestros bolsillos, con salarios que valen cada vez menos mientras comer, pagar el alquiler, estudiar sale cada vez más caro, sino que también bajar el déficit fiscal significa ataques y ajustes enormes en la educación pública, la salud, el presupuesto contra la violencia de género, etc., así como también a nuestro medioambiente, no hay más que ver las consecuencias que tiene recaudar dólares para el Fondo, la quema de las cordilleras, los humedales, mega minería extractivista y estaciones petroleras en nuestro mar.
El ataque extractivista de los gobiernos a pedido del FMI, ha puesto al movimiento socioambiental en las calles, con movilizaciones masivas en todo el país contra las quemas de humedales y sierras o como en chubut y mendoza contra la megaminería y en defensa de la ley 7722, el caso más reciente en mar del plata contra las petroleras off shore da cuenta de este movimiento que cada vez toma mayor importancia en las calles. El movimiento medioambiental, del cual son parte Miles de pibes y pibas, muestra que organizadxs podemos parar la mano a los gobiernos que buscan pagar la deuda a costa de nuestros ríos y cordilleras.
Pero ante esta realidad no podemos resignarnos a esperar que desde los partidos tradicionales y el gobierno “nos ajusten lo menos posible”, tenemos que organizarnos en las calles, pero también nuestros lugares de trabajo, de estudio y en nuestros barrios, pelear por la idea de la unidad de los trabajadores, lxs desocupados y lxs estudiantes para enfrentar los planes de ajuste del Fondo es posible, y que las direcciones sindicales y estudiantiles se tienen que poner a la cabeza de esta tarea.
Por poner un ejemplo, las direcciones de los centros de estudiantes y la federación universitaria de Rosario, de las cuales en parte son dirigidas por Patria Grande, el MNR y el Alde, ¿que estuvieron haciendo estos dos años de pandemia? ¿Después de dos años de deserción, pobreza y precarización en los estudiantes se dieron cuenta del ajuste por parte del Gobierno de Alberto Fernandez? ¿Que van a hacer ahora contra el acuerdo con el FMI?
Si los Centros de Estudiantes y la FUR, hubiesen apoyado y solarizado con conflictos de trabajadores como lo fue el de los choferes de la UTA, o por los precarios que reclamaron por mejoras en sus condiciones laborales, como los telemarketers y los repartidores de Apps ¿no hubiese sido un gran ejemplo de unidad obrero estudiantil que contagiará al resto de los sectores más empobrecidos, con mucha bronca pero aun pasivos para salir a luchar por sus reclamos? ¿No hubiese hecho a estudiantes y trabajadores más conscientes de la importancia de la unidad contra el ajuste? tenemos que retomar las mejores tradiciones del movimiento estudiantil que junto al movimiento obrero han puesto en cuestión a los poderosos como en el Rosariazo.
Frente a esta situación de crisis, crecen los discursos de ultraderecha como los libertarios encabezados por Milei y su sequito de negacionistas neoliberales, que ponen el grito al cielo cuando alguien cuestiona la ganancia irracional de los grandes capitalistas y generan para la juventud discursos individualistas donde cada joven debe buscar una salida en solitario (hasta para los problemas de la vida cotidiana) y cualquier proyecto colectivo es una pérdida de tiempo. Hay que combatir estás ideas reaccionarias en cada lugar de estudio y trabajo.
Desde la izquierda peleamos por una perspectiva donde la juventud precaria, trabajadora y estudiantil pueda dar mucho más que resignación ante el acuerdo y ajuste consumado pero sabemos que es en las calles codo a codo con lxs trabajadores, lxs docentes lxs ambientalistas, las mujeres. Y así lo demostramos en todo el país el 11 de diciembre y este último 8 de febrero, donde copamos las plazas contra el acuerdo con el FMI en unidad con más de 100 organizaciones.
Militar hoy es ser consciente de estas tareas, combatir por la idea de que otro presente y otro futuro son posibles con pasión y pelear, en definitiva, por una vida que merezca ser vivida. No hay tiempo que perder en esta labor, todxs podemos jugar un papel indispensable e impostergable para lo que se viene.
