Dos años después de haberlo presentado, Julio Garro vuelve a la carga con el proyecto de Código de Convivencia ciudadana, que busca reemplazar al actual Código Contravencional.
Domingo 22 de noviembre de 2020 22:41
La iniciativa había quedado paralizada en 2018 tras el rechazo que recibió por parte de organismos de derechos humanos, como también de organizaciones sociales, feministas, políticas, gremiales, de la diversidad sexual y del trabajo ambulante, que habían realizado una importante movilización a la Municipalidad en repudio al código.
Ahora con pequeños cambios cosméticos insiste con un Código que no tiene nada de convivencia y más bien refuerza la intervención del aparato represivo en los espacios públicos de la ciudad.
A través de esta modificación, el representante de Cambiemos en la Capital bonaerense intenta profundizar la criminalización y perseguir manteros ( como ya lo viene haciendo), vendedores ambulantes, artesanos, trapitos, grafiteros, artistas, militantes y activistas, y todos aquellos sectores populares que habitan el espacio público.
Muchas actividades serán prohibidas y otras completamente regimentadas y restringidas.
El proyecto de Garro busca convertir en ley lo que hace desde hace tiempo: la persecución y criminalización a manteros en las plazas y vendedores ambulantes, a los trabajadores senegaleses, cuya subsistencia depende exclusivamente de la venta diaria. El mismo, además de establecer el arresto como sanción a muchas actividades, prevé el decomiso de la mercadería, procurando legitimar una práctica habitual de la policía local y bonaerense, ejerciendo violencia cada vez que hay “operativos” en las calles del centro platense.
En el marco de la pandemia y la crisis económica, se profundiza la miseria y la indigencia. Miles de familias buscan ganarse el mango diario para poder comer vendiendo ropa usada por ejemplo. El gobierno nacional viene de votar un presupuesto 2021 acorde con el ajuste que indica el FMI. Eliminan el IFE y recortan las jubilaciones. Kicillof y el facho de Berni comandaron la brutal represión contra las familias de Guernica, que no dan brazo a torcer y pelean por tierra y vivienda. El intendente de la Capital bonaerense no se queda atrás y en este contexto busca “ vigilar y castigar”.
¿Qué dice el código de Garro?
El texto del código se caracteriza por su contenido sumamente reaccionario, clasista y xenófobo.
En el artículo 1 se plantea que “El presente Código de Convivencia Ciudadana tiene como finalidad principal preservar el espacio público como lugar de buena convivencia ”; lo cual derivará en los artículos posteriores en una serie de prohibiciones, amonestaciones, cuantiosas multas, inhabilitaciones y hasta el arresto por 90 días.
Por ejemplo, el código prohíbe que personas ofrezcan un servicio a los automovilistas detenidos en un semáforo. Es decir castiga a aquellos (jóvenes en su mayoría) que limpian vidrios como único rebusque de subsistencia o a las personas, muchas de ellas con discapacidades que no acceden a una pensión, que venden en los semáforos. Por esta falta se estipula una multa de...78 mil pesos.
Se prohíbe toda venta ambulante en el espacio público Por vender alimentos en la vía pública las multas serían aproximadamente de $520000.
En la larga lista de prohibiciones y sanciones, este código también transforma en delito expresiones artísticas y culturales, criminalizando desde formas de expresión (como pintadas o murales), hasta la prohibición de la realización de ciclos de cines. El artículo 206 afirma que “El que realizare todo tipo de grafito, pintada, mancha, garabato, escrito, inscripción o grafismo, o bien rayara la superficie, sobre cualquier elemento del espacio público (... )será sancionado con multa de 100 a 1500 módulos/o arresto de hasta 15 días. También está penada la colocación de carteles, y la distribución de folletos (esto abarca no solo a las actividades culturales sino también a la difusión de las ideas políticas).
Para Garro todo lo que no esté mediado por la organización comercial de la diversión, todo lo que no sea redituable para los empresarios para los que gobierna, es visto como infracción y debe penarse.
A su vez, en el artículo 216 se penaliza el trabajo sexual en la vía pública y se sanciona con multas y/o arresto de hasta 15 días. Esto se suma a los continuos ataques y hostigamientos que sufren mujeres, trans y travestis por parte de la policía y personas transodiantes.
Bajo un espíritu completamente punitivista, la normativa que Cambiemos envió al Concejo Deliberante busca cercenar libertades democráticas elementales regimentando toda actividad o expresión popular, apuntando especialmente contra la juventud, las mujeres, migrantes y lxs trabajadores de la región.
Además se ve afectado el derecho a manifestarse garantizado constitucionalmente. Se pretende “enseñar” cómo se debe protestar bajo el mandato de Cambiemos en la ciudad. Por ejemplo, para realizar una manifestación se deberá notificar con antelación al municipio pidiendo autorización, se podrá movilizar por la vereda y cuando las marchas sean masivas por la calle utilizando solo un carril, todo esto bajo amenaza de multas, clausuras y hasta arresto por 30 días. Esto no solo limita el derecho a la protesta sino que legitima la represión y la criminalización de aquellos que salgan a luchar por sus legítimos derechos.
Un código reaccionario y clasista por donde se lo mire, ya que como se describe de no poder abonar las cuantiosas multas, se impone el arresto efectivo por 30, 60 o 90 días. Un código que pretende claramente sancionar, criminalizar, perseguir y encarcelar a los miles de trabajadoras y trabajadores precarios e informales de la región que se la rebuscan dia a dia para llevar un mango a sus familias.
Una gran campaña contra el código
Es claro que este código viene a fortalecer el poder punitivo del Estado y legitimar el accionar represivo de la Policía, tanto bonaerense como local, por eso es imprescindible que impulsemos una gran campaña contra este proyecto de Código de Convivencia. Ya logramos en el 2018 frenar su tratamiento y fue gracias a la coordinación y movilización entre los diferentes sectores que se ven afectados junto a los organismos de derechos humanos, organizaciones sociales, políticas y sindicales.
Cuando se trata de quien va a pagar la crisis en curso, entre el gobierno y la oposición no hay grieta.
Por eso desde la Multisectorial La Plata, Berisso y Ensenada debemos desarrollar y coordinar con todos los sectores una gran campaña y movilizarse masivamente contra el Código del Garro(te) y todas las politicas de ajuste y represión que vienen llevando adelante el gobierno nacional y provincial con Berni a la cabeza, ya que como denunciamos este Código será implementado por las mismas fuerzas responsables de cientos de casos de gatillo fácil, de la desaparición forzada y asesinato de Facundo Astudillo Castro y de la represión brutal a las familias de Guernica que pelean por vivienda digna.