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Red Internacional
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Por el conocimiento de la verdad. La lucha por el acceso al Archivo Histórico de la Policía Nacional en Guatemala

El Fondo del Archivo Histórico de la Policía Nacional de Guatemala forma parte de una serie de archivos y documentos esenciales para esclarecer los hechos ocurridos durante el Conflicto Armado Interno. La apertura de estos archivos policiales y militares ha sido una exigencia clave del movimiento democrático en Latinoamérica, buscando el acceso a la verdad y a la justicia.

Martes 1ro de octubre de 2024 14:04

El 13 de noviembre de 1960, un grupo de soldados y oficiales del Ejército guatemalteco se sublevaron contra el gobierno militar de Miguel Ydígoras. Este proceso dio inicio a lo que luego se consideraría como Conflicto Armado Interno en Guatemala o guerra civil, que se prolongó por 36 años, hasta la firma de los Acuerdos de Paz en 1996. Se estima que más de 200,000 personas fueron asesinadas, de las cuales 75,000 ocurrieron entre 1980 y 1982. Además, se registran 50,000 desaparecidos, lo que constituye una etapa marcada por la masiva violación a los derechos humanos. Estos hechos representan delitos de lesa humanidad que, hasta la fecha, permanecen impunes, en el contexto de una política de aniquilación dirigida contra la izquierda y sectores disidentes en el país.

La sublevación militar dio paso a una amplia organización de diferentes sectores de la población que exigían mejores condiciones de vida, así como la implementación de su sistema más justo y equitativo. Al mismo tiempo, surgieron diversas organizaciones insurgentes, siendo una de las primeras el Movimiento Revolucionario 13 de Noviembre (MR-13), que se fundó en 1962 y planteó la necesidad de una revolución en Guatemala. En ese mismo año, también se crearon las Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR). Este proceso mostró que, en una sociedad profundamente desigual, la organización de los de abajo, trabajadores, campesinos, indígenas y de los grandes sectores populares puede poner en duda el orden establecido.

En ese marco, a inicios de julio de 2005, durante la presidencia del empresario Óscar Berger, la Procuraduría de Derechos Humanos de Guatemala hizo un hallazgo inesperado: el Archivo Histórico de la Policía Nacional. Fondo documental que forma parte del Archivo General de Centroamérica en la ciudad de Guatemala, que contiene registros sobre las violaciones a los derechos humanos perpetradas por la Policía Nacional durante el Conflicto Armado Interno, pero el acervo documental es más extenso y abarca las fechas desde 1881 a 1997.

El descubrimiento ocurrido mientras la Procuraduría investigaba el riesgo de desastre asociado a un almacén de explosivos de la Policía Nacional. Edeliberto Cifuentes Medina, entonces Jefe de la Supervisión Administrativa de la Procuraduría, recibió quejas de los vecinos sobre la presencia de este almacén en la Academia de la Policía Nacional Civil, situada en la zona 6. Durante una revisión para verificar la retirada de los explosivos, Cifuentes encontró el archivo en un área cercana a la perrera del edificio, donde se conservaban miles de documentos que reflejan la represión sufrida por organizaciones políticas, sindicales, estudiantiles y guerrilleras, así como por comunidades indígenas [1].

Como resultado de los Acuerdos de Paz, fue fundada en 1997 la Policía Nacional Civil, que continuó con el ocultamiento de la información clave para la búsqueda de la verdad y la lucha por justicia de sobrevivientes y familiares de víctimas de la represión durante la guerra civil. Este ocultamiento ha sido la política de cada gobierno durante más de dos décadas y responde a la relevancia del archivo, dado que podría contener datos cruciales que involucran a mandos civiles y militares en las violaciones a los derechos humanos ocurridas durante el Conflicto Armado Interno.

Berger llegó a la presidencia en 2004 con un discurso de diálogo y unidad nacional, pidió perdón en nombre del Estado por las víctimas de la guerra civil entre 1960 a 1996 –una recomendación de la Comisión del Esclarecimiento Histórico sin poder procesal penal, auspiciada por la ONU–, ante los crímenes de lesa humanidad cometidos. Una política de reconciliación nacional que pretendió imponer la impunidad y el olvido, de la mano de algunas indemnizaciones, entregadas principalmente a sobrevivientes de pueblos indígenas, entre protestas, reclamos de justicia y advertencias de Berger de recoger las remuneraciones a quienes no estuvieran conformes.

En este marco, la presidencia de Berger hizo pasar desapercibido el hallazgo de los archivos, pues al mismo tiempo empleaba el poder estatal para imponer el olvido.

Actualmente, el Archivo de la Policía Nacional se ubica en la Avenida de la Pedrera 10-00, en la Zona 6. El edificio que lo alberga fue el mismo en el que se hizo el hallazgo. Sin embargo, tras una remodelación, el acceso principal al archivo fue eliminado. Ahora, quienes deseen consultarlo deben ingresar por el estacionamiento de la PNC y atravesar un callejón de terracería, adornado por murales que conmemoran a las víctimas del conflicto y que marcan el sitio del antiguo almacén de explosivos.

Este acceso restringido evidencia la resistencia de las instituciones policiales a entregar toda la información sobre el convulso periodo del Conflicto Armado Interno y el respaldo del Estado guatemalteco con ello. Además, refleja la impunidad en la que aún operan las instituciones militares, los grupos de poder económicos y de los viejos aparatos genocidas gubernamentales que suprimieron con sangre y saña movimientos de trabajadores, campesinos, indígenas y populares que cuestionaban la permanencia imperialista en la región durante más de tres décadas.

La ubicación del archivo dentro de las instalaciones de la Policía Nacional Civil no es casualidad, sino una estrategia para dificultar su acceso. Aunque el archivo debería funcionar bajo un marco civil independiente, su resguardo por parte de la Policía Nacional Civil complica la búsqueda de justicia y verdad.

Según el medio de comunicación Ocote, el Archivo Histórico de la Policía Nacional (AHPN) contaba al inicio de su funcionamiento con hasta 200 trabajadores y trabajadoras. Sin embargo, para el 2023, solo laboraban 20 personas en el lugar [2]. Esta drástica reducción del personal especializado se debe, en gran medida, a la falta de inversión de recursos por parte del gobierno. Las condiciones de abandono en las que se encuentra el archivo —producto de la falta de recursos y la disminución del personal—, así como la ausencia de trabajo de difusión del archivo entre las investigadoras e investigadores y la población interesada en la información resguardada, obstaculizan y limita el acceso a este importante archivo.

El acceso al archivo, así como su preservación en las mejores condiciones, es clave para la lucha contra la impunidad que existe en Guatemala por crímenes de lesa humanidad perpetrado por el ejército y los gobiernos de turno genocidas.

En Guatemala ha surgido a cuentagotas una memoria histórica compartida de voz en voz sobre las masacres cometidas, su construcción es un proceso a contracorriente de los poderes militares y burguesías involucrados en un genocidio que jamás ha reconocido el ejército, mucho menos su colaboración con Estados Unidos para liquidar toda oposición política durante el conflicto armado.

El gobierno de Bernardo Arévalo impulsa un plan de dignificación nacional de las víctimas de la represión gubernamental en Guatemala, a cargo de la Comisión Presidencial para la Paz y los Derechos Humanos, que pretende el desarrollo de familias y comunidades afectadas, la construcción de un registro nacional de víctimas, el resguardo y digitalización del archivo del antiguo programa nacional de resarcimiento y la búsqueda de reparaciones de daños. Sin embargo, todas estas medidas no alcanzarán a hacer justicia mientras no sean juzgados los genocidas, mandos superiores directos, ejecutores y cómplices del genocidio. Sus nombres, hechos cometidos y responsabilidades se encuentran en los Archivos.


[1Mildred Hernández, «El hallazgo del Archivo Histórico de la Policía Nacional: Entrevista con Edeliberto Cifuentes Medina», Ciencias Sociales y Humanidades 7, n.o 2 (2020): 89-98.

[2Angélica Medinilla, «El Archivo Histórico de la Policía abandonado en la precariedad», Agencia Ocote, 10 de febrero de 2023, https://www.agenciaocote.com/blog/2023/02/10/el-archivo-historico-de-la-policia-abandonado-en-la-precariedad/.