Una familia mendocina necesitó casi $ 40.000 en Julio para alcanzar la Canasta Básica. Esto equivale a más de dos salarios mínimos. Misión imposible para el bolsillo trabajador
Viernes 21 de agosto de 2020 00:00
Este jueves, la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza, DEIE, publicó el informe correspondiente al valor de las Canastas Básicas Alimentaria y Tota durante el mes de Julio.
La Canasta Básica de Alimentos establece la linea de indigencia, mientras que la Canasta Básica Total establece la linea de pobreza, según los ingresos de una "familia tipo 2" (dos adultos y dos hijos). Según el informe de la Deie, una familia mendocina necesitó $ 39.889 para satisfacer sus necesidades.
Mientras que los ingresos de la mayoría de las familias trabajadoras están congelados por la no apertura de paritarias y la gran cantidad de afectados por despidos, suspensiones y recortes salariales, la Canasta Básica aumentó $ 1.147 en solo 30 días. Desde que comenzó el año, lo que necesitó una familia para no ser considerada pobre aumentó $ 6.600, lo que hace verdaderamente una odisea llegar a fin de mes a miles de familias trabajadoras.
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Con estos datos, dos salarios mínimos no alcanzan para cubrir la canasta básica. Por su lado, la linea de indigencia en la provincia quedó en $ 15.401.
En el sector privado, los despidos, suspensiones y recortes salariales afectaron a miles de trabajadores y trabajadoras, y la desocupación sigue en aumento, sobre todo entre las mujeres y la juventud. Según datos del Ministerio de Trabajo de la Nación difundidos a principios de este mes, Mendoza es una de las provincias donde más cayó el empleo registrado en el último año. En el informe publicado, el empleo privado cayó un 7.1 %, ubicando a la provincia en el tercer lugar donde más empleos se destruyeron.
Por su lado, entre los trabajadores y trabajadoras estatales las paritarias siguen congeladas desde el año pasado y el aguinaldo se pagó en cuotas.
La inflación acumulada en la provincia en lo que va del año, alcanza el 15.5 %, pero rubros sensibles al bolsillo trabajador como los alimentos y la vestimenta aumentaron aún mas: 17 % y 22.6 % respectivamente.
Según los últimos datos del Indec, en el Gran Mendoza más del 46% de las personas pasó la cuarentena en la pobreza e indigencia. Estos datos representan a 393.258 en situación de pobreza y 80.272 en la indigencia. Durante la pandemia, la situación económica en la provincia se tornó crítica, donde la desigualdad social sigue creciendo haciendo pagar a las familias trabajadoras la crisis.