El granate dio vuelta la serie ante el River de Gallardo en un partido épico: lo remontó con un Sand descollante en el segundo tiempo y terminó 4-2. La final podría ser ante Gremio de Porto Alegre.
Augusto Dorado @AugustoDorado
Miércoles 1ro de noviembre de 2017
Las redacciones de todos los medios estaban preparando en el entretiempo la nota de River finalista. Después de un encuentro de ida en el Monumental con un Lanús errático e imprevistamente defensivo, después de un primer tiempo en el que terminó perdiendo el local 1-2, la historia parecía sentenciada. Para el granate, apenas un hilito de esperanza por ese descuento del “Pepe” Sand sobre el epílogo de esa primera parte. Pero, a poco de cumplirse medio siglo de la famosa obra de Dante Panzeri, Lanús recuperó aquella máxima que afirma que el fútbol es la dinámica de lo impensado.
37 años de edad. Hoy, participó en 3 de los 4 goles que hizo Lanús para remontarle a River Plate. Qué partido copero hizo PEPE SAND. 🇦🇷 pic.twitter.com/FDHREbkp3U
— Invictos (@InvictosSomos) 1 de noviembre de 2017
Con el empuje de Sand, a esta altura uno de los próceres del panteón granate, Lanús salió a todo o nada en el segundo tiempo y con un gol del “Pepe” casi desde la salida del vestuario, el equipo de Almirón avisó que iba por todo.
Hay que decirlo: el arbitraje fue muy flojo y perjudicó a River. Cuando los de Gallardo estaban 2-0 arriba, el árbitro colombiano Wilmar Roldán se comió una mano que era penal claro para los visitantes. Pudo haber recurrido al VAR (sigla de la tecnología conocida como Asistencia Arbitral por Video) e inexplicablemente no lo hizo. Pero también hay que decir que lo que impuso Lanús fue su carácter, y ahí no hay injusticia que valga.
River traía la ventaja del Monumental (1-0) y con goles de Scocco (quizás el jugador que sufre la mayor frustración porque hizo un torneo brillante) y del pibe Gonzalo Montiel, ya se probaba el traje de finalista. Pero los dos baldazos de agua fría de Sand lo despertaron del sueño. Y el gol de Lautaro Acosta transformó el sueño en pesadilla.
Desde ese momento, River parecía desinflado, aunque tuvo aproximaciones y permitió lucir a otro de los pilares de Lanús que fue el arquerito Andrada. Y pese a que tenga como condimento una pizca de injusticia, porque la definición fue con un penal no cobrado en primera instancia y luego sentenciado por recurrir al VAR, el sabor final tiene mucho gusto a hazaña. Si quiere probarlo, seguramente es salado, como esas lágrimas de emoción que cobijaban una alegría inusitada para este Lanús, un verdadero club de barrio que quiere demostrar lo grande que significa en estos tiempo todavía serlo.
Lanús es finalista de la Copa Libertadores de América. Todo indica que enfrentaría a Gremio de Porto Alegre, aunque todavía no hay que dar por noqueado a un Barcelona de Ecuador que fue una de las sorpresas de esta copa (pero que debe remontar un dificilísmo 0-3). Pero es así, en pocos días, Lanús va por la gloria. Hincha del granate, no ponga la alarma. Usted no está durmiendo aunque esté disfrutando de un sueño.
Dale, tomá emocionate. Lanús es finalista de la Copa Libertadores, esto es fútbol en estado puro, lo demás es cuento pic.twitter.com/AeQ85IAnZa
— Hechos Pelota (@HechosPelota) 1 de noviembre de 2017
