Trabajadores de Las Palmas y Génova denuncian el no pago de sueldos e intimidaciones de cierre por parte de sus empleadores en medio de la pandemia.
Domingo 19 de abril de 2020 19:21
Continúan los ataques a los trabajadores de la gastronomía
Desde La Izquierda Diario venimos acompañando los reclamos de los trabajadores del sector gastronómico, que desde el comienzo de esta pandemia no perciben sus sueldos, o lo hace de forma parcial, y deben trabajar sin las condiciones de higiene requeridas ante la emergencia sanitaria. Como ya señalamos hace poco, hay más de 100 pizzerias del conurbano que no están pagando los sueldos a sus trabajadores y hoy a esa lista se suman las pizzería Génova y Las Palmas de Lanús. Estas maniobras de rebajas y no pago por parte de las patronales busca, sin el más mínimo escrúpulo quitarle la comida de la mesa a una familia, para descargar el peso de la crisis sobre sus trabajadores.
Por rama, según el Observatorio de Despidos durante la Pandemia, actualizado al 14 de abril, el rubro gastronomico ocupa el segundo lugar en cuanto ataques al salario se refiere. La medida de adeudamiento de pagos que vienen implementando más recientemente las empresas, alcanza un 25% del golpe al bolsillo que están recibiendo los trabajadores.
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Una ley anti-despidos de bajo calibre
La ley anti despidos promulgada vía decreto por el presidente Alberto Fernández, deja muchos vacíos legales de los cuales los empresarios siguen haciendo provecho en su favor. Con la pandemia como excusa, cualquier razón parece convertirse en valida para cuidar sus bolsillos a costa de las condiciones de vida del pueblo trabajador. Sumado a la ausencia de los sindicatos, vemos como dueños de cadenas multimillonarias, irracionalmente, dicen tener problemas monetarios para no garantizar la totalidad de los sueldos.
Nicolas del Caño, diputado del Frente de Izquierda, durante la reunión virtual entre el presidente y los bloques de diputados señaló una realidad: “Las patronales siguen despidiendo a pesar del decreto”. Además, criticó la excepción contenida en el DNU 329/20, que permite suspender con rebaja de salarios. “Es algo que estamos viendo de manera generalizada. Con ese artículo se avala algo que las patronales están intentando: implementar una reforma laboral en los hechos”.
El presidente adjudicó desconocer el uso de esa excepción e inclusive quiso responsabilizar a los trabajadorxs de la salud diciendo que “Les estamos pidiendo por favor… que tenga un cuidado especial con este tema, hay un exceso de confianza y gana a los médicos su vocación de ayudar y los termina metiendo en estos problemas”. Nosotros sostenemos que esto es una total responsabilidad de la desidia empresarial por sobre las vidas humanas y no puede esperar, por eso desde el frente de Izquierda hemos presentado un proyecto de impuesto extraordinario a las grandes fortunas.
La organización como respuesta
Los ataques en forma de despidos, recortes y suspensiones, crecen a cada hora, pero el gobierno sigue sin dar respuesta concreta a estas problemáticas que nos atraviesan a las grandes mayorías. Son necesarias medidas de autodefensa, como la propuesta de gravar las fortunas de los millonarios para financiar un plan de emergencia de la clase trabajadora, que deben prepararse organizándose desde los puestos de trabajo en defensa de los mismos y contra los ataques patronales. Debemos exigir a los sindicatos romper el silencio y responsabilizarse de su rol en defensa de los intereses de los trabajadores. Como es el caso de las pizzerias que intimidan con cierres, se tiene que exigir a su vez la apertura de los libros de contabilidad.
Desde La izquierda invitamos a que acerquen sus denuncias y testimonios ante estas realidades, como recientemente fue el caso de empleados de las cadenas McDonalds y Burger King. Se debe hacer eco los ejemplos de organización y lucha que están dando, así como también seguir articulando con organismos como el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) y haciendo públicas las denuncias contra estos atropellos empresariales.
