Loretta Ortíz, “coordinadora del proceso de pacificación” de AMLO, aseguró que el Papa estará “por Skipe” en los 40 foros que se llevarán a cabo a partir del 7 de agosto próximo. Fue desmentida por el Vaticano por lo que López Obrador la respaldó enviando al Papa cartas de invitación.
Raúl Dosta @raul_dosta
Jueves 19 de julio de 2018
La idea que expresó lacoordinadora del proceso de pacificación del próximo gobierno de México, es que el pontífice participe a través de una videoconferencia, en los foros para pacificar al país y definir a partir de éstos una posible ley de amnistía. Dichos foros se celebrarán del 7 de agosto al 24 de octubre próximo.
Desde hace varios meses el ahora presidente electo ha venido planteando la necesidad de acabar con la violencia exacerbada en los dos últimos sexenios y ofrecerle una salida a las víctimas de tantos crímenes, desapariciones forzadas y feminicidios.
Como dice Javier Sicilia: “Pese a la irrefutable verdad de sus testimonios, a las víctimas se les ha intentado olvidar reduciéndolas a cifras y abstracciones, despreciándolas (“algo habrán hecho”, “seguramente se lo merecían”, “ya supérenlo”), impidiendo, como en el caso Ayotzinapa, el esclarecimiento de los hechos, limitando la apertura de fosas clandestinas, colocando por encima del sufrimiento otras agendas y normalizando el horror.” *
Tan impresentable es la política de los gobiernos de Calderón y Peña Nieto que el próximo presidente tiene que demarcarse totalmente de dichos exprresidentes, tomando como bandera propia la cuestión de la violencia y sus víctimas. Así, ha declarado entre sus prioridades de gobierno, “cambiar la estrategia fallida de combate a la inseguridad y la violencia” y elaborar un “plan de reconciliación y de paz”.
Pero ¿el plan de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) llegará hasta donde llegan los reclamos de las víctimas sobrevivientes y los familiares de las fallecidas o desaparecidas: presentación con vida, juicio y castigo a los culpables? ¿Qué querría decir AMLO con su planteamiento de “amnistía” que tanto le recriminaron sus contrincantes priista y panista, asumiendo ésta como perdón a delincuentes?
El mismo Sicilia expresa su temor a que el objetivo de AMLO no sea lo que los agredidos desde la “guerra contra el narco” hasta las desapariciones forzadas y matanzas de las fuerzas armadas esperan recibir en son de justicia: “Ante hechos sombríos, todos los pueblos sin excepción prefieren el olvido a la verdad y el recuerdo. De allí esa palabra que se deslizó como un lapsus linguae en la justicia transicional: amnistía (olvido)". *
Pero este pueblo no quiere saber de ningún tipo de olvido. Es por ello que no ha dejado de movilizarse y acompañar a los padres de los 43; es por ello que aún siguen enfrentando al estado oaxaqueño demandando justicia para las víctimas de Nochixtlán, es por ello que las madres y esposas, mexicanas y centroamericanas, de inmigrantes desaparecidos organizan, incansablesm caravanas de búsqueda por todo el país. Es que ellos quieren justicia (presentación con vida y castigo a los culpables).
¿La paz de la mano de la Iglesia?
Tal pareciera que la propuesta de AMLO busca atemperar el ánimo de luchar de las víctimas de la violencia a través de sus 40 foros de discusión por todo México y qué mejor reconciliador que el lenguaje persuasivo de los curas y obispos de la Iglesia católica. Bueno, aquí hay que hacer un paréntesis porque AMLO tiene un poquito enojados a los jerarcas católicos-apostólicos-romanos, luego de engancharse electoralmente con los del negocio de enfrente, los evangélicos del Partido Encuentro Social (PES), a quienes les hizo acceder a 56 jugosas diputaciones y 9 senadurías, un gran resultado para ellos aun cuando pierdan el registro de su partido.
Y para inducir en aquellos que se movilizan por el paradero de sus seres queridos y de aquellos que los acompañan solidariamente, la propuesta es “consultar” realizando los mencionados 40 foros, impulsando el perdón a los responsables (criminales, narco, funcionarios de gobierno) y para ello se requiere de la autoridad de la Iglesia. ¿Y quién más que el mismísimo Papa aunque sea a través de un video? Así, abusando de las creencias religiosas de los agraviados, es como AMLO se propone pacificar el país, de acuerdo con su declaración de campaña:
“Si es necesario vamos a convocar a un diálogo para que se otorgue amnistía, siempre y cuando se cuente con el apoyo de las víctimas, los familiares de las víctimas. No descartamos el perdón. En mi tierra siempre se dice ’ni perdón ni olvido’, yo no comparto eso. Yo sí creo que no hay que olvidar, pero sí se debe perdonar, si está de por medio la paz y la tranquilidad de todo el pueblo”.
Pero qué calidad moral pueden tener los jefes eclesiásticos de México y el Vaticano que han solapado durante décadas a sacerdotes que abusaron de sus feligreses, protegiendo a centenas de curas pederastas para que no puedan ser castigados por sus actos.
El Arzobispo Rivera, recién retirado de su función, se fue señalado por encubrir a varios de ellos. El Papa Francisco, Bergoglio, colaboró con la dictadura en Argentina, años en los que la Iglesia solapaba los crímenes militares y ayudaba a que los prisioneros torturados confesaron de los actos que se les adjudicaban. El mismo Bergoglio entregó niños de los detenidos desaparecidos a familias militares y delató a algunos de sus sacerdotes que se oponían a las atrocidades del régimen militar.
Ni perdón ni olvido
Cientos de miles asesinados bajo los dos ultimos gobiernos prianistas no pueden quedar en el olvido ni pasar desapercibidos sólo porque las víctimas y sus familiares les otorguen el perdón o al menos sean inducidos a olvidar el delito aunque vivan de por vida recordando y extrañando a sus seres queridos muertos por la barbarie de la guerra contra el narcotráfico desplegada desde 2006.
Al parecer ése es el objetivo de la aminstía, no otorgada desde el poder sino como un olvido inducido en los que padecen día a día la violencia. Mientras, las causas materiales de la misma seguirán igual, sin ser combatidas. Como si los delitos criminales se erradicaran a partir del gobierno lopezobradorista y sólo hubiera que cicatrizar las heridas del pasado.
Los de abajo, los trabajadores y campesinos, principales víctimas de la violencia criminal e institucional, deben seguir en sus luchas apoyadas por el pueblo solidario, sin confiar un ápice en estas medidas de “pacificación” de López Obrador apoyado en las sotanas abusadoras de la Iglesia.
También puedes leer: A consulta amnistía a líderes del narcotráfico propone AMLO tras crìticas
* "Verdad y justicia, los pendientes", publicado en revista Proceso No. 2176