Ana y Andrea, dos estudiantes y representantes estudiantiles de la universidad Autónoma de Madrid denuncian que las universidades están tomando las decisiones a puerta cerrada, sin contar con los problemas y necesidades del estudiantado. Reivindican la devolución de la matrícula, ni un solo suspenso y una universidad que luche contra la pandemia.
Lunes 20 de abril de 2020
Ante el confinamiento los y las estudiantes estamos siendo muy perjudicadas debido a la suspensión de las clases presenciales en las universidades. Los órganos de gobierno de las universidades están tomando todas las decisiones a puerta cerrada, de manera antidemocrática, sin ofrecernos ningún tipo de información transparente y, por supuesto, sin contar con nosotros, los estudiantes, para la toma de decisiones que al final nos están perjudicando de forma directa.
La docencia on-line está siguiendo adelante, como si nada sucediera, no existe ningún tipo de coordinación respecto a las evaluaciones o respecto al final del curso y no se están teniendo en cuenta limitaciones que podemos tener en nuestros hogares como la falta de material. En ningún caso se está supliendo la docencia presencial.
Creemos además que no se está teniendo en cuenta el enorme papel que podría estar teniendo la universidad en un momento como este. Debería ofrecer todas sus instalaciones y todos sus recursos al servicio de luchar contra esta pandemia. Y lo que hemos visto es que como mucho, se han hecho algunas contribuciones parciales para la lucha contra el coronavirus, pero de ningún modo han sido suficientes para un momento de gravedad como el que estamos viviendo.
🔴 LAS Y LOS ESTUDIANTES QUEREMOS DECIDIR
📢 ¡Peleemos por la devolución íntegra de las matrículas, por que no haya ningún suspenso en esta situación y por la movilización de todos el conocimiento y los recursos de la universidad para luchar contra la pandemia! pic.twitter.com/9zBf4CmLlb
— Contracorriente Madrid (@Contrac_Mad) April 19, 2020
Por eso, desde Contracorriente planteamos que el conjunto del movimiento estudiantil haga suyas las siguientes medidas:
1) Devolución íntegra de la matrícula. Esta no es una nueva exigencia, ya que creemos que la universidad pública debería ser gratuita para que todos, incluidos los hijos de las clases populares, puedan estudiar. Además, en la situación en la que nos encontramos es más necesario que nunca. También exigimos también la plena disposición de recursos on-line gratuitos como manuales, libros, documentales, etc. Además de una reducción de la carga lectiva y el establecimiento de los métodos y fechas de evaluación cuanto antes, de una manera democrática y transparente.
2) Con todo ello exigimos que no haya ni un solo suspenso en estas condiciones tan difíciles y que se mantengan todas las becas.
3) Por último, es necesaria la movilización de todos los conocimientos y los recursos tanto sanitarios como científicos y técnicos. Además, que la universidad haga público y accesible todos los recursos con los que cuenta, y que las patentes y las investigaciones que se encuentran en manos privadas sean liberadas.
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