Este miércoles el gobierno estuvo a punto de fracasar, pero consiguió el dictamen a último momento con la llegada express de Guillermo Francos al Senado. Luego de tener que levantar el plenario de comisiones donde no habían conseguido las firmas suficientes, el nuevo jefe de gabinete logró en privado destrabar las firmas de Guadalupe Tagliaferri del PRO, José Carambia de Santa Cruz y el peronista Edgardo Kueider de Unidad Federal. A partir de los próximos 7 días el oficialismo puede convocar la sesión y ya hay anunciadas movilizaciones frente al Congreso para rechazarla.

Jesica Calcagno @Jesi_mc
Miércoles 29 de mayo de 2024 20:30

A punto de fracasar, Francos destrabó la negociación y están las firmas para el dictamen de la Ley de Bases.
El gobierno de Javier Milei atraviesa una de las peores semanas desde que asumió, y no se podía permitir un nuevo traspié que exponga sus debilidades. Este miércoles el Senado tuvo el plenario de comisiones de Presupuesto y Hacienda, Legislación General y Asuntos Constitucionales. Allí no pudo conseguir el dictamen y pasó a cuarto intermedio. El nuevo jefe de gabinete, Guillermo Francos, se dirigió al palacio legislativo inmediatamente y más de una hora después logró destrabar las firmas que faltaban. Fue en privado en los despachos. La llave para habilitar el tratamiento se la dieron la senadora Guadalupe Tagliaferri del PRO, José Carambia (Santa Cruz) y Edgardo Kueider de Unidad Federal. Este último fue electo por el Frente de Todos en Entre Ríos, pero bajo el gobierno de Alberto Fernández decidió separarse y formar otro bloque que también integra la cordobesa Alejandra Vigo (que responde al gobernador Llaryora).
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El dictamen recién será oficial a partir de este jueves. Como la confirmación de las firmas se hizo en privado luego de finalizado el plenario de comisiones, no pudieron completar los trámites formales. Pero está el compromiso de los legisladores que faltaban. Así el gobierno puede convocar la sesión en la Cámara Alta. Puede hacerlo a partir de los próximos 7 días: la fecha que están barajando es el 12 de junio pero aun no está confirmada. Varias organizaciones ya anunciaron convocatorias para movilizar a Congreso para rechazarla cuando se confirme la fecha. Como la que hizo el Encuentro de Trabajadores que se reunió el sábado pasado, con organizaciones sindicales, sociales, estudiantiles, asambleas barriales y la izquierda.
En la jornada de este miércoles, Martín Lousteau (UCR) anunció que presentará un dictamen propio. Sigue cuestionando el RIGI y la facultad al Poder Ejecutivo de disolver y desfinanciar organismos públicos, y sostuvo que los cambios que incorporó el oficialismo son "meramente cosméticos". José Carambia (Santa Cruz), que responde al gobernador Vidal, primero dijo que iba a presentar su propio dictamen, pero tras la llegada de Francos después de finalizado el plenario de comisiones, terminó poniendo su firma en disidencia al dictamen oficialista. El gobierno ya había cedido haciendo una modificación en el impuesto al salario, con un mínimo imponible más alto para la zona patagónica. Luego sumó otro reclamo: elevar las regalías mineras que van a las cajas provinciales. Finalmente, el texto se modificó para que pasen del 3% al 5%.
El dictamen que se consiguió tiene varias modificaciones al texto que obtuvo media sanción en Diputados, y ya es un hecho que tendrá que volver a la cámara de inicio. Pero si el Senado le da la aprobación en general, aunque tenga que volver a Diputados, ya es una sanción en los hechos. Porque la Cámara Baja ya no puede desechar la ley, solo puede aceptar los cambios de la Cámara Alta o insistir con el texto de la media sanción. Por eso el reclamo de las organizaciones que convocan a movilizar es para que se rechace en general, que es la única forma de que caiga.
La Libertad Avanza se pudo llevar el dictamen gracias a las firmas del PRO, el bloque de los ex Juntos por el Cambio que encabeza el senador Romero, la cordobesa Alejandra Vigo (responde a Llaryora) y la misionera de Passalaqua, Sonia Rojas Decut. También sumaron sus firmas en disidencia la UCR (a excepción de Lousteau que hará su propio dictamen y Maximiliano Abad que no puso el "gancho" en ninguno), la neuquina Lucila Crexell (con terminales con el gobernador Figueroa), y Mónica Silva de Rio Negro (del gobernador Weretilneck). ,
A pesar de las modificaciones, la Ley de Bases está diseñada para beneficiar a los más ricos del país mientras ataca a las mayorías trabajadoras con una reforma laboral que quita derechos, la eliminación de la moratoria jubilatoria que afectará especialmente a las mujeres, aumentos para monotributistas, restitución del impuesto al salario, y le dará facultades a Milei para más tarifazos, disolución y desfinanciamiento de organismos públicos, y una avanzada privatizadora.
La Ley de Bases todavía tiene un final incierto. La Libertad Avanza sigue haciendo el poroteo para la votación en el recinto y el Congreso tendrá que enfrentarse a nuevas movilizaciones. En medio de la inestabilidad del gobierno de Milei, habilita a que la irrupción de nuevas protesten cobren más protagonismo en la definición de dos leyes claves para el poder ejecutivo.

Jesica Calcagno
Nació en Buenos Aires en 1984. Licenciada y profesora en Sociología (UBA). Acreditada en el Congreso.