A menos de 24 horas de que la derecha, la ex Concertación y sectores del Frente Amplio como Revolución Democrática o el diputado Gabriel Boric firmaran el “Acuerdo por la Paz y Nueva Constitución” y salieran con un discurso hipócrita llamando a la calma, un nuevo muerto con responsabilidad del accionar de agentes del Estado se suma a la negra lista de un mes convulsionado.
Dauno Tótoro Santiago
Sábado 16 de noviembre de 2019
La hipocresía del gobierno no tiene límites. En la mañana Karla Rubilar llamaba a la calma, mientras ex Plaza Baquedano amanecía con lienzos blancos y una palabra al centro: “Paz”. Se trataba de una operación que acompañaba la gran jugada de la semana: la firma del “Acuerdo por la paz”.
La derecha junto a la ex Concertación y sectores del Frente Amplio firmaron este acuerdo que supone la garantía de impunidad para Sebastián Piñera y los responsables políticos de las sistemáticas violaciones a los Derechos Humanos ocurridas durante este último mes.
Y luego llamaron a la paz y a la calma.
Hipocresía concertada en los pasillos “de los palacios”. Porque en la calle la realidad fue otra. La Plaza de la Dignidad (ex Plaza Italia) fue brutalmente reprimida. Y allí perdió la vida un joven, Abel Acuña era su nombre.
Fue producto de un paro cardiorrespiratorio, según se sabe hasta ahora. Todavía no se ha logrado identificar producto de qué ocurrió el paro. Lo que sí es claro es que el aire estaba irrespirable por el uso de lacrimógenas por parte de Carabineros.
Lo que también se sabe es que Fuerzas Especiales reprimió a los propios funcionarios del SAMU con agua tóxica, gases y balines, hiriendo con un perdigón a una trabajadora que trataba de rendirle primeros auxilios a Abel. La acción de Carabineros dificultó y complicó una atención oportuna para el joven que agonizaba.
A los policías no le importó. Seguían reprimiendo y llenando de gases la Plaza.
¡Lo decimos fuerte y claro: Piñera es responsable! Cualquier pacto, acuerdo o negociación con este gobierno es traicionar la memoria de los compañeros caídos.
Denunciamos que mientras por arriba llegan a acuerdos con nombres rimbombantes, mientras firman “Acuerdos por la Paz” en los pasillos del ex Congreso, mientras siguen decidiendo los mismos de siempre a espaldas de la gente, los muertos los sigue poniendo el pueblo y los movilizados.
Hoy más que nunca se hace necesario que a las federaciones estudiantiles, organizaciones sindicales, a la Mesa de Unidad Social, a la CUT, a los organismos de DDHH, que convoquen a movilizaciones a nivel nacional por justicia para Abel Acuña preparando una huelga general para que caiga este gobierno de criminales.
Exigimos juicio y castigo para los responsables materiales y políticos de su muerte, y de todas las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas durante este mes de protestas.
¡No permitamos que siga reinando la impunidad! ¡La fuerza de nuestra movilización puede conquistar la justicia: para eso, ninguna negociación con los criminales! ¡El Acuerdo por la Paz es una farsa y una hipocresía, un engaño basado en el derramamiento impune de sangre del pueblo!
Dauno Tótoro
Dirigente del Partido de Trabajadores Revolucionarios (Chile), y ex candidato a diputado por el Distrito 10.
