En lo que ha sido un escándalo de proporciones en Sanhattan, siguen saliendo a la luz nuevos antecedentes, la relación entre Hermosilla y Villalobos e ingentes movimientos de dineros, muestran la profundidad de cómo operan las redes subterráneas del empresariado.
Miércoles 29 de noviembre de 2023
Hermosilla, “connotado abogado de la plaza”, pareciera estar quedándose solo, triste y abandonado, todo después de que salieran a la luz los audios donde junto a la abogada María Leonarda Villalobos y el empresario Daniel Sauer planificaban una serie de acciones para sobornar y cometer delitos del más alto nivel.
Ahora, políticos tradicionales desde la derecha (Fundación Jaime Guzmán) hasta el Frente Amplio (Crispi) reniegan de quien fuera el paladín de varios exministros, empresarios y políticos que recurrieron a sus servicios para la defensa de sus causas corporativas.
De esta manera Hermosilla se transformó en un personaje con amplias redes de contacto y poseedor de una amplia influencia en la política ahora, caído en desgracia, es renegado por moros y cristianos.
Pero más allá del ostracismo que sufrirá temporalmente, bajo ese manto de aislamiento, Hermosilla así como Villalobos, lograron amasar grandes sumas de dinero gracias a los negocios sucios de un mercado casi nada regulado (Factoring) y con muchas "empresas" que operan casi al margen de la ley.
Estas operaciones (de compra y venta de documentos) permitió a Hermosilla, Villalobos y Sauer mantener una contabilidad paralela, al más puro estilo narcotráfico, donde se apuntaban operaciones que, hasta ahora, pareciera ser que no fueron notificadas al SII y por lo tanto se abre una nueva arista de posible evasión tributaria entre otras posibles causas.
Y ojo, que no se habla de montos menores. Según constató el diario El Mostrador, estamos hablando de montos que superan ampliamente los siete mil millones de pesos ($7.000.000.000) que podrían no haber sido declarados.
Para tener una referencia, en 2014 se llamó “robo del siglo” a la sustracción de $6mil millones del aeropuerto (monto inferior al posible fraude de Hermosilla) y en el 2017 el nuevo “robo del siglo” implicó un robo de $15mil 800 millones, pero que repartidos entre los 16 detenidos dejó menos de mil millones para cada uno así que Hermosilla podría seguir topeando aquí.
Pero claro, Hermosilla no es un miembro del ampa de la periferia de Santiago, sino un “connotado abogado de plaza”, un miembro privilegiado de Sanhattan caído en desgracia pero que podrá llorar con mucho cinismo, en alguna de sus tantas propiedades rodeado de sus vecinos de la elite que quizás ya no lo va a saludar cuando pasen por fuera de su mansión.
Pero Villalobos y su marido no se quedan atrás, según la misma nota de El Mostrador, los montos que ambos movían a través de Factop, rondan los $5 mil millones, un poco bajo el “robo del siglo” del 2014 pero no tan lejos del de Hermosilla.
Ahora la Policía de Investigaciones sigue revisando los archivos incautados a la contabilidad de Factop y a los abogados Hermosilla y Villalobos, pero ya han salido a la luz otros personajes ligados a estos movimientos como la exdiputada UDI Andrea Molina, familiares del diputado Jorge Alessandri (UDI) o el ex alcalde Felipe Alessandri, también figuran la sociedad de inversiones Saturno, del expresidente Eduardo Frei y Marta Larraechea. Todo aun esta por investigarse y ver que tan al tanto estaban o no de los movimientos irregulares de la empresa.
Delincuencia y “delincuencia”
Con el clima de inseguridad instalado en la agenda pública, pareciera ser que este tipo de casos no fueran algo parecido a esa “Delincuencia” con mayúscula, esa de que la Villalobos se quejaba al inicio del audio filtrado, esa que no deja a “a los verdaderos chilenos” hacer negocios tránsfugos tranquila sin miedo a que te funen.
Este es el nivel de hipocresía con la que la elite política y empresarial hablan de delincuencia, mientras hacen gargaras con la inmigración, los robos y el narcotráfico, sus amigos y vecinos, esos de las casitas del barrio alto, solo comenten errores, terribles errores pero no se piden las penas del infierno para esos personajes, así como tampoco se pidieron para los Délano y Lavín, para Troncoso, Barriga o ahora último Luis Yañez (alcalde UDI de Algarrobo), un par de clases de ética y seguir para adelante porque según ellos que es tan terrible puede ser conseguir un perdonazo de $3mil 500 millones de pesos para un gran contribuyente, así como fueron para La Polar, la colusión del papel Tissue, los pollos y otros tantos más.
En Chile existen claramente dos tipos de justicia, una para ricos y una para pobres, una que quiere te sequen en la carcel y otra donde todo queda entre familia.