Ya se anuncian las discusiones sobre los aumentos salariales que las conducciones gremiales plantearán para las próximas paritarias.
Viernes 9 de enero de 2015
Este martes se conoció por los medios locales que la conducción de la UEPC (docentes) planteará un piso de aumento salarial del 36%, partiendo de lo que consideran como la inflación del 2014. La conducción de los docentes cordobeses firmó un acuerdo del 31.6% el año pasado y logró que el gobierno provincial otorgara un bono de fin de año. Pero esos montos quedaron atrás de una devaluación de la moneda que diversos análisis consideran de entre el 35 y el 40%.
Este jueves se conoció la evaluación hecha por el Observatorio de datos económicos y sociales de la CGT liderada por Hugo Moyano, que sitúa el alza de precios en un 35,06% en total y en más del 40% en el rubro alimentos. La conducción de la UEPC negocia un aumento salarial que, de cerrarse los acuerdos en los tiempos habituales, empezaría a correr a partir de marzo, haciendo caso omiso a la inflación de los primeros meses del año. Precisamente por eso, la oposición dentro del gremio ya salió a rechazar este pedido.
Hay que señalar además que, como es habitual en las conducciones gremiales, el aumento planteado en enero se utiliza como parte de una estrategia de negociación que, muy probablemente, terminará siendo a la baja. “Eso como para arrancar” es la frase con la que un dirigente de UEPC graficó esta situación al diario Alfil, según lo publica éste en su edición de ayer. Así, el 36% pedido se convertirá en una cifra inferior o se fragmentará en varios pagos que la inflación del 2015 devorará en los meses siguientes.
Cuidando al jefe…
Otras fuentes indican también que el SEP (Sindicato de Empleados Públicos) plantearía un monto cercano al 40% para todo el año, siguiendo la pauta inflacionaria globalmente reconocida. Sin embargo, dado que estamos ante un año electoral, la conducción de este gremio, en menos de José Pihen, estaría dispuesta a aceptar un porcentaje menor en el período inicial del año y presionar por un nuevo bono –como el que recibieron el año pasado-, luego de las elecciones.
Así buscarían evitarían complicaciones al gobierno provincial y, en particular, a su jefe político José Manuel De la Sota, que está en una maratónica campaña para ver si logra remontar la distancia abismal que lo separa de los principales candidatos presidenciales.
Al mismo tiempo, el PJ provincial enfrentaría un escenario complicado si se hace efectiva la fórmula común entre la UCR y el PRO. No está de más recordar que Pihen es legislador provincial y este año podría intentar revalidar su escaño. Un elemento más para no agitar las aguas de la política provincial.
…y también al patrón
En el sector privado todavía no se conocieron anuncios oficiales sobre cuál será el monto salarial a negociar, pero las declaraciones del delasotista Rubén Urbano, titular de la UOM Córdoba, preanuncian una negociación a la baja partiendo de aceptar la crisis por la que atraviesan las empresas sin discusiones.
Hace pocos días, Urbano salió a diferenciarse por derecha (lo cual ya resulta difícil) de Antonio Caló, titular la UOM Nacional, cuando éste amenazó con posibles medidas de fuerza para que las cámaras empresarias abonen un bono de $3000. En declaraciones al diario La Voz del Interior, el dirigente cordobés afirmó que el verano no es un buen momento para lanzar una medida de fuerza. Declaración paradójica teniendo en cuenta que la UOM Córdoba tampoco realizó medidas de fuerzas serias a lo largo de todo el año –con la excepción de un paro con movilización- a pesar de los miles de suspensiones y de los cientos de despidos hormiga que sufrieron los trabajadores metalúrgicos en la provincia. Entre las causas de esos despidos, como lo evidencia el reclamo de los trabajadores de Valeo, se encuentra la persecución anti-sindical.
La conducción de la UOM en estos meses dejó pasar esos ataques contra la organización obrera que, en el medio de una crisis como la actual, sirven para debilitar la fuerza de los trabajadores a la hora de luchar por sus reclamos. Ésta no es la única expresión del rol abiertamente reaccionario que juega la conducción de ese gremio.
Es preciso recordar que, hace pocas semanas, Urbano fue agredido por los trabajadores de Montich en defensa de sus delegados de base, a raíz del intento de la conducción de la UOM de expulsarlos del gremio por las denuncias de corrupción realizadas contra su secretario general.
Así, a pocos días de iniciado el 2015, las conducciones sindicales peronistas van anunciando que seguirán dejando caer el nivel de vida de los trabajadores y trabajadoras cordobeses.
Eduardo Castilla
Nació en Alta Gracia, Córdoba, en 1976. Veinte años después se sumó a las filas del Partido de Trabajadores Socialistas, donde sigue acumulando millas desde ese entonces. Es periodista y desde 2015 reside en la Ciudad de Buenos Aires, donde hace las veces de editor general de La Izquierda Diario.