Los trabajadores de la educación venimos resistiendo los embates de este gobierno, que desde que asumió, colocó en su mira a docentes y celadores. El primer ataque fue el nefasto Ítem Aula que legalizó, con la complicidad de la Justicia, la posibilidad de atacar nuestro salario por motivos tan sentidos como tener un embarazo de riesgo, enfermarse o cuidar a familiares, entre otros.
Sábado 9 de junio de 2018
A ello se le sumó el cierre de las paritarias por decreto en el 2016 y en el 2017 con aumentos que quedaron muy por detrás de la inflación. Este año el gobierno puso, nuevamente, un techo a las paritarias otorgándoles a todos los gremios un aumento del 15,7% en cuotas. El SUTE fue el único sindicato que no aceptó el tope salarial que firmaron la mayoría de las conducciones sindicales, por lo que el aumento salarial para todos los trabajadores de educación fue un decreto del 15,7%, en tres tramos. Al decretazo de Cornejo se le suma que castigó, una vez más, a los trabajadores de la educación negándonos la cláusula gatillo por no haber acordado el miserable aumento que proponían. Un verdadero acto de discriminación con los 60.000 trabajadores y trabajadoras de la educación.
Los índices inflacionarios actuales dan cuenta que el aumento otorgado quedó muy por detrás de lo estimado por el Gobierno. Según la medición realizada por la DEIE la inflación acumulada hasta abril fue del 12,4%, quedando a sólo 3,3 puntos de lograr el 15,7% que el Gobierno calculó para todo el año. Más grave aún, el aumento escalonado que el gobierno otorgó fue de un 5% para el primer tramo (hasta junio) lo cual nos coloca en una situación terrible: docentes y celadores en los últimos meses hemos perdido alrededor de 7 puntos de nuestro salario, reduciendo nuestra capacidad adquisitiva en el contexto del feroz ajuste y colocando a miles de trabajadores y trabajadoras en condiciones realmente miserables.
A esta situación se le suma todas las medidas que Cornejo ha impuesto de manera autoritaria e inconsulta: El decreto 250 para recategorizar arbitrariamente el porcentaje de zona de las escuelas, el decreto 530 que ataca a la Educación Superior, su intervención en los órganos colegiados como son las Juntas Calificadoras a través de la Resolución 519, las resoluciones de cierres de cursos y ahora la posibilidad de que la Justicia dé marcha atrás sobre las titularizaciones (y pases a planta de trabajadores del Estado) acordadas por paritarias, etc.
Teniendo en cuenta lo anterior se hace imperioso exigir la reapertura de paritaria salarial para decirle al Gobierno que ¡Queremos dejar de perder salario! Desde la Corriente Nacional 9 de Abril/Lista Bordó en el SUTE, planteamos la necesidad de exigir al gobierno que liquide los haberes de junio con un porcentaje de aumento igual a la inflación acumulada hasta aquí y que a partir del segundo semestre del año se nos aplique la llamada "cláusula AMPROS" de aumento mes a mes según el porcentaje de inflación. También sumamos a esto el planteo de un doble aguinaldo.
Es por ello que el Plenario Provincial del SUTE votó realizar este lunes 11 a las 18.30 hs. una movilización desde Legislatura a Casa de Gobierno donde se instalará un acampe de los trabajadores y trabajadoras de la educación, para demostrar en las calles que estamos dando la pelea por nuestras condiciones de vida y de trabajo, por la escuela pública y que no estamos dispuestos a bajar los brazos ante este gobierno autoritario.
Por esto es que debemos debatir en las escuelas y movilizarnos con toda la comunidad porque cuando se nos ataca a las y los trabajadores de la educación se ataca al conjunto de la educación pública. Somos los principales interesados en defender la escuela pública a la que asisten las hijas e hijos del pueblo trabajador que también está sufriendo los embates de la crisis, que no tiene otro desenlace que un ajuste brutal en las condiciones de vida de los trabajadores y sus familias.
No podemos soslayar que, en el marco de los acuerdos con el FMI que impulsa el gobierno de Macri y sus ministros, la pelea por la reapertura de paritarias y por recuperar las condiciones de vida de los trabajadores es una tarea fundamental. Hoy las direcciones sindicales vienen sosteniendo una enorme y silenciosa tregua, ¿Qué esperan para llamar al paro general? Por eso es una necesidad indispensable que desde el SUTE impulsemos acciones masivas donde mostremos realmente que el ajuste y los salarios de hambre ¡No Van Más!
Necesitamos acciones que transformen esa bronca que se vive en las escuelas en una fuerza dispuesta a salir a las calles para demostrarle al Gobierno que somos miles los que decimos ¡Basta! Este lunes esa bronca debe manifestarse por las calles de Mendoza: Todos/as a la marcha!
