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Red Internacional
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Santa Fe. Los trabajadores de la salud nos ponemos en riesgo, los gobiernos no nos pagan el bono

Mediante un comunicado del Ministerio de Salud de la Provincia se conoció que se excluye del bono de 5 mil pesos a los trabajadores de la atención primaria. A nivel nacional son 120 mil profesionales los que quedan fuera.

Martes 28 de abril de 2020 14:52

En marzo el Gobierno Nacional anunciaba la asignación estímulo estipulada mediante el DNU 315/20 para los trabajadores de la salud que están al frente de la pandemia. Pero el 18 de abril por resolución conjunta 3/20 del Ministerio de Salud y el Ministerio de Trabajo se hizo público la reglamentación para confeccionar el listado de trabajadores que accederían al bono de cuatro cuotas de $5.000 establecido por el Gobierno. En Santa Fe los trabajadores de la salud pública nos enteramos mediante un comunicado del Ministerio de Salud que muchos de nosotros quedamos fuera.

Los Centros de Salud y los Samcos son el primer nivel de atención de los usuarios del sistema público de salud garantizando el servicio en los barrios. Durante la pandemia atienden las necesidades de la población más vulnerable: son sus trabajadores quienes se encargan de entregar la medicación a los hogares para que los vecinos puedan cumplir el aislamiento obligatorio, garantizan la vacunación a la población de riesgo y siguen atiendendo en sus consultorios pacientes que presentan incluso síntomatología compatible con covid 19. A su vez siguen cargándose al hombro la atención en los casos de violencia de género y la efectiva implementación del protocolo en casos de interrupción voluntaria del embarazo.

Mientras las paritarias se mantienen suspendidas soportamos jornadas extenuantes con salarios de miseria corriendo muchas veces de un trabajo a otro. Estamos expuestos cotidianamente al virus en la primer línea de atención sin insumos necesarios y ponemos en riesgo nuestra vida, la de nuestras familias y de muchos vecinos. Llegamos al punto de llevar nuestros propios elementos de trabajo como barbijos, juntar plata de nuestros bolsillos para comprar equipos de protección, mandar a imprimir máscaras y pedir la solidaridad de los vecinos para poder hacer máscaras con radiogradías en una provincia dónde las cerealeras y los bancos siguen llenando sus millonarios bolsillos mientras miles de trabajadores a quienes atendemos todos los días se quedan sin ingreso y sin atención de calidad.

Nos negamos a seguir soportando el bastardeo de todos los gobiernos que hoy nos llaman hipócritamente héroes pero nos tratan como sus esclavos. Los protocolos aún son deficientes y si uno de nosotros contrae el virus o está en contacto con un caso sospechoso nos niegan el testeo y sólo nos aíslan haciendo que se diezmen los equipos y sobre cargando de trabajo a nuestros compañeros.

Muchos de nosotros soportamos desde hace años contratos eternos o trabajar como monotributistas bajo la modalidad de "locación de servicios". No tenemos los mismos derechos laborales que un trabajador en planta y nos niegan los seguros y las licencias pagas. Si nos enfermamos tenemos que elegir entre recuperarnos o comer. Dicen que la salud está primero pero en nuestros puestos la realidad es otra ¿Hasta cuando tenemos que soportar esto?.

Defendemos la salud pública de calidad porque entendemos que es un derecho y no un negocio para unos pocos. Ante la crisis sanitaria generada por la pandemia proponemos centralizar el sistema de salud bajo control estatal y con control de sus propios trabajadores, para que cada clínica y hospital público o privado queden a disposición y nadie quede sin atención si el virus avanza.

Para que no sean los trabajadores y los pacientes quienes paguen los costos de años de vaciamiento del sistema sanitario necesitamos la más amplia unidad y organización de todos los profesionales, técnicos y personal sanitario. Nos quieren divididos porque hasta ahora fue la forma que encontraron todos los gobiernos para mantenernos callados. Pero ya no lo podemos permitir más.

Como primer medida elemental proponemos la conformación de Comisiones de Salubridad e Higiene en cada efector para que seamos los propios trabajadores quienes discutamos las medidas necesarias y quienes controlemos que se cumplan todos los protocolos y tengamos los insumos necesarios para defender la vida de cada trabajador del sector y a nuestros pacientes.

Exigimos el pase a planta permanente de todos los trabajadores de la salud sean del sector que sean. Somos el conjunto de los trabajadores sanitarios los que que sostenemos día a día los hospitales, las clínicas y los centros de salud.

Sindicatos como ATE y Siprus pueden ponerse a la cabeza de convocar de forma urgente asambleas en cada efector para que se discutan cada una de las demandas entre todos los trabajadores, afiliados a todos los sindicatos, o no afiliados, monotributistas y trabajadores de empresas tercerizadas. Si los trabajadores de la salud somos los que ponemos el cuerpo, también somos los que debemos decidir a mano alzada. Además, se pueden realizar asambleas interhospitalarias por medios virtuales para fortalecer la pelea por nuestras demandas, con delegados elegidos por todos los trabajadores. Es necesario poner en píe una herramienta de coordinación para pelear por todas las demandas del sector y que se haga escuchar la voz de quienes hoy están en la primera línea de combate contra el covid 19.