El vocero de la toma del Liceo Industrial, Luciano Aguirre, nos cuenta sobre las demandas detrás de la movilización.
Viernes 13 de marzo de 2020
En su segundo día de realizada la toma del Liceo Industrial, en la ciudad de Antofagasta, Luciano Aguirre, vocero de la movilización, nos comenta las razones que motorizan la toma por parte de los estudiantes: “Nos unimos por las demandas de educación gratuita, laica y no sexista, fuera la educación de mercado, entre otros”.
Además de las demandas históricas del movimiento estudiantil, los estudiantes del Liceo Industrial tienen que lidiar con un problema interno que los aqueja hace años y que afecta a su salud: “internamente llevamos un problema de emanación de gases tóxicos hace más de seis años. Este tema nos tiene demasiado afectados y ha llegado un punto donde no da más que nos sigan despachando, hemos perdido años de clases prácticamente, de salud, donde nadie nos va a hacer recuperar eso”.
Frente a los problemas de contaminación que rodean al establecimiento Luciano observa que solo se han ejecutado "medidas parches" y que “se está priorizando el funcionamiento de las empresas antes que la salud de los estudiantes”.
Otro aspecto que moviliza fuertemente a los estudiantes es la postura autoritaria de los directivos: “se impone autoritarismo en el liceo, nos amenazan, tanto a alumnos como docentes”, afirma el vocero. En este sentido, cuenta que “los profesores de nuestro liceo están en total acuerdo con nuestro petitorio, en apoyo, ya que ellos están sufriendo los mismos problemas de salud como de autoritarismo”.
Respecto a la línea represiva que ha tenido el gobierno frente a las movilizaciones, la cual ha seguido la alcaldesa Karen rojo, el joven relató parte de los hechos ocurridos ayer (jueves): “cuando habíamos recién levantado la toma llegó el señor Edwin Calle (parte de la Corporación Municipal de Desarrollo Social y "mano derecha" de Rojo), en acompañamiento con el director de nuestro establecimiento, amenazándonos a todos, y textualmente diciendo que éramos "unos simios"”, denunció Aguirre.
