Historia. #LuzParaTodas: luchas de mujeres para no morir de frío en los barrios

La regularización inmediata del servicio eléctrico en La Cañada real es una cuestión de emergencia social y es criminal seguir mirando para otro lado. Las eléctricas son uno de los sectores más fuertes del IBEX35, junto con la banca y la construcción. Estas son las empresas que dicen "el Estado es mío y hago con él lo que quiero". Y realmente funcionan así a través de un Estado burgués que actúa como un consejo de administración de grandes empresas.

Y en el caso de las eléctricas son una puerta giratoria de ministros y otros cargos desde hace 100 años. Incluso en tiempos de pandemia, el “escudo social” del gobierno progre no llega a cientos de familias que viven en la Cañada Real. Mientras, solamente Endesa planea llevarse más de 19.000 millones de euros de ayudas del fondo covid.

Disparar la factura de la luz un día como hoy solo demuestra la codicia de las eléctricas. Si el Gobierno lo consiente, será cómplice. pic.twitter.com/16njwjFSpd

— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) January 18, 2017

También Naturgy, la empresa que ha cortado luz y calefacción a la #CañadaReal, aspira a llevarse millones de los fondos europeos de reconstrucción post-Covid. La acumulación de capital para estas empresas con rescates de dinero público ha sido enorme en 2020, a pesar de la crisis

También estas multinacionales obtienen ganancias millonarias a través de la privatización del servicio en países de América Latina, causando estragos de pobreza energética y desastres ecológicos.

La idea de no morir de frío ha sido un motor fundamental de importantes luchas. Por ejemplo, 1855 fue un bautismo para el movimiento obrero en el Estado español, no sólo por la huelga general de verano, sino por las protestas contra la pobreza energética en noviembre y diciembre.

Entonces se hablaba de miles de detenciones por robar un haz de leña para calentarse, mientras a los industriales se les regalaba por miles, por "interés general". Se usaba madera en la industria, el estado burgués estaba desarrollándose y descubriendo eso del "interés general"

Una nueva ley estableció penas de un año de cárcel por robar leña, siendo más del 50% de los delitos de ese invierno. Una revuelta surgió por numerosas ciudades del norte, confiscando la leña y atacando fábricas, con importantes huelgas en las mismas.

Habría muchos casos, pero vamos a una de las olas de frío más graves del siglo XX nos vamos a 1918. Se dieron temperaturas de -15 grados en Madrid o -17 en Zaragoza, por ejemplo. En las condiciones de una familia obrera de 1918. Pues todo estalló. Y fueron las mujeres.

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Entre 1913 y 1918 el precio del carbón se había triplicado y el de muchos alimentos básicos casi se había doblado. La razón era la especulación con ellos por parte de lo más selecto de la burguesía española. Debido a la I Guerra Mundial, podían exportarlos a precios elevadísimos

Se hicieron inmensas fortunas y una situación se hambre y frío que en el invierno de 1918 llegó a su máximo. Y miles de mujeres en decenas de ciudades organizaron grandes huelgas para tomar lo que necesitaba su hogar e imponer los precios de antes.

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Enfrentaron una durísima represión, con muertas y declaraciones de Estado de guerra, aunque en algunos casos vencieron. Con el desabastecimiento se hizo visible que parar las eléctricas era estratégico para parar toda una ciudad. Y en 1919 la eléctrica La Canadiense sería el corazón de una huelga general que pararía durante 44 días toda Barcelona y conseguiría la primera jornada de 8 horas.

La historia sería mucho más larga, porque las luchas contra la tiranía de la patronal eléctrica y la pobreza energética no han parado hasta hoy. Y sigue necesario pelear por #LuzParaLaCanada #LuzParaTodos contra el "interés general" que es el de un puñado de capitalistas.

Hace falta seguir la lucha por el derecho a una vivienda digna para todos, subsidios de emergencia para los parados y regularización de todas las personas migrantes. Solo así se podrá empezar a ofrecer una solución a las familias de la Cañada. Pero, para eso, hay que poner la vida por delante de las ganancias de las empresas. Por la nacionalización sin indemnización las empresas de energía.