A pesar de la negación por parte del gobierno estatal, encabezado por el empresario panista Mauricio Kuri González, el fenómeno de la desaparición forzada va en aumento tanto en Querétaro como en el resto del país.
Miércoles 23 de agosto de 2023
Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No localizadas, hay 503 personas desaparecidas en Querétaro; sin embargo, colectivos de madres buscadoras afirman que podría haber más de mil casos en la entidad. A pesar de la negación del gobierno estatal encabezado por el empresario panista Mauricio Kuri González, el fenómeno de la desaparición forzada va en aumento, tanto en Querétaro como en el resto del país.
Luego de la Jornada Nacional de Búsqueda en Vida que se realizó en Querétaro el 15 de agosto, las madres y colectivos de búsqueda iniciaron una protesta el 22 de agosto frente a las oficinas de la Fiscalía. Ante la nula respuesta de las autoridades que se negaron a que las buscadoras accedieran a los archivos de la SEMEFO y las penitenciarías para buscar a sus familiares, las protestantes decidieron iniciar un plantón al interior de las instalaciones.
Entrada la noche y con los servicios de luz y seguridad suspendidos, aproximadamente 100 personas que se identificaron como personal de la Fiscalía, arremetieron contra el plantón golpeando a niños y adultos mayores, mientras que las madres y familiares de desaparecidos fueron golpeadas con palos, amenazados, atropelladas y hostigadas. Sobre estos hechos, Yadira González integrante del colectivo Desaparecidos Querétaro, denunció en medios locales:
“No entendemos qué es lo que esconden en la Fiscalía, qué esconden en servicios periciales. Esto quiere decir que ahí está lleno de cuerpos, y que ahí están nuestros hijos, ahí están nuestros hermanos. La realidad esto es como si fueran las prácticas del 68, de un Halconazo, estas prácticas miserables, crueles, cobardes, de un fiscal general”.
Otra de las madres de desaparecidos expresó:
“En todo el país nos están abriendo las instituciones, ¿por qué Querétaro no quiere hacerlo? ¿qué esconden? si nosotros lo único que queremos es encontrar a nuestros hijos”.
Por su parte, el titular de la Fiscalía del estado Alejandro Echeverría Cornejo, negó que hubiera represión y minimizó las desapariciones forzadas en Querétaro. No es la primera vez que el gobierno de Mauricio Kuri responde con violencia estatal a las protestas sociales, recordemos que actuaciones similares ha tenido para con los movimientos en defensa del agua, feministas y de los pueblos originarios.
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Madres buscadoras, entre la violencia del narco y el Estado
El cáncer social del feminicidio y las desapariciones forzadas en México, profundizadas a partir del inicio de la Guerra contra el Narco y la militarización del país, ha parido también a las llamadas “madres buscadoras”. Se trata de mujeres y familiares de víctimas que, ante la falta de justicia y respuestas satisfactorias de las autoridades, decidieron tomar la búsqueda en sus manos y con palas y picos, recorren y escarban territorios con una clara convicción: no parar hasta encontrarles, hasta traerles de vuelta a casa.
Ellas y ellos, lograron convertir su dolor y tristeza en organización, y es por eso que las autoridades y grupos del crimen organizado, les ven como una amenaza. En 2022 hubo cinco asesinados de madres buscadoras en el país, mientras que, en lo que va de 2023 la cifra oficial es de 10 madres asesinadas.
Casos como los de Esmeralda Gallardo en Puebla, Aranza Ramos en Sonora o la propia Marisela Escobedo en Chihuahua, son el ejemplo claro de que en México la justicia está lejos de llegar para aquellas y aquellos que tienen a un familiar o amigo desaparecido.
En este contexto de violencia generalizada a partir de la militarización del país, que comenzó con Felipe Calderón en 2006, continúo con Peña Nieto en 2012 y se profundizando con López Obrador desde 2018, las agresiones de la Fiscalía de Querétaro a las madres buscadoras, son hechos que encienden la alerta y ponen en situación de vulnerabilidad a aquellas que no deberían de hacer el trabajo de las autoridades.
Y es que, en la búsqueda de sus seres queridos, las madres buscadoras han destapado casos de desaparición forzada en donde están involucrados elementos de las fiscalías, del ejército o de las fuerzas armadas, así como integrantes de los cárteles y el crimen organizado.
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Ante la impunidad y violencia del Estado, organización independiente
Los asesinatos, la represión, las amenazas, el hostigamiento y/o indiferencia hacia las madres buscadoras en Querétaro y el resto del país, no son hechos aislados en el clima de terror y violencia que desde hace años, implementan los gobiernos tanto estatales como federal, tanto de la derecha como de la 4T.
Por el contrario, se trata de mecanismos que buscan mantener el terror entre la población y desmoralizar a las madres que, en su lucha por verdad y justicia para ellas y sus familiares, dejan al descubierto la responsabilidad del Estado (sus fuerzas armadas. Leyes, Fiscalías e instituciones) en crímines terribles como las desapariciones forzadas, los feminicidios, los juvenicidios, los desplazamientos forzados, el despojo, etc., así como sus múltiples conexiones con grupos del crimen organizado. Como señala en su nota Barbara Funes:
"Ese clima de terror busca, de manera preventiva, mantener silenciado cualquier indicio de protesta. Y aun así, al gobierno y a la clase dominante les sale mal la jugada, pues a pesar de las balas, las desapariciones, los feminicidios, en distintos momentos la indignación se expresa."
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La indignación, rabia y dolor de las madres buscadoras en México, no se apaga con represión y hostigamiento; no se acaba incluso cuando matan a una, pues su dolor y también su lucha, son abrazadas por nuevas madres, hijas, hermanas. Las madres qué buscan a sus hijas desaparecidas y/o asesinadas, han levantado esta digna causa desde finales de los años 90s, incluso antes, cuando denunciaron los crimenes de tiempos de la Guerra Sucia.
Desde entonces y hasta la fecha, los gobiernos -ya sean de derecha o la 4T-, buscan permanentemente contener la bronca e institucionalizar su digna lucha. Pero los años y la impunidad han demostrado en los hechos, lo que desde hace años sostenemos las feministas socialistas de Pan y Rosas y el Movimiento de Trabajadores Socialistas (MTS): para lograr verdad y justicia para las y los miles de desaparecidos, asesinados y asesinadas del país, necesitamos un gran movimiento nacional contra la militarización y sus nefastas consecuencias, independiente del Estado y sus partidos, así como Comisiones de Investigación Independientes para saber en dónde están las y los desparecidos y quienes fueron los responsables.
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