Diferentes organizaciones de apoyo al Pueblo Palestino, como la campaña de Boicot a Israel (BDS), convocaron este viernes a una concentración en la Plaza de la Villa de Madrid, ante la Fundación Sefarad.
Juan Romero Madrid | @jromelasco
Sábado 24 de octubre de 2015
Foto: ID / Juan Romero
Al acto asistieron unas 300 personas de todas las edades, destacando sobre todo muchos jóvenes que hicieron oír sus voces en las consignas que gritaron por la liberación del Pueblo Palestino, contra el apartheid impuesto por el Estado de Israel y contra la ocupación que les obliga a vivir en guetos.
Esta tarde en Madrid en la Concentración de apoyo a #PalestinaLibre para @iDiarioES pic.twitter.com/SOSqz7pT6g
— Juan Romero (@jromelasco) octubre 23, 2015
La concentración atrajo un gran número de medios de prensa. Entre los cantos se mezclaban consignas en castellano, con otras en árabe. ¡Palestina Libertad! ¡Vosotros sionistas, sois los terroristas! ¡Boicot a Israel! ¡Palestina Vencerá!
El comunicado denuncio las condiciones en las que sobrevive el Pueblo Palestino y las cincuenta y cuatro personas que fallecieron durante este mes de octubre por la represión Israelí, así como el refugiado eritreo que fue confundido como palestino y fue linchado.
Concentración apoyo #Palestina en Madrid para @iDiarioES pic.twitter.com/RGogPzjDUt
— Juan Romero (@jromelasco) octubre 23, 2015
Una de las últimas víctimas de la violencia de Israel fue Hashem Azzeh, un palestino de 53 años que murió tras inhalar gas lacrimógeno el pasado miércoles 21 de octubre, en Hebrón. Hashem era un conocido activista por los derechos humanos y los derechos de los palestinos, en una localidad donde la violencia de los colonos israelíes opera las veinticuatro horas del día.
Al igual que en los años cuarenta en la Alemania nazi se crearon guetos para judíos, que luego terminaron en campos de concentración y exterminio, ahora es el propio estado sionista de Israel el que los crean para los palestinos.
A pesar de este hecho histórico incontrastable, recientemente el primer ministro del Estado de Israel, Benjamin Netanyahu, responsabilizó a un líder islámico palestino, Haj Amin al Hussini, de haber sugerido, nada menos que a Hitler, el genocidio judío ocurrido durante la II Guerra Mundial.
La afirmación de Netanyahu, pronunciada en el 27º Congreso Sionista en la noche del 20 de octubre, fue tan absurda que desató el repudio inmediato, incluso dentro de Israel.
Como si no fuese suficiente la opresión sistemática, la segregación, la represión y el asesinato a los que son sometidos cotidianamente los palestinos por el Estado sionista, los objetivos de la falsificación histórica son muy claros.
Es un intento de identificar a los palestinos y su resistencia con la ideología del nazismo, cuando crecen las tensiones en Jerusalén y en la Franja de Gaza, marcadas por una nueva revuelta protagonizada por jóvenes palestinos contra la opresión del Estado racista de Israel.
