El oficialismo enviaría tres proyectos de ley al Congreso para evitar que la oposición se unifique y haga caer el decreto en Diputados y Senadores. El Bloque Justicialista podría volver a salvar al Gobierno.
Jueves 8 de febrero de 2018 00:00
Foto: Mario Negri, Nicolás Massot y Pablo Kosiner anuncian el acuerdo por la reforma previsional en diciembre pasado
El oficialismo nacional lleva adelante una maniobra política que tiene por objetivo impedir que el llamado megadecreto pueda ser rechazado por la oposición en ambas cámaras legislativas.
Como se recordará, el Decreto 27/2018 impone decenas de modificaciones en diversas normas. Entre otras cosas, habilita beneficios para los empresarios que tengan trabajadores en negro, en el marco de un eventual blanqueo; permite el embargo de las cuentas-sueldo de los trabajadores para cobrar préstamos, y autoriza al Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) del Anses a operar en actividades financieras.
El decreto fue publicado a inicios de 2018. La extensa normativa estuvo destinada a sortear la discusión en el Congreso Nacional de proyectos que atacaban derechos de los trabajadores.
Como señaló este martes el diputado del Frente de Izquierda Nicolás del Caño –refutando las acusaciones contra la oposición- es el oficialismo el que pretende impedir que funcione el Congreso, apelando al uso de los decretos.
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Rechazo extendido
El decreto rápidamente despertó un enorme rechazo político y social. Fue visto como la confirmación de un curso del gobierno que pretende ignorar la discusión en el parlamento.
Esto tiene sus razones. Luego de la enorme crisis política que implicó la aprobación de la reforma previsional, el oficialismo buscó un camino que no implicara pasar medidas de ajuste por medio del Congreso.
El megadecreto fue rechazado por las fuerzas políticas de oposición. Ese rechazo abarcó a todas las alas del espectro político. Incluyó al peronismo federal (Interbloque Argentina Federal), al FpV, FR, PPV y al Frente de Izquierda, entre otros.
Esto abrió un escenario donde la posibilidad de que el decreto fuera rechazado en ambas cámaras parlamentarias cobró fuerza. Con una actuación unificada de rechazo por parte de esas fuerzas el decreto caería. Cambiemos, a pesar de los resultados electorales de octubre pasado, sigue siendo una minoría parlamentaria.
Esto llevó al gobierno a elaborar una maniobra política que busca evitar ese escenario y permitir que el decreto siga en curso. Fue esa estratagema la que se presentó en la reunión de la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, el martes pasado.
Falso debate
En la reunión que tuvo lugar en el edificio del Senado de la Nación, el oficialista Luis Naidenoff anunció el próximo envío de tres proyectos de ley que tratarían ampliamente los temas abordados en el megadecreto. Al mismo tiempo, Cambiemos impulsó y logró en esa comisión la firma de un dictamen a favor del decreto 27/2018.
El objetivo es que el decreto no se caiga por el rechazo de la oposición en las dos cámaras parlamentarias. La presentación de esos proyectos busca generar un ambiente de falso debate, que permita abrir un canal de negociación con los sectores más pro-oficialistas del arco opositor.
En ese rincón hay que ubicar, sin lugar a dudas, al peronismo que comulga con los gobernadores. Los senadores y diputados agrupados en el Bloque Justicialista y en el Interbloque Argentina Federal son quienes garantizaron en diciembre pasado la aprobación de la reforma previsional. Esa norma, ampliamente rechazada por la mayoría de la población, hubiera sido imposible de aprobar sin el concurso de este espacio.
El mismo camino de negociación podría estar abriéndose en el caso del megaDNU. El martes mismo, durante la reunión de la Comisión Bicameral, el diputado salteño Pablo Kosiner “celebró” el anuncio de los proyectos de ley. “Nos vamos a comprometer a tratarlas, porque era el camino correcto, agregó en sintonía con el pedido del macrismo.
Pablo Kosiner durante la reunión de la Comisión Bicameral
Desde la izquierda las críticas se hicieron oír fuerte. “Los levantamanos seriales de las leyes de ajuste macrista volverán a salvar al gobierno para que siga sus políticas contra el pueblo o rechazarán el #Megadecreto” se preguntó el diputado nacional Nicolás del Caño desde su cuenta de Twitter.
Los levantamanos seriales de las leyes de ajuste macrista volverán a salvar al gobierno para que siga sus políticas contra el pueblo o rechazarán el #Megadecreto en el recinto como dijeron hasta ayer?
— Nicolas del Caño (@NicolasdelCano) 7 de febrero de 2018
Mientras el decreto no sea rechazado por ambas cámaras legislativas mantiene su validez. Es decir, si la oposición no lo rechaza en Diputados y Senadores, el gobierno mantiene los avances en su política de ajuste que el mismo le facilita.
¿Unidad con “traidores”?
Desde diversos sectores políticos se insiste en el camino de la “unidad de todo el peronismo” hacia las elecciones de 2019. En el kirchnerismo, luego de haber vituperado por casi dos años contra los “traidores” del massismo y Pichetto, ahora corren a participar en foros para discutir como unificarse.
Sin embargo, la actuación del peronismo agrupado en el Bloque Justicialista pone de manifiesto que el ajuste de Macri sigue avanzando gracias al accionar de ese espacio político. Lo que se hace desde el kirchnerismo es darle aire a los sectores que le garantizan y le garantizaron gobernabilidad a Macri.
Ese accionar no es nuevo. Ya en diciembre pasado, el kirchnerismo mantuvo una fuerte mesura a la hora de hablar de los gobernadores peronistas que avalaron el llamado Consenso Fiscal y presionaron para la sanción de la reforma previsional.
La “unidad del peronismo” que se discute en foros, asados y reuniones privadas, está muy lejos de ser una buena noticia para los trabajadores y los sectores populares. En ese lugar están los que siguen avalando las medidas de ajuste de Macri y el gran empresariado.
Redacción
Redacción central La Izquierda Diario