Se profundiza la crisis de la DC. El grupo “Progresismo con Progreso” con su cabeza más conocida Mariana Aylwin, anunció que no votará por Guillier, ni por Piñera, y que podrían romper al partido de la flecha roja.
Miércoles 6 de diciembre de 2017
Lo venían anunciando. Uno de los integrantes de este sector conservador de la DC, Aninat, renunció al partido días atrás.
Ahora concretaron lo que anunciaban al anunciar que no votarán por Guillier. Tampoco por Piñera.
Los argumentos, son próximos a Piñera: que con Guillier llegará el “populismo”, que estaría atrapado por el Frente Amplio (aunque Guillier fue claro en que no terminará con las AFP, por ejemplo).
Toda una trayectoria, reciente como grupo, de intentar impedir, obstaculizar, todas las demandas sociales de los últimos años, y mantener viva la política de los ’90. Un imposible.
Un imposible que refleja la imposibilidad de sostenerse del histórico centro político, la DC, tendiendo el escenario a desplazarse a derecha e izquierda.
La candidatura de Guillier, busca moderar ese desplazamiento. El llamado de figuras del Frente Amplio, incluyendo a Beatriz Sánchez, refuerza ese intento de moderación.
Una vez más, los dirigentes noventistas no solo hacen una mala lectura del escenario, insistiendo en que “la tesis” del descontento social es equivocada, pero obligando a que no se trata de una “tesis” sino que de millones movilizándose desde el 2011, y sobre todo, logrando imponer una agenda política nacional distante, y hasta opuesta, a la de los empresarios, la Concertación y la derecha.
Por eso se condenan a la impotencia, o a la guerrilla parlamentaria y mediática (los matices, la cocina del Senado, que Chile se convertirá en Venezuela, etc), para concluir en amenazar con romper la DC para convertirse en un “movimiento de centro” que probablemente sea, como dijeron al principio, un think tank apenas.
