Aumenta la inflación en marzo en 4.67% debido al incremento en precios energéticos y alimentos alcanzando, el mayor nivel desde diciembre de 2018.
Sábado 10 de abril de 2021
Se trata del mayor nivel de inflación desde hace 3 años en 4.67%, el cual rebasa poco más de un punto el rango objetivo de 3+- del Banco Central:Esto aumenta los riesgos de estanflación, por lo que las expectativas de crecimiento del 5% previstas para el 2021 con el incremento del PIB y la recuperación económica con la vacunación, no son sostenibles.
La fragilidad de la economía nacional, refracción de la crisis económica producida por la pandemia —hoy amenazada por el alza de la inflación— presupone que su tendencia a aumentar y de no revertirse pudiera generar riesgos de una estanflación producida por la reducción de los niveles de la actividad económica y una creciente inflación.
Sin embargo, las estimaciones macroeconómicas presentadas por distintas instituciones económicas del país —como recientemente presentó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en los criterios de la política económica en torno a la evolución del crecimiento económico del 5.3% para la economía mexicana en 2021— hacen que el Banco de México advierta que éste es sostenible en el panorama actual de inflación y de baja de inversión productiva, así como por la interrupción de diversos insumos a causa de la crisis sanitaria.
Aunque, en este contexto, serán mayores los problemas para la recuperación de la economía y, sobre todo, una mayor descarga de la crisis para los trabajadores y los sectores populares al encarecerse los productos y las altas tasas de desempleo.
Aunque, en este contexto, serán mayores los problemas para la recuperación de la economía y, sobre todo, una mayor descarga de la crisis para los trabajadores y los sectores populares al encarecerse los productos y las altas tasas de desempleo.
La inflación mensual en marzo de 0.83% y anual en 4.67% de acuerdo al Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), cerró el primer trimestre con el nivel de precios más alto desde diciembre de 2018 que entonces registró un aumento del 4.83%, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Precisando un poco más
El índice de precios subyacente indica la variabilidad de los precios de consumo a corto plazo en los bienes y servicios, lo cual responde principalmente a condiciones de mercado y está integrado por mercancías menos volátiles o estables. Para el mes de marzo del 2021 presenta un aumento del 0.54% y anual de 4.12%, el cual, desagregado en mercancías, presenta el 0.60% en marzo y anual de 5.79% y en servicios de 0.47% y 2.30% respectivamente.
El índice de precios no subyacente se integra por bienes como alimentos no procesados, energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, así como servicios que responden a condiciones de regulaciones del gobierno, entre otras. Este índice registró para marzo 1.27% y anual de 6.31%. Los alimentos no procesados presentan un 1.27% en marzo y anual de 0.64%, pero el de los energéticos alcanzó 1.99% en marzo y anual de 10.73%, lo cual supone el índice más alto en dos décadas.
Es de notarse que el aumento en el índice de precios no subyacente presenta los mayores alzas y en el caso de alimentos no procesados y energéticos básicos en el consumo, en el mes de marzo registraron el mayor aumento. Muestra así cómo el gobierno está enfrentado la reactivación económica.
Es de notarse que el aumento en el índice de precios no subyacente presenta los mayores alzas y en el caso de alimentos no procesados y energéticos básicos en el consumo, en el mes de marzo registraron el mayor aumento. Muestra así cómo el gobierno está enfrentado la reactivación económica.
De acuerdo a las estimaciones se prevé que la tendencia a la alza en la inflación se mantendrá, lo cual implica para los trabajadores y los sectores populares, con salarios raquíticos, aún mayores pérdidas en su poder adquisitivo sumado a las condiciones laborales precarias y el desempleo.
Ante esta situación, sólo un control de precios bajo la gestión y control de los trabajadores y pequeños comerciantes junto a los obreros industriales, de servicios y transportes que producen, distribuyen y comercializan los productos, pueden contrarrestar esta situación contra las enormes ganancias de los empresarios y en beneficio de las grandes mayorías.
Ante esta situación, sólo un control de precios bajo la gestión y control de los trabajadores y pequeños comerciantes junto a los obreros industriales, de servicios y transportes que producen, distribuyen y comercializan los productos, pueden contrarrestar esta situación contra las enormes ganancias de los empresarios y en beneficio de las grandes mayorías.
Esto implica también, que la economía debe estar al servicio de los trabajadores y sectores populares y no garantizando las ganancias de los grandes empresarios, cuestión clave en el marco de la pandemia actual y la política de reapertura económica que se ha dado con un costo de cientos de miles de defunciones y contagios. Sólo la más amplia de la clase trabajadora y su organización independiente del gobierno y los empresarios puede garantizar mejores condiciones antes la crisis en curso.
Mariana Morales
Socióloga UNAM - Profesora la Facultad de Economía UNAM