Pese a la caída interanual, la multinacional sueca obtuvo ganancias por 406 millones de euros entre diciembre y agosto. Así y todo quieren que la crisis la paguen sus trabajadores.
Miércoles 30 de noviembre de 2022 09:54
Fotografía: Kevin Frayer/Getty Images AsiaPac
La cadena de moda sueca Hennes and Mauritz (H&M) cuenta con más de 100.000 trabajadores en sus 4.664 tiendas ubicadas en 77 países y 57 mercados por internet. En los nueve primeros meses de este año fiscal, que va de diciembre a agosto, el grupo sueco ganó 4.430 millones de coronas (406 millones de euros).
La cifra significa un 30 % menos interanual. La empresa responsabiliza de la caída de ganancias al cierre del negocio en Rusia debido a la invasión de Ucrania y aumento de los precios de la energía y otras materias primas.
Para compensarlo, H&M presentó hace dos meses un plan de reducción de costes y aumento de eficiencia, que incluye el recorte de 1500 puestos de trabajo. Con este programa, pretende ahorrar 2.000 millones de coronas suecas (183 millones de euros) anuales a partir de la segunda mitad de 2023.
El coste de este ajuste asciende a cerca de 800 millones (73 millones de euros) en concepto de cargos de reestructuración, que serán contabilizados en el cuarto trimestre.
La consejera delegada de la firma, Helena Helmersson, hizo un breve comunicado, en que afirmó cínicamente que "El programa de costes y eficiencia que hemos iniciado implica revisar nuestra organización y somos conscientes del hecho de que algunos colegas se verán afectados. Los apoyaremos en encontrar la mejor solución posible para su próximo paso".
Según la empresa, la caída en las ganancias obedece al cierre de su negocio en Rusia por la intervención militar en Ucrania, que le costó 2.104 millones de coronas suecas (193 millones de euros), y a factores como el aumento del precio de las materias primas, los fletes, la energía y los costes de entrega, según consta en el balance difundido hace dos meses.
H&M es el principal competidor de la firma de distribución textil española Inditex. Aunque la firma señale la guerra y la cuestión energética, lo cierto es que su política de recortes no es de ahora. A fines del año pasado, H&M realizó 1.100 despidos en España e implementó peores condiciones laborales para los que quedaron.
En aquel entonces, la firma culpó a la pandemia y al “constante crecimiento del mercado online”, y anunció un proceso de "transformación y reorganización" en todo el mundo para tener una estructura «más eficiente», es decir más rentable, e integrar las tiendas físicas y las online.
La codicia capitalista de la que H&M es un botón de muestra, pretende que sean las y los trabajadores quienes carguen los costos de sus crisis y de sus guerras.