Como parte de la oleada de huelgas por salario, ante el aumento de la inflación, esta semana es el turno de los médicos jóvenes que denuncian una pérdida del salario real del 26% en los últimos 15 años. El Gobierno anunció que no otorgará ningún aumento. Al mismo tiempo otros sectores, como las enfermeras, siguen peleando y rechazan los aumentos ofrecidos, que están muy por debajo de la inflación.
Martes 11 de abril de 2023 12:24
Los médicos jóvenes de toda Inglaterra lanzaron este martes una nueva huelga de cuatro días en la lucha por aumento de salarios, como parte de la oleada de huelgas que recorre al Reino Unido hace meses. Los trabajadores jóvenes del Sistema Nacional de Salud (NHS) denuncian haber perdido gran parte de su salario por el aumento de la inflación y tener una remuneración por hora que está cerca del índica de pobreza.
Los médicos, que están afiliados a la Asociación Médica Británica (BMA), montaron piquetes frente a los hospitales desde las 7 de la mañana de este martes y permanecerán en huelga hasta las 7 de la mañana del sábado. Es el paro más largo desde que comenzó la ola de huelgas el año pasado.
Se estima que se cancelarán unas 350.000 citas, incluidas operaciones, como resultado de la huelga, que ha sido calificada como la más importante en la historia del servicio de salud.
La BMA denuncia que los médicos jóvenes en Inglaterra han soportado un recorte salarial del 26% en términos reales desde 2008/09 porque los aumentos salariales han estado por debajo de la inflación.
El sindicato ha pedido una restauración salarial completa que, según el gobierno, equivaldría a un aumento salarial del 35 %, y que ya anunció que no está dispuesto a otorgar.
Un médico junior sin antiguedad tiene un salario de £ 29,384 al año, lo que implica que por una semana de 40 horas de trabajo el sueldo real es de £ 14,09 la hora, lmientras que el salario mínimo legal es de 10,42 libras. Es por esto que los trabajadores piden un aumento del salario inicial de £ 5 por hora para llevarlo a £ 19 la hora.
Esta huelga se da en el marco de la oleada de paralizaciones que recorre el Reino Unido desde fines del año pasado ante el aumento de la inflación y que llevó a huelgas en los ferrocarriles, petroleros, portuarios, docentes, choferes de colectivos y ambulancias, trabajadores de Amazon y trabajadores de la salud, entre otros. Las enfermeras vienen de realizar una dura lucha con huelgas y piquetes y consiguieron por primera vez que el Gobierno de Rishi Sunak ofreciera un aumento. Sin embargo, el ofrecimiento del gobierno estuvo muy lejos de los niveles de inflación y desató una enorme campaña para rechazar el acuerdo. Esta campaña se podría extender a otros sindicatos, muestra un malestar creciente contra los empleadores (sea el Estado o privados) que se han negado a dar aumentos de salarios u otorgarlos muy por debajo de la inflación.
