Editorial Gráfico. Mensaje en una botella

Ilustración de Sergio Cena / Texto de Chiqui Nardone

Por equivocación, por qué ¿quién no se equivoca en cien años?
Por un error simplemente, la felicidad tiene esos engaños.
Hay que perdonarnos, somos cumpleañeros, Viva; Arriba la botella, brindemos.
Admitimos la falla, hemos explotado bajo presión, bajo presión de tapa de botella, hemos precarizado.
Recuerdo la vez en que una tanda de Contours salió deformada, la Coca Cola basura le dijeron los trabajadores. Los despedimos, los precarizamos, los volvimos a despedir, la felicidad no tiene tapa, ni perdón ni vuelta atrás.
Lo aceptamos: poblaciones enteras de África desplazadas por la felicidad, sangre negra balbuceaban los trabajadores. Era un espectáculo ver a través de ese vidrio transparente como los cuerpos tomaban la forma de nuestras ambiciones.
Mensajes Positivos perdonan el pasado, ¿qué significan 80 trabajadores despedidos mientras millones aceptan nuestra diversidad?, ¿qué son los colombianos muertos por sindicalizarse más que algún reborde de una botella mal hecha, de esa sensacion de voluptuosidad al presionar con las manos una botella sintiendo que el mundo, somos mundo, se reduce a esa frescura?.
Ochenta trabajadores, por favor. No nos van a conmover botellas rotas tiradas
al viento. Las cocas son armas cargadas de futuro diría Francisco.¿Y esa botella que viene en el aire? rodando, Contour vuela, diversidad lanzada, molotov arde, quizás sea de bienvenida, de estreno como a los barcos. Pero es una lluvia de vidrios,
de botellas de fuego, ácidas como nuestro brebaje que cubren el cielo. Qué triste, no hay nada más triste que un trabajador sin felicidad.