Fue publicada recientemente una nueva y segunda edición de México en Llamas: Interpretaciones marxistas de la revolución (1910/1917).
La revolución de 1910 constituyó una de las grandes gestas de las masas latinoamericanas durante el siglo XX. La guerra civil que enfrentó a los ejércitos campesinos radicales, liderados por Francisco Villa y Emiliano Zapata, con el ejército federal porfirista, primero, y con las distintas alas de la burguesía constitucionalista después, fue la forma que adquirió uno de los capítulos más álgidos de la lucha de clases en nuestro continente a inicios de la pasada centuria. La Comuna de Morelos mostró hasta donde son capaces de llegar las masas insurrectas, en tanto que las huelgas previas a 1910 —como Cananea y Río Blanco— mostraron los primeros pasos, combativos y resueltos, de la clase obrera de nuestro país. Como sucede con los grandes procesos históricos, estos son un terreno de disputa en los cuales entran en disputa diversas interpretaciones, que expresan los distintos intereses de clase. De esta manera, las interpretaciones dominantes expresaron la lectura que emanó del estado posrevolucionario y la burguesía en ascenso, con el fin de legitimarse como la “revolución hecha gobierno”.
En 2010, en el marco del centenario de la Revolución Mexicana y del reanimamiento del debate en torno a ésta, la Editorial Armas de la Crítica —impulsada por quienes hoy formamos el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas— publicó México en Llamas. Este libro se compone por una serie de ensayos que abordaron, desde distintos ángulos, una interpretación marxista de la gran revolución de 1910. Los mismos fueron elaborados por una nueva generación de intelectuales militantes, y fue acompañado por la recuperación de trabajos fundamentales para la construcción de dicha interpretación, escritos en las décadas previas por Adolfo Gilly, Manuel Aguilar Mora y Octavio Fernández. Coronaban esta obra —cuyo prólogo estuvo a cargo de Massimo Modonesi— una destacada selección de documentos del ala radical de la revolución.
La primera edición de este libro se agotó rápidamente y fue la única publicación presentada por una editorial y una corriente marxista revolucionaria ante el Centenario de la Revolución. Leída por cientos de trabajadores y jóvenes en nuestro país, circuló también entre intelectuales y académicos tanto de México, como de Estados Unidos, Brasil y otros países de América Latina, que resaltaron el valor de las nuevas elaboraciones contenidas en la obra. Cabe resaltar que en las mismas se aborda el desarrollo temprano del capitalismo en México, los primeros episodios de la lucha de la clase obrera en el país, la experiencia de la Comuna de Morelos así como la participación de las mujeres en la revolución. Así también, un extenso trabajo de periodización de la revolución y sus momentos centrales, y el debate con las principales corrientes políticas e historiográficas en la izquierda, desplegando una interpretación de la revolución y de las causas objetivas y subjetivas de su resultado.
A más de 10 años, ponemos una nueva edición, en un formato más amplio, al alcance de las nuevas generaciones. Los ensayos escritos por Jimena Vergara Ortega, Sergio Mendez Moissen y Pablo Langer Oprinari —coordinador de la publicación—, con el cuidado editorial de Bárbara Fúnes, han sido revisados y corregidos. Además, una novedad de esta segunda edición es un nuevo y actualizado epílogo, en el cual se establece un interesante debate con la lectura, que de la revolución realiza, la Cuarta Transformación del presidente Andrés Manuel López Obrador.
México en llamas conserva, por supuesto, aquellos ensayos que consideramos fundadores de una interpretación marxista de la revolución, escritos por Gilly, Aguilar Mora y Fernandez, así como los documentos mencionados más arriba.
Recomendamos ampliamente a nuestra audiencia la lectura de este libro, el cual puede ser adquirido entrando a este portal.
Las tareas que nos depara el presente y el futuro, la lucha contra el capitalismo y sus representantes políticos exige recuperar las mejores lecciones de las experiencias más avanzadas de la lucha de clases. La unidad entre los explotados y oprimidos de la ciudad y el campo, la independencia política frente a la burguesía y sus partidos, así como la necesidad de una estrategia antiimperialista e internacionalista y de poner en pie un partido revolucionario, son cuestiones que pueden y deben ser nutridas a partir de comprender la experiencia de la revolución de 1910. Porque, de lo que se trata, a más de 100 años, es de retomar y culminar la obra de Emiliano Zapata, esto es, realizar la segunda revolución mexicana, obrera y socialista.
COMENTARIOS