El anuncio será a las 10 horas en un acto junto a dirigentes políticos y sindicales y gobernadores. Se elevaría el mínimo no imponible a $30.000.

La Izquierda Diario @izquierdadiario
Jueves 18 de febrero de 2016
Según un comunicado de la Presidencia de la Nación, el Gobierno realizará hoy un acto para informar modificaciones al régimen de Impuesto a las Ganancias con la participación de dirigentes políticos y sindicales, también fueron invitados gobernadores.
El reclamo por el impuesto al salario es uno de los puntos que pidieron las cúpulas sindicales en la reciente reunión entre Macri y Hugo Moyano de la CGT Azopardo; Antonio Caló (CGT Balcarce), y Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca).
En la actualidad con el decreto 1242 de 2013 deben pagar ganancias aquellos trabajadores y jubilados que entre enero y agosto de ese año perciben un haber bruto mayor a $ 15.000. La tabla de alícuotas que aumenta a medida que crece el salario no se modifica desde el año 2000. Con estos valores, un salario que está por debajo de la canasta familiar, que según las estimaciones superan los $ 16.000, debe pagar impuesto a las Ganancias.
Existen tres proyectos de modificación de Ganancias, uno presentado por el ministro de Hacienda y Finanzas, Prat Gay, otro del senador del FpV Pichetto y uno de la diputada de Cambiemos Elisa Carrió.
Según Prat Gay, su proyecto y el de Carrió son parecidos que serían un “mínimo no imponible de $ 29.266, en línea con la propuesta que estamos elaborando (caso de un asalariado casado con dos hijos)”. El proyecto del FpV sostiene que el mínimo no imponible debería ser de $ 30.000.
En el proyecto de Carrió los montos se actualizarían de acuerdo al Indice de Precios al Consumidor elaborado por el INDEC y en el de Pichetto, los valores se ajustarían por el coeficiente que salga del incremento del Salario Mínimo Vital y Móvil.
El cambio en Ganancias quiere ser presentado por el Gobierno como una gran promesa cumplida de campaña pero lo cierto es que sólo son migajas para los trabajadores, sólo beneficia a un pequeño sector mientras el resto de los trabajadores padecen las consecuencias de las medidas que implementó. En los primeros meses de su gobierno presentó un plan económico que sólo buscó recomponer la rentabilidad del empresariado, con devaluación, quita de retenciones, nuevos créditos internacionales, oferta jugosa a los buitres en Nueva York. Muchas de estas medidas aceleraron la inflación, aún falta el impacto por los aumentos de luz y como si fuera poco, pretenden ponerle un cepo a las paritarias con techos del 25 %. Hay que terminar con el impuesto al salario, que también supo sostener y defender el kirchnerismo, porque el salario no es “ganancia”.