Fuertes rumores de que el Gobierno está cerca de un acuerdo con el PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal, mientras el peronismo no hace nada para impedir los planes oficialistas. La izquierda plantea que el parlamento voltee el DNU, esta ley antipopular a favor de los poderosos y el protocolo represivo de Bullrich. Pero, sin ninguna confianza en esta institución, más que nunca está planteado preparar con fuerza el paro del 24 y movilizar al Congreso Nacional cuando intenten votar esta ley, que no se puede negociar.
Fernando Scolnik @FernandoScolnik
Sábado 20 de enero de 2024 09:00
Durante la mañana de este viernes continúan con fuerza los rumores respecto de que el oficialismo estaría muy cerca de alcanzar un acuerdo con el PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal para votar en el Congreso Nacional la Ley Ómnibus enviada por el Poder Ejecutivo, con algunas modificaciones.
Vale recordar que la Ley Ómnibus, junto con el "Caputazo" y el DNU, constituyen el tridente de un ataque en shock que el nuevo Gobierno ha lanzado sobre las mayorías populares, con el objetivo de implementar una fuerte ofensiva y reformas estructurales a favor de sectores concentrados del poder económico.
Sus primeros resultados están a la vista: una inflación que fue del 25,5 % en diciembre y una pobreza que alcanza niveles inauditos. Pero van por más.
Para este plan, el Gobierno nacional encontró un interlocutor de privilegio en el Congreso Nacional en los "colaboracionistas" de los bloques mencionados que, negociando o moderando una parte del articulado, presta sus favores para que la ley reaccionaria se apruebe. Al mismo tiempo, dejan vigente el DNU. Recordemos que el Congreso Nacional tiene la potestad de voltear el decreto si lo rechaza en ambas cámaras. Pero no existe la voluntad política para hacerlo.
Como denunció el Frente de Izquierda durante toda la semana, aún no se conocen los detalles. Esto se debe a que mientras largas sesiones con una gran cantidad de expositores discutían en las comisiones del Congreso Nacional, la verdadera rosca se desarrollaba en otros lados a espaldas del pueblo, en el Hotel Savoy y en despachos en el recinto. Los destinos de las grandes mayorías se deciden en oscuras habitaciones.
Los sectores colaboracionistas querrán presentar que lograron moderar el plan de Milei. Pero es una trampa. No solo quieren dejar en pie el DNU, sino también una enorme parte del articulado de la Ley Ómnibus que perjudicará a los y las trabajadores, a los jubilados, a la cultura, la salud y la educación. Hacen demagogia, diciendo que "quieren defender a los jubilados", pero en el mejor de los casos, con sus propuestas las jubilaciones seguirán en los montos miserables que se pagan hoy y no alcanzan ni siquiera para llegar a mitad de mes.
Además se estaría negociando que Milei cuente con "facultades delegadas", aunque más acotadas. Esto es, darle poderes de monarca a un ultraderechista que además ya tiene en carpeta nuevos tarifazos brutales en gas, luz, transporte y una nueva devaluación que dispare aún más la inflación, entre otras medidas que podría tomar.
Algunos sectores querrán usar esta negociación para desmovilizar. Por otro lado, importantes dirigentes del peronismo como Cristina Kirchner o Sergio Massa permanecen en silencio con la estrategia de que "hay que esperar". Mientras tanto el pueblo trabajador se empobrece.
Pero lo que se impone es todo lo contrario. Reforzar con todo la preparación del paro nacional con movilización del 24 de enero, a pesar de los límites que le pone la burocracia sindical, y preparse para movilizar masivamente el día que quieran tratar esta ley reaccionaria en el Congreso Nacional.
La izquierda exige que el Congreso Nacional rechace esta ley reaccionaria, voltee el DNU y el procotolo represivo de Bullrich. Pero nada podemos esperar de este parlamento: hay que tomar el paro nacional y la movilización cuando se vote en nuestras manos, organizándonos desde abajo en todos los lugares de trabajo y barrios para movilizar esos días y para poner en pie un plan de lucha con continuidad en la perspectiva de la huelga general para derrotar el conjunto del plan de guerra de Milei.
Toda la semana denunciamos las reuniones en hoteles, secretas, para tratar la Ley Ómnibus. Lo que se discutió ayer, por fuera de las reuniones de comisión, no considera lo que decenas de organizaciones vinieron a exponer estos días. Solo contempla los cálculos de los negociadores
— Myriam Bregman (@myriambregman) January 19, 2024
Recortes parciales a una ley ilegal no la mejoran, la tratan de hacer presentable para que los que tienen ganas de colaborar con ataques contra el pueblo, puedan mostrar que "consiguieron algo". Hay que rechazar de plano la Ley Ómnibus, el DNU y todo plan de ajuste, con la lucha.
— Myriam Bregman (@myriambregman) January 19, 2024
Con relación a las jubilaciones, no solo está en cuestión cuál será la fórmula de actualización, sino también qué pasará con el FGS y con lo que los jubilados perdieron durante estos últimos años y que llevó a estas jubilaciones de miseria.
¿Sabremos pronto qué negociaron?— Myriam Bregman (@myriambregman) January 19, 2024
Según todo indica, entre otros puntos, la oposición colaboracionista le va a permitir la Milei a entrega del Fondo de Garantía de Sustentabilidad. Un robo escandaloso a los jubilados
— Christian Castillo (@chipicastillo) January 19, 2024
Fernando Scolnik
Nacido en Buenos Aires allá por agosto de 1981. Sociólogo - UBA. Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001.