En un clima extraño y sin las clásicas manifestaciones de simpatizantes del presidente electo, Joe Biden se prepara para asumir como 46° presidente de Estados Unidos en una Washington militarizada por completo.
Martes 19 de enero de 2021 11:35
Por miedo a nuevas protestas de simpatizantes del mandatario saliente Donald Trump, tanto el centro de Washington como las sedes de los parlamentos de muchos estados del país se blindaron desde el fin de semana y quedaron prácticamente aislados, una imagen que marca la tensión que existe en Estados Unidos en la víspera de la asunción presidencial de Joe Biden este miércoles.
La semana pasada, el FBI advirtió que existían convocatorias para realizar protestas de simpatizantes de Trump frente a las legislaturas de los 50 estados y de la capital. Por eso, el domingo algunos de estos distritos, como Michigan, Ohio y Pensilvania, decidieron reforzar la seguridad de esos edificios hasta blindarlos. Sin embargo las manifestaciones convocadas para el domingo por seguidores de Trump fueron escasas o inexistentes. Tras la toma del Capitolio el miércoles 6 de enero el FBI detuvo a cientos de personas que aparecían en diversas imágenes, e incluso dio a conocer que muchos de los presentes eran miembros de la Policía, o militares (retirados o en actividad), como así también funcionarios locales republicanos. Esta información encendió las alarmas y, ante el fracaso de haber anticipado la toma del Capitolio dos semanas atrás, ahora el FBI no descarta ninguna posibilidad, incluida la de investigar a cada uno de los 25.000 miembros de la Guardia Nacional que están a cargo de la seguridad del evento, en busca de posibles "infiltrados".
Así las cosas, las imagen que se verá durante la asunción de Biden será completamente distinta a la de cualquier presidente. Mientras que el día de la investidura normalmente cientos de miles de seguidores del candidato ganador llenan el mall (parque central de Washington donde se realizan los eventos políticos), en esta ocasión se han plantado cerca de 200.000 banderas sobre el césped, en representación de los manifestantes que no estarán allí.
"Field of Flags" (191.500 banderas) en el National Mall, lugar en el que los seguidores del presidente entrante suelen ir para celebrar la toma de posesión y que este año está cerrado al público debido al asalto al Capitolio del 6 de enero.
📷Joe Raedle, Eric Baradat y Joe Raedle pic.twitter.com/zH4Gq3DR9U— Sarah Yáñez-Richards (@SarahYanezR) January 19, 2021
Si bien muchos de los eventos de la inauguración del 46° mandato presidencial, ya estaban pensadas para ser realizadas en forma virtual por la pandemia del coronavirus, no estaba descartada la movilización de la base demócrata hacia Washington. Sin embargo, luego de la toma del capitolio se terminó por cancelar cualquier tipo de manifestación y se blindó la ciudad como nunca antes.
Este martes por la noche, Biden y la vicepresidenta electa Kamala Harris participarán en una ceremonia en el Lincoln Memorial Reflecting Pool para conmemorar a los casi 400.000 estadounidenses que han muerto a causa del Covid-19. Se trata de una primera señal para diferenciarse de la gestión desastrosa del coronavirus por parte del Gobierno de Trump y va de la mano con una de las promesas que hizo Biden previo a asumir, la de llegar a vacunar a 100 millones de personas en sus primeros 100 días de Gobierno.
Lo que se espera para el día de la asunción
Trump también estará ausente, lo que lo convierte en el primer presidente que se salta la toma de posesión de su sucesor desde Andrew Johnson en 1869. Sí asistirá el vicepresidente Mike Pence.
La toma de posesión de Biden se produce cuando el Senado se prepara para juzgar por segunda vez al presidente saliente Donald Trump, por un artículo de juicio político por instar a miles de partidarios a marchar hacia el Capitolio antes de los disturbios.
Te puede interesar: ¿El impeachment contra Trump realmente enfrenta a la derecha?
Te puede interesar: ¿El impeachment contra Trump realmente enfrenta a la derecha?