El empresario al que se le ha dado la connotación de "filántropo" es conocido por su relación con la CIA, y su apoyo a los procesos de desarticulación popular y violencia en distintos países del globo, en defensa de los intereses capitalistas.
E.E. Vergara Valparaíso, Chile
Martes 21 de marzo de 2017
Este lunes por la mañana, diversos medios de comunicación, dieron a conocer el fallecimiento del multimillonario David Rockefeller, uno de los empresarios más poderosos a nivel a mundial, a causa de una insuficiencia cardiaca, a la edad de 101 años.
La fortuna de los Rockefeller
Rockefeller, perteneció a una dinastía de magnates petroleros y familiares dedicados a la política y a los negocios. Siendo el sexto hermano, se desarrolló como banquero y accionista de importantes firmas, quedando al mando de uno de los bancos con mayor fama a internacional, el National Chase Bank, que pasaría luego a denominarse el Chase Manhattan Bank, siendo durante un tiempo el competidor directo del Citi británico.
La revista Forbes, que data sobre la fortuna de los principales millonarios del planeta, figura a Rockfeller con $3.300 millones de dólares, quedando en la posición 604 entre las personas más ricas del mundo.
Así también destaca la afición del gestor del World Trade Center, por el arte y en particular la pintura, siendo dueño de diversas obras las cuales pasaban por autores como Gauguin o Picasso, sumando así una vasta fortuna en dicho ámbito.
Su ligazón con la dictadura en Chile y Latinoamérica
Se ha conocido el vínculo de David Rockefeller con diversas dictaduras a través de sus memorias, donde retrata su amistad con el conocido empresario chileno y dueño del diario El Mercurio, Agustín Edwards, y su cercanía con los economistas gestores del neoliberalismo en Chile, los Chicago Boys. Junto con esto también ha reconocido su vínculo con el presidente Nixon y la CIA norteamericana, y el plan de desmantelamiento de la Unidad Popular y el movimiento de izquierda a nivel latinoamericano conocido como Plan Cóndor, el cual significó un plan definido de torturas, asesinatos y desapariciones.
Ningún filántropo, un empresario partícipe de la abominación capitalista
Rockefeller, no es ningún filántropo como señalan algunos medios vinculados al empresariado. La fortuna de David Rockefeller, al igual que la de su familia, se ha basado en la explotación de miles de trabajadores y la especulación monetaria que somete al pueblo trabajador a brutales planes de austeridad, recortes fiscales, y ajustes salariales, mientras ellos –los filántropos- disfrutan placenteramente en sus mansiones, con sus autos y banquetes, junto a sus otros amigos empresarios.
Es quien sin ningún escrúpulo, participó activamente por el desmantelamiento y la masacre de miles de personas que decidieron rebelarse en contra del modelo capitalista, sufriendo gran parte de ellos de las más sanguinarias dictaduras. Es quien no dudó de poner a los servicios de inteligencia y militares para defender sus intereses y el de los más crueles empresarios.