La Municipalidad de Antofagasta no ha podido estar en calma. Los episodios de precarización y el escándalo por la relación entre personeros del Partido Socialista de Wilson Díaz con fiestas con armas y drogas han marcado la semana en una institución que pareciera que día a día se la carcomen desde adentro. Y es que son los partidos del régimen quienes toman las decisiones, los mismo que durante 30 años no han hecho nada más que privatizar derechos y enriquecerse a costa del trabajo ajeno.
Domingo 4 de abril de 2021
No hay plata para sueldos, pero sí para asesores
Hace pocos días se conoció que funcionarios del municipio, afectados por la crisis sanitaria y miembros del sector a honorarios de la casa consistorial dieran a conocer mediante redes sociales que no se le pagó el sueldo correspondiente a los meses de enero, febrero y marzo. un escándalo interno que hizo poco eco en la opinión pública, seguramente por no ser el primer caso de este tipo de prácticas.
Sin embargo, la denuncia realizada por los trabajadores daba cuenta de una lamentable realidad: mientras se negaba el salario que sustenta los hogares de los trabajadores, existían millonarias contrataciones de último minuto para el equipo de confianza del ahora suspendido alcalde Wilson Díaz. Esto sin mencionar los 7 millones que recibe mensualmente la autoridad edilicia de una de los municipios con mayor recaudación y presupuesto del país.
La quinta municipalidad de Chile hoy se encuentra bajo la custodia del Partido Socialista y la mal llamado “Socialismo Democrático”, grupo de cazarrecompensas a sueldo que solo buscan utilizar el dinero público para concretar millonarios negocios. La vieja concertación y los renovados de la exNueva Mayoría continúan con el legado de Karen Rojo en materia de privilegiar a ciertos sectores.
De esto no se puede separar a la derecha quien mediante la exalcaldesa ligada a la UDI solo tuvo restricciones para las y los trabajadores, todo en desmedro de los servicios esenciales para la comunidad.
Lo vimos con las faltas hacia la madres trabajadoras quienes sin ostentar un contrato de trabajo laboran en jornadas extenuantes sin beneficio alguno. Y ahora con esto se da cuenta de un nuevo golpe a uno de los sectores mayoritarios de la plana laboral municipal.
“hay un agotamiento, porque no hay preocupación por los honorarios, en el tema de salud se nos pidió que sacáramos la pega igual sabiendo las condiciones sanitarias, también que nosotros tenemos que pagarnos nuestras cotizaciones, tenemos que imponer en tanto la AFP, como salud, Isapre o Fonasa“ aseguró uno de los trabajadores que tuvo que renunciar por el no pago de sus sueldos, todo en la búsqueda de un mejor pasar en el complejo contexto de la crisis sanitaria.
Ketamina y revólveres: el duo de militantes del PS que aprobleman a Díaz
Wilson Díaz es actual candidato a la alcaldía por Antofagasta. Conocido por sus casos de maltrato hacia dirigentas sindicales y el despotismo ante las justas demandas de funcionarios hoy busca mediante un cupo del Partido Socialista el mantenerse en el cargo que logró negociar con los otros partidos de oposición e incluso el oficialismo al interior del Concejo Municipal. Sin la voluntad del pueblo, quien fue concejal con apenas unos miles de votos hoy tiene acceso a la maquinaria edilicia, con la que busca poner acento a su campaña y propuestas.
Hace poco se conoció su conflictivo caso con la prensa, donde al aparecer como sujeto de entrevista en calidad de alcalde en una nota del departamento de comunicaciones de su gabinete, tuvo un encontrón con periodistas respecto al uso de plataformas y recursos públicos para beneficiarse a sí mismo, hecho que a todas luces da muestra de la ventaja técnica que tiene, ante un ley orgánica de municipalidades que entrega estos vacíos y que incluso para contraloría constituye un privilegio, por lo que se decretó la abstención de este tipo de acciones mediante el uso de cargos públicos para otros fines.
Sin embargo, lo que nubló el panorama para Díaz tuvo que ver con las duras críticas que recibió tras darse a conocer que de 9 personas que habían sido detenidas en el contexto de una infracción al código sanitario se encontraran 2 de personeros ligados a su campaña, una miembro de su gabinete de confianza y el candidato a concejal por Antofagasta Ismael Valdés.
Hecho que no dejó ajeno a nadie debido a que dada la detención, fue la misma policía quien dio cuenta de que se encontraron con un arma y drogas en la fiesta desde donde fueron detenidas estas personas.
Situación que fue aprovechada por diversos personeros tanto de derecha como la centro izquierda para golpear directamente a Díaz, mostrando la hipocresía de los mismos que han administrado la miseria en el municipio, solo para obtener réditos políticos en el marco de una campaña electoral hacia los comicios de mayo. De esto nisiquiera los independientes pueden despegarse en un sentido de ello. Y es que de todas maneras, los partidos tradicionales tienen ramificaciones desde distintos ángulos en la arena política.
No obstante esto solo ha demostrado el nivel de militantes que mantienen estos partidos pro empresariales, de lo cual desde el comando de Díaz se limitaron a condenar y de acusar una supuesta “operación política” en su contra, mismo estilo que mostraba Karen Rojo frente a las acusaciones por fraude al fisco por parte de tribunales.
Posibles vínculos delictivos que dan cuenta de cómo siguen operando las verdaderas mafias internas de los partidos de los 30 años, quienes en representación de sus propios intereses siguen usufructuando del dinero público en desmedro de los grandes problemas de la población y los trabajadores.
Debemos darlo vuelta todo y tener a trabajadores administrando el municipio, ejerciendo las atribuciones y planes que permitan avanzar a acabar con los males de una de las regiones más crudas en lo que desigualdad y precariedad respecta. Sin acabar con los partidos de los 30 años no se podrá avanzar hacia decisiones que beneficien a miles y millones. Acabando con los privilegios de estos verdaderos políticos a sueldo.
