En acuerdo con el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, y representantes de las fuerzas federales, en menos de 15 días llegaría Gendarmería al distrito.
Lunes 21 de noviembre de 2016 17:01
Patricio Mussi, el intendente que inauguró la policía local, ahora también acuerda la llegada de las fuerzas militares a Berazategui. Luego de finalizado el encuentro, el jefe comunal expresó en sus redes sociales: "Acordamos acciones y la llegada de 200 gendarmes en los próximos 15 días a nuestra ciudad, para seguir trabajando por la seguridad de los barrios y vecinos de Berazategui".
Cabe recordar que hace unos meses Mussi viene despotricando contra el allanamiento realizado en el municipio por Gendarmería, a cargo del juez federal Luis Armella. En ese caso admitió en varios portales la violencia con que las trabajadoras y trabajadores del municipio fueron maltratados por los efectivos. Retuvieron empleados municipales en sus oficinas y les prohibieron abandonar las instalaciones bajo cualquier circunstancia. Gendarmería cortó internet y las líneas telefónicas, los trabajadores solo poseían sus teléfonos personales.
Una de las trabajadoras que se encontraba dentro del edificio municipal durante ese allanamiento, relataba: "Estamos sitiados desde esta mañana por Gendarmería, ningún empleado municipal por más rango que tenga puede salir de la municipalidad en una privación ilegítima de la libertad total. Nadie nos explica nada, hay mujeres que tienen que ir a buscar a sus hijos a la escuela y no las dejan salir tampoco. Hay empleados a los que les están revisando los objetos personales como carteras y celulares, computadoras y autos. Se dice que vamos a estar acá hasta la noche”.
El diputado Juan José Mussi, padre de Patricio, dijo en aquel momento: “No me dejaron entrar y no me explicaron nada (…) rompieron cajones de escritorios, hicieron bajar un techo para investigar, todo muy desprolijo”. “Es peor que en las épocas militares”, señaló y aseveró que “es todo muy llamativo, parece más un caso de persecución política que una investigación judicial real”.
Control social y criminalización de la pobreza. Macrismo y peronismo… un solo corazón.
Si bien los Mussi han admitido en decenas de declaraciones la violencia con la que operan las fuerzas de “seguridad”, ahora 200 gendarmes están listos para llegar al distrito con su visto bueno. ¿Cuál sería entonces el beneficio para trabajadoras y trabajadores, mujeres y jóvenes con la presencia de Gendarmería en los barrios?
Los casos de violencia institucional y todo tipo de abusos que se sufren en los barrios, no dejan de evidenciar la podredumbre de las fuerzas de “seguridad”. No se trata de casualidades ni “manzanas podridas”, son estas fuerzas las grandes dirigentes del delito organizado, las principales responsables y beneficiarias de la inseguridad. Pero la defensa de los Mussi es de clase, por eso en este caso las fuerzas represivas son más que bienvenidas. A la hora de ejercer control social y de criminalizar la pobreza, macrismo y peronismo… un solo corazón.