El arranque del campeonato para los de Mataderos no fue el más deseado pero tampoco un comienzo amargado.
Martes 30 de agosto de 2016 14:31
Foto: Emiliano Toledo - Prensa Crucero
Jugar en misiones contra Crucero del Norte siempre es complicado, un equipo que como local se hace fuerte y aprovecha las ventajas de conocer bien su campo de juego. Para analizar el partido jugado el lunes por la noche hay que remarcar que la cancha se encontraba en condiciones pésimas tras dos días de lluvias constantes en la zona.
En los 90 minutos fue un partido parejo, cuatro goles, dos expulsados y varias situaciones de gol. A los 29’ del primer tiempo el colectivero se puso en ventaja, tras una mala salida del arquero Semeao, que minutos antes había remplazado al “oso” Sánchez, la pelota rebota en el jugador Lechner y adentro. Chicago se levantó y fue a buscar el empate, en los minutos finales del primer tiempo el juego fue más dinámico, el torito busco el empate y lo consiguió a través de Nicolás Sainz a los 45’.
En el segundo tiempo Chicago salió a buscarlo y a los 67’ tras un error en la defensa misionera que dejó a Alejandro Melo mano a mano con el arquero Arce, ponía el partido 1-2 para Mataderos.
En los minutos siguientes Crucero fue a buscarlo y Chicago se replegó, pudo liquidar el pleito en una jugada entre Rizzo y Melo que no supieron aprovechar. Tras varios intentos de Crucero por vencer el arco de Semeao a los 82’ el jugador Vera conecta un centro tras otra mala salida del arquero y las cosas iguales. Resultado final 2-2.
Nueva Chicago vuelve a Mataderos con un punto en el bolsillo, Fattori expulsado, Matias Valdez y Alejandro Sánchez lesionados. Viendo las condiciones del campo de juego, el hecho de perder a su arquero de arranque y la expulsión de un jugador clave, es un punto que vale.
