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Red Internacional
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Sociedad. Nadie les cree: estudio revela que 66% de la población desconfía del Gobierno

Para el estudio se encuestó a 2.552 personas y fue realizado por especialistas de facultades como la de Ciencias Físicas y Matemáticas, Ciencias Sociales, Economía y Negocios; Filosofía y Humanidades, Medicina y Derecho.

Sábado 12 de septiembre de 2020

Evaluación del gobierno, respuesta de este a las problemáticas actuales, diferencias entre antes y ahora en pandemia sobre vida en el hogar, relaciones familiares, trabajo, etc. Son parte de los temas relacionados a la encuesta. ¿Cómo la pandemia ha cambiado la vida en este tiempo?

Los resultados revelan una alta desconfianza al gobierno, 66% aseguró tener poca o nada de confianza en las determinaciones de la autoridad central. Mientras un 19% califica al poder Ejecutivo como confiable. 63% considera que la autoridad central ha sido poco o nada efectiva en su actuar. Un 62% de los encuestados piensa que se ha protegido poco o nada a las personas mas afectadas por la pandemia, como el caso de trabajadores informales, inmigrantes, de la construcción o independientes.

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Fiel reflejo de la realidad en la sociedad chilena, la situación de las y los desempleados, la asistencia a trabajos no esenciales, que son riesgo inminente de contagio, versus la necesidad del dinero; la respuesta nefasta a los sectores más afectados por la pandemia, como se demostraba al comienzo de ésta en poblaciones como en la comuna de El Bosque. Percepción que se reafirma a medida que avanza el tiempo, el beneficio a las grandes empresas como la Ley de "destrucción" del Empleo, ministros controversiales e ineficientes como Figueroa en la cartera de Educación. A esta percepción se suma el malestar y el descontento que se viene arrastrando desde el estallido social de octubre pasado, la pandemia solo ha dejado más al descubierto la verdadera naturaleza del gobierno y el interés que hay detrás de quienes están en La Moneda y manejan el país, los empresarios.

Vida en el hogar

El estudio además consideró profundizar el impacto que ha generado la crisis sanitaria al interior de los hogares. Siendo las mujeres quienes se han visto más afectadas tanto en tareas de crianza y cuidado, como también en los trabajos domésticos y laboral.

En el incremento en las labores del hogar, las mujeres dicen tener un aumento de un 52%, mientras los hombres un 37%. La diferencia se demuestra también en cuestiones de responsabilidades educacional con hijas e hijos, donde 67% de las madres dicen acompañar en esas tareas a sus hijes y los hombres un 43%.

Queda demostrada en esta encuesta, cómo los roles de género se han profundizado durante la pandemia, una arista más de la crisis del sistema capitalista, donde son las mujeres quienes cargan con más tareas en sus vidas.

En cuanto al trabajo remunerado, un 38% indicó que trabaja de manera remota y un 47% dice hacerlo de manera presencial. Dentro de esto se evidencia que un 48% de quienes tienen teletrabajo son mujeres y un 33% hombres.

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Mal manejo del gobierno y desarrollo de la crisis

La nefasta gestión del gobierno frente a la pandemia y la crisis económica que se ha profundizado por esta, las medidas desacordes a los momentos que se viven, como el plan de desconfinamiento, que ha significado aumentar las cifras de contagio y muertes por COVID-19 esta ultima semana, cuando las cifras oficiales estaban mostrando un descenso en los casos. Además de la pésima sino nula respuesta a los casi dos millones de trabajadoras y trabajadores actualmente en desocupación, cifra que podría seguir en aumento.

Es necesario levantar un plan desde los sectores más vulnerables, trabajadores, cesantes, mujeres, etc. Para proponer salidas y exigir a las autoridades las respuestas acordes a las necesidades de las amplias mayorías. Así como también un llamado y exigencia a las centrales sindicales como la CUT a imponer una agenda a la ofensiva para conquistar demandas históricas, como el aumento del sueldo mínimo o la reducción de la jornada laboral. No puede contentarse con $1.500 de aumento del sueldo mínimo. Hay que ofrecer una salida que de soluciones reales a las miles de problemáticas con que se enfrenta la población pobre y trabajadora.