CGT Enseñanza lanza una campaña para denunciar y pedir el cierre de las aulas concertadas innecesariamente en Zaragoza que la escuela pública puede asumir perfectamente.
Miércoles 23 de noviembre de 2016
Foto: CGT
Este sindicato, el segundo en representación en la educación pública en Aragón, ha lanzado una campaña titulada “Racionalización de conciertos educativos para evitar el despilfarro de dinero público”. La misma, presentada públicamente la semana pasada, está basada en un informe elaborado por esta organización.
En el mismo, destacan que “sólo en la ciudad de Zaragoza nos encontramos con un total de 41 aulas que no deberían concertarse de nuevo en pro de una buena administración de los recursos públicos”. Según los datos recogidos, estas aulas podrían ser asumidas por los colegios públicos de la misma zona donde se encuentran estos colegios privados.
Afirman que un aula concertada (aula de un colegio privado subvencionada con dinero público) supone un gasto de casi 40.000€ al año. La eliminación de estas aulas concertadas no necesarias supondría un ahorro para la Administración de unos 750.000 euros anuales. Para comprender la importancia de esta cifra, la misma equivale a alrededor de 120 profesores de apoyo, 5.000 becas de comedor, 25.000 becas de material escolar, 150.000 libros, 15.000 ordenadores o 60 nuevos auxiliares de infantil por citar algunos ejemplos.
Parar la renovación de estos conciertos educativos en enero
Este es el gran objetico de la campaña iniciada por el sindicato. Esos conciertos educativos se renuevan cada 6 años, y este próximo mes de enero es cuando toca volver a hacerlo. Por ello además del estudio y la denuncia pública de la situación, la principal tarea es la eliminación de estas aulas concertadas.
Para conseguirlo, CGT ha iniciado una ronda de contactos con partidos políticos, asociaciones de vecinos, asociaciones de padres y madres, etc, para que se suman a la campaña. La misma quiere incidir sobre todo en los barrios y colegios que más han padecido los cierres de aulas públicas en favor de la escuela privadas concertadas. Este es el caso de los barrios zaragozanos del Actur, Torrero y las Fuentes. Por eso mismo, es en estos dos últimos es donde ya se han convocado don concentraciones para conseguir el pase de estas aulas a la escuela pública.
Por la eliminación total de la escuela concertada
Apoyamos con todo esta campaña y creemos que si consiguiera cerrar estas aulas sería un gran éxito, aún así pensamos que hay que seguir avanzando a hacia una educación completamente libre, pública y gratuita.
Decimos esto, porque aun así seguiría habiendo cientos de aulas en Aragón, y miles si hablamos del Estado español, de la escuela privada financiadas con dinero público.
Escuela privada que como empresas que son solo buscan el mero beneficio económico sin impórtales nada más. Centros, la mayoría en manos de la Iglesia Católica o de sus “sectas” análogas como el “Opus Dei”, que imparten una educación ultraconservadora, segregadora y elitista. Ideario muy alejado del que muchos docentes queremos transmitir basado en la tolerancia, la integración y la igualdad de oportunidades, aunque debido a la ideología y las trabas que nos impone este sistema educativo cada vez sea más difícil poder hacerlo.
Tenemos que pelear por la completa eliminación de la enseñanza privada y concertada. Para ello exigimos la “nacionalización” o “expropiación” de todos estos centros, sin ningún tipo de indemnización por supuesto y su “pase” a la red pública.
Esto evidentemente no debe suponer ningún despido de los trabajadores que actualmente trabajan en estos centros. Hay que recordar que estos compañeros tienen unas condiciones laborales y salariales mucho peores que los trabajamos en la escuela pública.
Por ello, estos deberían pasar a la red pública manteniendo sus puestos de trabajo e igualando sus condiciones a la de los trabajadores de la misma. A si mismo se les debería dar un lógico periodo de adaptación y transición, 5 o 6 años o dos convocatorias de oposiciones, en el que conservarían su plaza. Durante el mismo podrían asegurar su plaza docente “en propiedad”, en ese centro o en otro, “aprobando” la oposición y pasando así a ser funcionarios.
De esta forma no solo conseguirán asegurar su puesto de trabajo, sino que se igualaría el acceso a los mismos, ya que actualmente son “a dedo” y dependen de la “arbitrariedad” de la empresa privada o cargo religioso que gestiona el centro.
Sabemos que esto solo se puede conseguir con una gran movimiento unitario de toda la comunidad educativa (padres y madres, estudiantes, docentes y trabajadores no docentes). Movimiento que impulse una gran movilización continua que imponga esta eliminación de la enseñanza concertada y cualquier tipo de centro que utilice la educación como negocio privado para ganar dinero. Esta es un derecho básico fundamental con el que nadie debe “jugar”.