Tras el exitoso lanzamiento de Pokemon Go a principios de julio, Nintendo duplicó su valor en la bolsa. Sin embargo, este lunes las acciones de la multinacional japonesa registraron su peor caída en los últimos 26 años. ¿Qué pasó el fin de semana?
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Martes 26 de julio de 2016
A poco más de dos semanas del lanzamiento oficial en algunos países del juego de realidad aumentada para dispositivos móviles Pokemon Go, las acciones de Nintendo registraron un alza de más del 100%, pasando de cotizarse en 19 mil millones de dólares a 40 mil millones.
Sin embargo, el coloso de los videojuegos comenzó esta semana con la noticia de que sus acciones en la bolsa de Tokio habían sufrido una de sus peores caídas en los último 26 años, ¿la razón? un comunicado de la empresa en donde informan que el éxito de Pokemon Go no tendría gran impacto en sus resultados trimestrales.
A pesar de que Nintendo es accionista de la desarrolladora Niantic Inc. (filial de Google) y poseé 32% de los derechos en la firma The Pokemon Company, informaron que el éxito de la aplicación gratuita no se verá reflejado en su balance, mismo que se publicará este miércoles.
Tras la emisión del comunicado el viernes pasado, las acciones de la compañía sufrieron una caída de 17.72%, lo que le significó una pérdida de 708 millones de yenes (equivalentes a 6.7 mil millones de dólares) hasta el lunes.
Este martes, la tendencia a la baja continúa, con un descenso de 2.15% más con respecto al lunes.
Esta noticia permite pensar en quiénes son los verdaderos beneficiarios del éxito de la aplicación. El comunicado de la empresa con sede en Kioto informó que la filial Pokemon Co es concesionario de las licencias y cuotas ante la desarrolladora estadounidense Niantic Inc., sin embargo, ésta recibe apenas una parte de las ganancias.
Todo apunta a John Hanke, fundador en 2010 de Niantic Inc, quien se independizó de Google (en donde fue director de Google Maps y Street View), hace apenas un año. Con tan sólo 50 empleados, el también desarrollador de Google Eart se perfila para posicionarse junto con Mark Zuckerberg y Steve Jobs en uno de los visionarios tecnológicos más influyentes de la década.
