×
×
Red Internacional
lid bot

Periodistas. Notimex: 2 años de huelga sin solución

Este 21 de febrero se cumplieron 2 años de la huelga que mantienen las trabajadoras y trabajadores de la Agencia de Noticias del Estado Mexicano (Notimex).

Lunes 21 de febrero de 2022

Para ellxs, la llegada de Sanjuana Martínez a la dirección de la agencia en marzo de 2019, como funcionaria del gobierno de la 4T, no representó un cambio positivo.

Acoso laboral, violaciones al Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) y despidos injustificados —que llegaron a más de 200— provocaron, primero, que las y los trabajadores se organizaran para elegir una nueva dirigencia sindical y, posteriormente, que decidieran estallar la huelga para defender sus derechos.

La prepotencia y arbitrariedades de Sanjuana y sus subalternos, no obedeció a sus rasgos personales, sino a su clara intención de degradar los derechos humanos-laborales plasmados en el CCT, cuya titularidad ostenta el Sutnotimex, para avanzar así con la precarización laboral en la agencia con el pretexto de la llamada "austeridad republicana". Tal como está sucediendo en otras dependencias federales y estatales, más allá del partido que gobierne.

Sin embargo, tal parece que la "austeridad" de la 4T aplica solo para las y los trabajadores, ya que aún durante la huelga Sanjuana Martínez ha seguido cobrando su sueldo de más de 100 mil pesos, mientras que quienes reclaman sus derechos quedaron sin sustento.

Una justa lucha

Desde el primer momento, las trabajadoras del Sutnotimex —que son la mayoría de quienes sostienen la huelga— se pusieron al frente de esta lucha. Montando los campamentos y haciendo guardias en ellos, afuera de los edificios donde operaba la agencia, para hacer efectivo el cese de actividades.

Primero, frente a las oficinas de Av. Baja California y de la calle Morena, en las colonias Roma y Del Valle; luego en la calle África, en Coyoacán, donde Sanjuana montó ilegalmente una sede clandestina de la agencia para violar la huelga.

En donde se han mantenido firmes desde hace dos años a pesar del cansancio, las inclemencias del tiempo, la falta de recursos y el impacto de la pandemia en su salud y la de sus familias, ante la cerrazón e indolencia del gobierno federal, que evidencia claramente su carácter patronal.

Esto, mientras a nivel nacional se multiplican las agresiones y aumentan semana tras semana los asesinatos de periodistas.

A la par, las trabajadoras y trabajadores del Sutnotimex consiguieron que su huelga fuera reconocida legalmente, a pesar de todos los obstáculos que les puso la patronal. Además de interponer demandas por la reinstalación de los despedidos ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, que han tenido como resultado más de 40 laudos favorables, pero que no han podido ejecutarse por la falta de solución a la huelga y que no garantizan por sí solos que en un futuro se acaten.

La dirección de la agencia, por su parte, luego de no conseguir que la huelga fuera declarada ilegal, promovió un sindicato blanco para sustituir al Sutnotimex, maniobra que fue rechazada mayoritariamente por la base trabajadora, tanto por los sindicalizados como por muchos de los no sindicalizados que fueron contratados para utilizarlos como esquiroles.

Simulación y represión

Ante las justas y elementales demandas de las y los huelguistas, el gobierno federal ha jugado a “dos bandas”, que han ido de la mano para desgastar y no resolver la huelga.

Un ala, representada por la Secretaria del Trabajo, María Luisa Alcalde, se mostró más dialoguista y supuestamente favorable a una resolución negociada del conflicto laboral. Esto posibilitó que se entablaran algunas mesas de diálogo en la Secretaría de Gobernación, entre funcionarios y lxs representantes del Sutnotimex, que no llevaron a ninguna solución pero sí le permitieron al gobierno federal ganar tiempo para desgastar la lucha, tratando de mostrar a los huelguistas como “intransigentes” por no querer ceder en sus demandas.

Mientras que Sanjuana se encargó de hacer el “trabajo sucio”, promoviendo cotidianamente con los mismos recursos de la agencia, la descalificación y criminalización de lxs huelguistas y de sus dirigentes. Hasta llegar al grado de interponer una denuncia penal contra la Secretaria General del Sutnotimex, Adriana Urrea, basada en acusaciones calumniosas e infundadas, como finalmente se demostró.

Mención especial merece el vergonzoso papel de la titular de la CNDH, Rosario Ibarra, que en lugar de defender los derechos humanos-laborales de las trabajadoras y trabajadores, se posicionó del lado de la funcionaria que los viola. También es cuestionable el papel del diario La Jornada, que en lugar de informar verazmente acerca del conflicto, se ha prestado una y otra vez para reproducir solamente la versión oficial contra la huelga, cual panfleto oficialista.

La sustitución de Olga Sánchez por Adán Augusto López al frente de la Secretaría de Gobernación, en agosto de 2021, no significó un cambio de la política del gobierno federal hacia la huelga. El nuevo titular de la dependencia llegó queriendo chantajear a lxs huelguistas: o aceptan regresar con Sanjuana Martínez al frente de la agencia y sin su dirigente sindical, Adriana Urrea; o Notimex será liquidada. Este ultimátum fue categóricamente rechazado por las trabajadoras y trabajadores en su asamblea sindical. En castigo, las puertas de la SEGOB volvieron a cerrarse para ellxs.

En tanto que el presidente no ha tenido empacho en reiterar su respaldo a Sanjuana Martínez, mientras dice generalidades a favor del “diálogo” y de una “pronta solución” del conflicto, como si no tuviera ninguna responsabilidad en el mismo.

Es que no hay “buenos y malos” en el gobierno federal. Sino que éste tiene, más allá de sus discursos y de sus planes de asistencia social, una política contraria a los derechos laborales e intereses de los trabajadores y sus luchas, como ha quedado ya más que demostrado durante los dos años de huelga en Notimex. Ésta se convirtió ya en un “caso testigo”, cuya resolución positiva o negativa sentará un importante precedente para las luchas obreras y populares por venir. De ahí la intransigencia de un gobierno que está dispuesto a ceder a las presiones de los empresarios y el imperialismo, pero no a las demandas de las y los trabajadores.

La huelga puede triunfar

La tenaz resistencia de las trabajadoras y trabajadores del Sutnotimex, ha estado acompañada por múltiples expresiones de solidaridad por parte de diversas organizaciones: colectas, acopio de víveres, acompañamiento en las guardias y en las movilizaciones, festivales culturales, etc.

Con nuestras modestas fuerzas, desde el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas y las diferentes agrupaciones que impulsamos con compañeras y compañeros independientes en nuestros lugares de trabajo y estudio, hemos difundido y acompañado activamente esta lucha desde el principio hasta ahora.

Pero todo lo que se ha hecho no ha sido suficiente para lograr el triunfo. Es que a pesar de la gran voluntad de resistencia que han demostrado las y los trabajadores del Sutnotimex y de todos los recursos legales que les han sido favorables, les ha faltado la fuerza necesaria para doblegar con la lucha en las calles la voluntad de la patronal. Fuerza que solo podrán encontrar en otras trabajadoras y trabajadores, no en los funcionarios del gobierno federal que simulan estar de su lado, ni en los legisladores de los partidos patronales, llámense progresistas o neoliberales.

Lamentablemente, los dirigentes de las principales organizaciones sindicales, como la UNT, la Nueva Central de Trabajadores y la CNSUESIC, que dicen estar a favor de la huelga, también han jugado un doble juego. Mientras se pronuncian por su resolución, envían representantes a las guardias, brindan asesoría legal o destinan algunos recursos (aunque insuficientes), al mismo tiempo han dejado la huelga aislada, al negarse a convocar a sus agremiados a acciones efectivas y masivas de solidaridad.

Las trabajadoras y trabajadores de base de estas organizaciones y otras más como la CNTE, deberíamos discutir cómo lograr imponerles a los dirigentes que pasen de las palabras a los hechos, rompan con su pasividad y convoquen a un paro nacional, al menos de un día, e impulsen la solidaridad activa por el triunfo de las y los trabajadores de Notimex. Pues si ellos triunfan, triunfamos todxs, pero un golpe contra ellxs será un golpe contra todxs.