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Red Internacional
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Coronavirus. Todas las fuerzas de los trabajadores para combatir la crisis COVID-19

La carta de los 56 alcaldes exigiendo "cuarentena nacional" nos permite abrir una serie de discusiones sobre cómo afrontar de mejor manera esta coyuntura, cuando tenemos al frente un gobierno irresponsable, y atrás un 18 de octubre.

Domingo 22 de marzo de 2020

Cincuenta y seis alcaldes de todo el régimen político chileno, desde la UDI hasta el Partido Comunista y el Frente Amplio, enviaron una carta a Piñera y al congreso para solicitar una "cuarentena obligatoria nacional", como medida urgente para detener los contagios del Covid-19. En esta nota queremos discutir en su contenido, sus alcances y sus límites, y los caminos que hoy se abren para combatir esta pandemia, considerando a nuestras espaldas todo el proceso abierto desde el 18 de octubre.

“El conjunto de alcaldesas y alcaldes firmantes venimos a sostener de forma urgente la necesidad de pasar cuanto antes a un estado de cuarentena obligatoria nacional. La experiencia de los países que han tenido más éxito en el control de la pandemia del COVID-19, así como la opinión de numerosas científicas y científicos, establecen que la medida más relevante para contener el contagio, y con ella la presión desbordante sobre los sistemas de salud, es la cuarentena.”

La solicitud es clara, y parece ser dentro del espectro político y social, un consenso que la cuarentena total obligatoria podría ser la mejor salida para combatir el Covid-19. Incluso la misma presidenta del Colegio Medico está insistiendo en esta medida. Y quién no podía faltar y dar la nota alta, el ministro de salud Jaime Mañalich, no demoró en tratar la solicitud como una insensatez, de un absurdo incluso, ganándose de pasada el repudio de amplios sectores.

Pero a pesar de la importancia y lo correcto que tienen las medidas de distanciamiento social y de cuarentena para bajar los niveles de contagio, por si sola y si no viene acompañada de otras medidas sanitarias y de organización política, económica y social, incluso, ahí sí que la sola cuarentena total obligatoria podría pasar a ser incluso el detonante para que el mismo gobierno desate su represión (ya los militares recorren el país y hoy se decretó "toque de queda" en todo el país a partir de las 22 horas y hasta las 05:00 horas, ¡para que las personas vayan a trabajar!) sobre los que están hoy en peores condiciones materiales para enfrentar una cuarentena total obligatoria, como las familias trabajadoras y sectores populares.

Más aún cuando el plan económico del gobierno consiste en $13.155 para más de 2 millones de trabajadores informales, en negro, que no cotizan, etc.

Tests, tests, tests y más tests

De allí la ahora criminal política del gobierno de no implementar masivamente los tests de detección del coronavirus, medida clave para acompañar las cuarentenas, donde señaló poseer 250.000 test, y de tener una capacidad de aplicación de 3.500 test por día, y donde se están aplicando solo ¡800 por día! Sobre esto citamos al médico antofagastino Néstor Vera: "O es falso que hay 3.500 test diarios disponibles, lo cual es posible ya que el Colegio Médico dijo que el gobierno no da toda la información de la que dispone, o estamos frente a grupo de irresponsables, de los más grandes de la Historia. ¿Cómo no usar lo que ya se dispone? ¿Qué esperan? ¡Ni hablar si ya adquirieron 250 mil test!" [1]

El mismo New York Times, uno de los principales diarios del imperialismo, en su editorial del jueves 19, espantados con la actitud de Trump, sustentándose en la experiencia científica que se está discutiendo hoy, advirtió: "La Organización Mundial de la Salud (OMS), desde hace semanas, ha estado haciendo una advertencia enfática a los países de todo el mundo: El distanciamiento social es crucial para detener la propagación del coronavirus, pero es sólo la mitad de la ecuación. Para suprimir y controlar una pandemia de esta magnitud, los países también deben encontrar y aislar a todas las personas infectadas por el COVID-19 - incluyendo a aquellos con casos leves de la enfermedad que no se presentan en los consultorios médicos o en los hospitales." [2]

Y es que la experiencia lo comprueba, el país más exitoso en combatirla hasta ahora, y que por su cercanía a China, sigue siendo uno de los mas expuestos, Corea del Sur, que ha centrado sus fuerzas en la aplicación de tests masivos a la población para detectar y aislar el virus donde este se encuentre, acompañado de medidas de distanciamiento social, logrando excelentes resultados, a pesar de que este sigue cobrando vidas, pero a la baja y muy por lejos de los niveles que han alcanzado países como Italia o Irán. Apenas aparecieron los primeros casos el 20 de enero, se realizaron más de 250 mil test para detectar y aislar a los infectados.

Estadística: Número de personas fallecidas a causa del coronavirus (COVID-19) en el mundo a fecha de 19 de marzo de 2020, por país o área | Statista
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"Corea del Sur tiene alrededor de 8.000 infectados. Italia e Irán lo superaron esta semana como los países con más casos fuera de China. Los nuevos casos de Corea del Sur han disminuido gradualmente desde finales del mes pasado. Por primera vez desde el 20 de enero, el número de pacientes liberados del tratamiento el viernes 13 de marzo - 510 - superó los 110 nuevos casos". Y aunque estas palabras fueron escritas hace una semana en la revista NPR [3], las nuevas cifras entregadas por los servicios de salud surcoreanos siguen la misma tendencia a la disminución y aplanamiento de la curva de contagio. [4]

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La lucha contra la pandemia y la estupidez del gobierno

Chile vive un proceso complejo, abierto el 18 de octubre de 2019, y que está lejos de terminar por más que la derecha y el gobierno busquen cerrarlo con su discurso de unidad nacional.

De ya que ese llamado a un acuerdo nacional con un gobierno asesino, que durante meses soltó todo lo que la relación de fuerzas les daba contra las movilizaciones, dejando decenas de muertos, cientos de mutilados, torturados, y heridos, es de mínima cuestionable, en especial cuando se firman cartas con alcaldes de derecha, que pareciera que están en una disputa con el ejecutivo por cuotas de poder, que por una salida real a lo que nos enfrentamos. Más aún cuando cualquier medida oportuna para enfrentar el Covid-19 ha llegado tarde y mal.

La ciencia y la tecnología han avanzado lo suficiente para que tomando las medidas correctas el virus pueda ser controlado, como el ejemplo de la política de tests masivos que aplicó Corea del Sur, hasta hoy el más efectivo, y que la política de cuarentena sea restringida, para que la circulación de bienes y servicios necesarios para el abastecimiento de millones de personas siga fluyendo, y no acreciente la miseria e inestabilidad del pueblo pobre.

Por eso es totalmente insuficiente la carta a la que se sumaron alcaldes como Sharp y Jadue, medidas de distanciamiento social para este caso son totalmente insuficientes, la exigencia al gobierno debe ser total, porque lo que está en juego son vidas.

Son mucho los factores como para dejar una cuarentena como exigencia máxima, menos a un gobierno como este, parte de todos aquellos gobierno que tras la dictadura se dedicaron a profundizar el modelo de libre mercado sobre la salud, desmantelándola hasta casi hacerla irreconocible, creando una salud para ricos y otra para pobres, y que ahora tiene que responder a una pandemia, cuando ya en condiciones "normales" colapsa.

Las consecuencias de un lock-out total pueden ser incluso peores que el mismo virus, algo que no se puede descartar, el miedo puede ser un acicate efectivo incluso para que el gobierno siga tomando medidas más bonapartistas (represivas) contra la población, ya está dando su primer aviso con los militares en la calle.

Las fuerzas productivas al campo de batalla

Pero de ahí también es importante que sean esos mismos trabajadores, aquellos y aquellas sobre las que aún en estas condiciones sigue funcionando Chile, puedan también en sus trabajos asegurar las condiciones de salubridad, en comités de seguridad e higiene, para velar por su medidas sanitarias apoyados por profesionales de la salud y la prevención.

Así quienes están en aquellas industrias que hoy que puedan reconvertirlas sobre las necesidades más inmediatas para combatir el virus, tal cual una guerra, para pertrechar con la mayor y mejor cantidad de armamento, que en este caso son respiradores, ventiladores mecánicos, ropa de cama, servicios de cattering, mascarillas, alcohol gel, etc.

Algunos dicen que la humanidad hasta ahora ha recorrido su historia por el lado más feo, y es verdad, solo que nunca antes esa misma humanidad había contado con tanta fuerza de trabajo, incluso en aquellos países como Chile donde el neoliberalismo llevó parte de esas empresas a otros lados, pero que aun existe, la industria metalúrgica por ejemplo que apoya toda la faena minera, la industria alimentaria donde Chile se alza como potencia agroalimentaria, la misma minería que sigue siendo el 10% del PIB con reservas aun enormes.

Si esa misma fuerza, que en parte despertó aquel 12 de noviembre, en esa huelga histórica que hizo temblar el oasis de la burguesía chilena, si hoy se vuelca a combatir esta pandemia, produciendo todo lo que necesitamos para combatirla, esta pandemia tendrá enfrente suyo a un enemigo formidable, una verdadera barrera que proteja miles de vidas.