El gobierno catalán aprobó una nueva serie de medidas restrictivas ante el aumento de los contagios en la región.
Jueves 15 de octubre de 2020 19:55
Entre las nuevas medidas se encuentran las de cerrar bares y restaurantes por un periodo de quince días desde este viernes, aunque antes hay que pasar por el visto bueno judicial.
En una rueda de prensa en la que han participado este mediodía el vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonés y los consejeros de Salud, Interior y Empresa, han anunciado también otras restricciones como la actividad comercial que comporte el contacto físico y la limitación al 50% de los cines, teatros, lugares de culto y gimnasios. Además de suspenderse también fiestas, ferias y congresos.
En el mismo sentido, parque y jardines también deberán permanecer cerrados desde las ocho de la tarde y se mantiene el límite de seis personas para las reuniones sociales. No obstante, en las reuniones al aire libre estará prohibido comer o beber.
Por otra parte, ayer se hizo oficial el cierre de las universidades a partir de este jueves y la vuelta a la docencia online para los estudiantes universitarios. Asimismo, el Gobierno hacía un llamamiento también a las empresas a incitar el teletrabajo.
Sin duda, las medidas tomadas por el Gobierno no pasan de nuevas restricciones, dejando nuevamente a miles de trabajadoras y trabajadores sin trabajo, en lugar de medidas urgentes para la seguridad e higiene en los centros de trabajo y educativos frente a esta nueva ola de contagios .
En las últimas 24 horas el número de contagios ha supera los 1.500 diarios. Mientras que el riesgo de rebrote se ha situado en 338,49 puntos y la velocidad de contagio sigue también en aumento.
Todo y así, los datos más alarmantes sobre el nivel de contagios en Cataluña se encuentran en que el número de reproducción del virus por cada persona positiva ha aumentado a 1,3 desde octubre, algo que indica que la pandemia está actualmente en expansión y diferentes médicos y expertos señalan este dato como la muestra de que la pandemia en Cataluña está en riesgo de situarse en los niveles que ahora mismo alcanza Madrid.
