Este 21 de octubre se prepara un nuevo acampe de enfermería. Venimos del acampe frente al Congreso que duró 72 hs. Y comienzan a diseñarse nuevas acciones para la continuidad del proceso de lucha que ya lleva un mes y que dio un salto ante la represión de la policía a las enfermeras que luchamos por el pase a la carrera profesional.
Martes 20 de octubre de 2020 14:59
Mientras el gobierno nacional de Alberto Fernández, junto con Larreta y Kicillof mantienen a los esenciales y profesionales de la salud con sueldos que se encuentran dentro de la línea pobreza, la resistencia a esta situación no cesa.
Según antiguos dirigentes del sector acá "nadie se rinde", pero las centrales sindicales se pusieron de rodillas, aceptando el miserable 7% de aumento para la salud. Somos el sector más expuesto en esta pandemia, la más dramática del siglo. La salud se encuentra con el menor presupuesto posible hace años. Hasta un barbijo nos negaron, tal cual describe y denuncia en su carta nuestra compañera enfermera Natalia Aguilera.
Las y los enfermeras seguimos luchando. Venimos de hacer acciones en los hospitales, como el paro y movilización del 1/10, el mes de lucha Misiones, las denuncias por falta de EPP, y el acampe en CABA frente al Congreso nacional, impulsado por un sector de enfermeros auto convocados, junto SiTrE y ALE. Mientras tanto las conducciones de miles de agremiados, como UPCN/SUTECBA y ATE, hacen acuerdos a nuestras espaldas por monedas. Por ello, estas acciones continuarán este 21 de octubre con la convocatoria a paro en algunos hospitales como el Garrahan y un nuevo acampe en la jefatura porteña.
Dicha jornada, es impulsada por ALE, SiTre, Juntas internas combativas y enfermeros autoconvocados. La convocatoria empieza desde las 8 am, para confluir a las 14 en la Jefatura del Gobierno porteño. Se espera un acto, festival y acampe hasta que el gobierno responda a nuestros reclamos.
Las y los enfermeros que nos movilizamos somos quienes estamos todos los días en la primera línea de batalla contra el Covid-19. Vemos la necesidad de seguir luchando y organizándonos. Tenemos que exigir a los sindicatos que rompan con el gobierno nacional y llamen a asambleas masivas en cada hospital, clínica, sanatorio y centros de salud y desde allí se convoque a una gran asamblea de la Ciudad de Buenos Aires de toda la enfermería y de todo el personal de salud.
Mientras el gobierno hace oídos sordos al reclamo de los esenciales, crece el apoyo a su reclamo. Nora Cortiñas le envió un caluroso apoyo y también artistas famosos enviaron este video abrazando la lucha de quienes sostienen la salud en primera línea:
A esto se suma un revés judicial a favor de la lucha de enfermería.
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Los y las enfermeros, médicos, psicólogos, administrativos, personal de limpieza, de cocina, camilleros y técnicos que estamos agrupados en el Movimiento de Agrupaciones Clasistas, con la agrupación Marrón en Salud, somos parte de todas estas acciones, luchas, y denuncias. Los Diputados de los trabajadores, como Myriam Bregmam y Alejandrina Barry en la ciudad vienen acompañándonos en todo sentido, con su presencia y colaboración. Hicieron una exigencia concreta sobre del pase inmediato a la carrera profesional de los enfermeros. Además de presentar amicus curiae junto a otros legisladores, Barry interpeló el día lunes a la comisión de salud de la legislatura, por el pase ya.
Luchamos porque las asambleas en los lugares de trabajo sean el motor de nuestras acciones, ya que es la única manera de encontrar la unidad para fortalecer nuestros reclamos.
Buscamos la unidad con otros trabajadores, a los que asistimos, porque son nuestros pacientes. Tendemos lazos de solidaridad con quienes nos necesitan, ofrecemos nuestros conocimientos, y atención al pueblo pobre de Guernica. Quienes fueron abandonados por los gobiernos, y no tienen ni agua potable en esta pandemia, mucho menos atención sanitaria. La única respuesta que tienen son, policías pertrechados, listos para reprimir. Los mismos palazos con los que respondieron a las enfermeras en la Ciudad. También apoyamos a los docentes, quienes hoy son obligados a volver a las escuelas, en un momento de mayor crecimiento de los contagios, sin capacitaciones sobre el uso de EPP, y de bioseguridad, ni condiciones adecuadas en las escuelas, porque no pusieron un peso en educación. En el año de la enfermería tenemos mucho por decir y hacer, ya lo demostramos poniendo el cuerpo en esta pandemia.
Este 21 volveremos a las calles para que la lucha continúe, se profundice en asambleas hasta lograr las fuerzas necesarias, hasta lograr el reconocimiento profesional para enfermería, el pase de todos los enfermeros a la carrera, terminar con la precarización laboral, las jubilaciones de hambre y el mono tributo. Hasta que se reconozca en todo el país al millón de trabajadores que conformamos el personal de salud que pusimos la vida para enfrentar esta pandemia con más de 120 compañeros que murieron trabajando. ¡Exigimos justicia por ellos!
Plata para salud, educación y vivienda, la deuda es con el pueblo no con el FMI.
