Inicia la séptima semana del plan de lucha de las y los trabajadores de la salud nucleados en Cicop con paro y movilización el 3 de diciembre. El gobierno de Kicillof cerró la paritaria por decreto y pretende que “los esenciales” sigan perdiendo salario. Un recorrido hasta acá y un debate fraterno con la conducción del gremio ¿Qué necesitamos para triunfar?
Miércoles 1ro de diciembre de 2021 17:43
Este viernes hay una nueva cita para las y los trabajadores de la salud de la provincia de Buenos Aires. En el marco de un paro provincial se concentra a las 10:30 hs en Plaza Moreno y se moviliza una vez más a la casa de gobierno.
Un legítimo reclamo salarial, y una larga lista de demandas como el reconocimiento de los aportes previsionales adicionales realizados desde el año 2015, los pases de ley, las quitas salariales bajo la forma de presentismo, la eliminación de la precarización laboral bajo la forma de monotributo en los municipios, un nuevo reglamento de residentes, entre otros, encabezan los reclamos.
“Señor gobernador Kicillof, reclamamos urgente reconocimiento para los trabajadores de la salud” fue la bandera que encabezó las últimas movilizaciones.
¿Cómo llegamos a esta jornada?
El miércoles 29 de septiembre se realizó el llamado paritario. La oferta fue de un 45% en noviembre, sin respuesta a los reclamos extrasalariales. Desde Cicop y demás sindicatos con representación en la ley 10.471 se rechazó la propuesta por considerarla insuficiente e incompleta, refrendando luego la decisión en asambleas. El Congreso de Delegadxs votó paro de 24 horas el miércoles 6 de octubre con una caravana en la ciudad de La Plata, siendo una importante y nutrida acción. La respuesta del gobierno: aumentar el 1,5% la oferta, una burla, y se otorgan después de más de 1 año y medio las vacaciones que se encontraban suspendidas.
El congreso de Delegadxs del 15 de octubre rechazó la oferta con el 91% de los votos, y convocó a un paro de 24 horas para el jueves 21 con acciones locales y regionales, y un paro de 48 horas el 26 y 27 con movilización en CABA y Carpa en Congreso. Cientos nos movilizamos de toda la provincia. Una vez más el gobierno hizo oídos sordos. Se realizaron asambleas en las seccionales y el 5 de noviembre el Congreso de Delegadxs resolvió la continuidad del plan de lucha, con un paro de 24 horas el 12 de noviembre y movilización en La Plata con carpa en Gobernación y un paro el jueves 18 con asambleas y acciones locales. Una vez más, ante la falta de respuesta, el viernes 19 en un nuevo Congreso de Delegadxs se decidió una nueva jornada de lucha: el viernes 3 de diciembre paro y movilización a casa de gobierno.
Un reclamo imprescindible
Quienes trabajamos en salud, denunciamos hace años el desfinanciamiento progresivo de la salud pública, gobierno tras gobierno. En estos últimos años la pérdida del poder adquisitivo de nuestros salarios no dejó de caer. El pluriempleo es una constante obligada, y la falta de recursos una denuncia permanente. La pandemia marca un antes y un después, visibilizando aquello que permanecía olvidado.
Sin embargo, las condiciones estructurales se sostuvieron, los salarios siguen perdiendo y el agotamiento es más profundo que nunca. En todo el mundo las y los trabajadores de la salud fueron vidrieras de reclamos. “¡Ahora es cuando!” se escucha en las asambleas del sector, “nos dicen esenciales pero de aplausos no comemos”. A su vez, la población que se atiende en el hospital público es la peor víctima del ajuste en curso, redoblando la imprescindible tarea de la defensa de la salud pública.
CICOP y sus puntos fuertes
Si de sindicatos hablamos, se escuchan los grillos. La tregua de la inmensa mayoría de las direcciones sindicales con el gobierno son abismales. La clase trabajadora está sufriendo un gran ajuste, crecen los despidos, la pobreza supera el 40%, y la respuesta de las centrales sindicales es meta charla y acuerdos con el presidente. Un gran escollo para enfrentar la crisis en curso.
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Cicop proviene de una tradición de lucha, con un estatuto progresivo, que le da voz a las minorías y define resolver las acciones en la base de los hospitales. Una obviedad, pero lastimosamente ausente en las prácticas sindicales.
La independencia política que caracterizó al gremio, hoy peligrosamente con un sector de la conducción abiertamente alineado al gobierno nacional y provincial, ha sabido ser un punto de apoyo fundamental.
Es necesario un paso al frente
Desde la Lista 5, conformada por la agrupación Marrón y la Corriente de Izquierda por la Salud Pública, venimos insistiendo en algunos puntos que creemos necesarios para que nuestra lucha triunfe.
En la última movilización, la conducción advirtió desde el palco “no nos tiene que enamorar de la grandeza de las movilizaciones que hacemos (...) El tiempo de la lucha lo debe marcar la retaguardia de los hospitales”. Desde esta concepción, la derrota está asegurada. Es justamente a los compañeros y compañeras que están dispuestos a luchar que hay que alentarlos para fortalecer la organización, y sumar y masificar el reclamo.
Venimos insistiendo en la necesidad de fortalecer las medidas. Un plan de lucha que nos encuentra siempre en el mismo punto, tarde o temprano se convertirá en desgaste. La profundización de las medidas, ante la nula respuesta del gobierno, resulta vital. Por eso apoyamos lo debatido en asambleas de residentes y en algunas seccionales sobre la necesidad de medidas contundentes, como un corte de autopista o del Obelisco. Quedó demostrado que meternos dentro de una plaza no obliga a los medios a visibilizar el reclamo. En este mismo sentido, hemos propuesto en diversas oportunidades, que el gremio saque solicitadas en los medios ante el establecido cerco mediático.
Creemos que la unidad es imprescindible para triunfar. Nuestros compañeros de enfermería, limpieza, cocina y demás sectores, se encuentran en una situación incluso más acuciante que la nuestra. Sin embargo Salud Pública (como de costumbre) y ATE se encuentran de brazos cruzados. Hemos insistido en que el gremio saque una declaración pública llamando a sumarse al reclamo. Las y los trabajadores de la salud debemos pelear en unidad, y llamar a la comunidad a encarar esta pelea de conjunto.
Las y los esenciales, tenemos un inmenso desafío por delante. El acuerdo con el FMI y la profundización del ajuste, con la pandemia aún en curso y la llegada de nuevas cepas, ponen por delante la inmensa tarea de profundizar la lucha en defensa de la salud pública. Este viernes hay una gran cita para ello. Pero sabemos que el ajuste traspasa las puertas de los hospitales, recorre las fábricas y los barrios. Un importante número de organizaciones de trabajadores, sociales y de la izquierda están convocando el sábado 11 a una movilización en plaza de Mayo para decirle NO al FMI, agendalo, para que la crisis no se pague con el hambre del pueblo.
[Video] Sábado 11 de diciembre: copemos la Plaza de Mayo para decirle NO AL FMI
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