"Si no hay comida para nuestros hijos, que no haya paz para los empresarios" dice una aeronáutica despedida. "Empresarios verdugos mata familias" un cartel que cuelga del portón de una metalúrgica cordobesa. "Soy la médica de los nadies" otro afiche a mano de una médica rionegrina. "No vamos a permitir los despidos" advierte un ferroviario. "Tenemos que coordinarnos" insiste una estatal en conflicto. Milei pega, algo se empieza a mover. Todo menos la CGT y la CTA.
Lucho Aguilar @Lucho_Aguilar2
Martes 26 de marzo de 2024 11:55
Termina marzo. Pasaron los primeros 100 días de Milei y los golpes se suman. Uno tras otro. Y van logrando que la bronca se empiece a colar por las siempre pacientes cúpulas sindicales. Esta semana, aunque sea “corta”, es una muestra. Hagamos un nuevo recorrido por lo que pasará en estos días, y al final una propuesta.
El martes arranca con protestas en varias dependencias del ANSES. Como contamos acá, el gobierno “antiabuelos” (otro más) les roba sus jubilaciones pero también quiere vaciar el ANSES y saquear sus fondos. Hay asambleas y medidas en dependencias de varias ciudades del país. “Nos echan compañeros, no podemos atender” dicen los carteles.
Al mediodía tendrá lugar una asamblea muy significativa. Será en Haedo y la convoca la Unión Ferroviaria que conduce Rubén “Pollo” Sobrero. Como le dijo a La Izquierda Diario este domingo, “quieren despedir 400 compañeros y compañeras. No lo vamos a permitir. Estamos haciendo asambleas y además tenemos el apoyo de las asambleas vecinales y otras organizaciones”. ¿Ese ataque y esa unidad pueden convertirse en un conflicto testigo?
En las primeras horas de la tarde comienzan medidas de fuerza en redacciones de distintos puntos del país. SiPreBA y FatPren convocan unas “Jornadas nacionales de lucha salarial en Prensa Escrita”, con paros, ceses de actividades y asambleas. Exigen una oferta paritaria acorde a la pérdida inflacionaria. A las 15:30 de este martes habrá una asamblea abierta en las puertas de Perfil. También será este martes la nueva asamblea general de Télam contra el cierre, después de tres semanas de acampe. En la TV Pública hay aprietes, amenazas pero también se prepara la lucha.
Otro sector donde el conflicto es inminente es Vialidad Nacional. El gobierno paraliza obras necesarias, pero además vacía el organismo. Desde el sindicato vial avisaron a la ministra Petovello que se declaran en “estado de alerta, asamblea permanente, movilización y medidas de acción directa”. A las 11 arrancó el plenario nacional de la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT). Según lo que pudo saber La Izquierda Diario, los voceros de los sindicatos tuvieron que transmitir el malestar que hay por los ataques que sufren: paritarias pisadas o sin homologar, despidos, vaciamientos. La frase que más se escuchó fue "se necesita un plan de lucha", pero desde la mesa no le pusieron fecha: "es grave llegar tarde pero imprudente salir antes" dijo un dirigente aeronáutico que parece que no quiere despegar. La Bancaria se declaró en estado de alerta por la venta del HSBC y enfrenta la amenaza de la privatización del Nación. La "joya" de Toyota parece que quiere bajar un cambio a costa de los mecánicos: 400 "retiros" no tan voluntarios. SMATA sigue en primera. Lento. América TV está en guerra contra sus trabajadores y el SATSAID: 29 despidos antisindicales.
Seguimos. Las y los estatales son uno de los blancos predilectos de Milei y sus liberparásitos. Paritarias a la baja y despidos. ATE convocó para este martes a otra tibia "jornada de protesta". La noticia sería que se tratara de una medida combativa. Donde el acción preocupaba al Gobierno, el paro de 48 horas del SENASA, lo levantó tras un pedido de reunión de la gente de Milei, sin garantías. En algunas dependencias, como Trabajo y Economía, hay asambleas y manifestaciones impulsadas por la oposición combativa. La Marrón Clasista le exige a ATE, UPCN y demás gremios: asambleas y plan de lucha unificado.
El Estado libertario detesta el sistema científico nacional. Por eso también se la agarró con el Conicet, con una campaña de mentiras. El viernes pasado anunció 90 despidos más. Este lunes hubo un corte donde participaron trabajadoras y trabajadores del organismo (ATE Mincyt), jóvenes científicxs precarizadxs y docentes. Bullrich mandó a policías de la Federal a provocar las asambleas. Pero no puede detener la protesta.
Este martes hay otro hecho que pinta de cuerpo entero la condición de este gobierno: es racista y antiobrero. Le suspendió el Potenciar Trabajo a más de 45 mil personas los últimos dos meses, la mayoría migrantes. Viven y trabajan en Argentina, hacen funcionar el país, pero en muchos visitaron a sus familias en Bolivia, Paraguay y Perú. No son “viajes en crucero” que habla el vocero Adorni. Por eso convocaron a presentar un amparo colectivo en Tribunales y a las 12 hs marchan al Obelisco. No olvidemos nuestro himno: "La clase obrera, es una y sin fronteras".
La semana tendrá otro día clave. Paolo Rocca encabeza una guerra contra las y los metalúrgicos. Con sus puestos en el gobierno y como dueño de “los fierros”, sigue provocando con suspensiones y techos salariales. Va más allá de una paritaria: quiere cambiar la “relación de fuerzas” y el primer capítulos son las grandes plantas de acero. El ataque obligó a la UOM a convocar acciones este miércoles 27. Habrá una marcha que saldrá de Tenaris-Siderca Campana, pero sin paro. Convoca a “asambleas diarias y marchas de la dignidad”. Hay bronca, pero el “plan de lucha” tibio no ayuda. En Córdoba la bronca contra las empresas del sector está generando un movimiento interesante, donde cuerpos de delegados y trabajadores realizan asambleas, piquetes y manifestaciones contra la paritaria de hambre. “Empresarios verdugos, mata familias” dice uno de esos carteles. Del otro lado también hay bronca de clase.
Y el “finde largo” tendrá como previa una medida muy simbólica. Un abrazo a Aeroparque encabezado por despedidos de GPS-Aerolíneas y asambleas vecinales. Será el miércoles a las 19 horas. Chalecos y cacerolas. Desde la semana anterior se duplicaron los despidos. Queda claro que es el puntapié del plan privatizador de Aerolíneas Argentinas. Atacan a los tercerizados combativos. Pero como dijo una despedida el 24 de marzo: “Si no hay pan para nuestros hijos, no habrá paz para los empresarios”.
Río Negro explica muy bien lo que estamos pasando. Milei mete motosierra. Los gobernadores lo torean pero también tienen la suya. Eso denuncian miles de trabajadoras de la salud que vienen parando y marchando contra los sueldos de miseria. “Acá salvaron a mi papá. ¡Viva la salud pública!” dice el cartel en el hospital de Cipoletti. Son los vecinos que se sumaron a apoyar la huelga que crece desde abajo. En Jujuy el personal de salud viene de una movilización y luego vigilia, denunciando las condiciones del sistema y exigiendo por sus derechos laborales. En los hospitales Pablo Soria, San Roque, Materno Infantil, Snopek, Gallardo, dicen que la situación “no da para más”. En Neuquén ya van 4 semanas de conflictos, con paros contundentes empujados por el activismo y la seccional Capital que dirige la izquierda.
Podríamos seguir. En La Izquierda Diario podés encontrar cada conflicto. Pero hay una última noticia importante para el cierre de marzo: la CGT no volvió a llamar al paro general. Siguió haciendo declaraciones de preocupación, reuniones urgentes y promesas incumplidas, como esa que amenazaba “un paro general en la segunda quincena de marzo”. Cada lucha que contamos, por separado, podrán ser heroicas y combativas pero tienen muchas menos posibilidades de triunfar que si confluyeran en acciones contundentes, nacionales, masivas, paralizantes, como las que puede hacer la clase trabajadora. Paro general le dicen. Plan de lucha si continúa en el tiempo. Lo saben los “dirigentes sabios y prudentes”, como los llamaba el general Perón. Pero lo evitan.
En muchas de esas luchas que contamos se va forjando, desde abajo, un clima de solidaridad y unidad. Una necesidad que entiende cualquier trabajador atacado: “nadie se salva solo”, “juntos somos más fuertes”, “tocan a unx, tocan a todxs”. El canto de “unidad de los trabajadores / y el que no le gusta se jode” que sale de las columnas que se cruzan. Eso hay que construir.
Desde la izquierda y el sindicalismo combativo seguimos insistiendo en la necesidad de coordinar a todos los sectores que empiezan a resistir. Así lo plantearon en la marcha del 24 de marzo muchos de los delegados de base que encabezan estas luchas, como muestra el video que presentamos abajo. Coordinar desde ahora, en cada lucha, pero también construyendo desde abajo un gran Encuentro Nacional de organizaciones sindicales y piqueteras combativas, asambleas barriales, de la cultura, feministas, estudiantiles, ambientalistas, con la participación de la izquierda que siempre está del mismo lado. Desde ahí tendremos más fuerza para ganar cada pelea, para unirlas, pero también para imponerle a la CGT y la CTA un plan de lucha hasta que la motosierra y la licuadora pasen al basurero de la historia.
Lucho Aguilar
Nacido en Entre Ríos en 1975. Es periodista. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001. Editor general de la sección Mundo Obrero de La Izquierda Diario.
