A mediados de esta semana el Partido de Trabajadores Revolucionarios lanzó su campaña de junta de firmas en Valparaíso para conseguir la legalidad partidaria en la región.
Jueves 20 de junio de 2019
Es pasado miércoles 19 de junio el Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR) lanzó su campaña para conseguir la legalidad en la ciudad de Valparaíso, V región. Requieren reunir 1.500 firmas por lo cual estarán por las calles de la ciudad buscando el apoyo de miles de trabajadores, jóvenes y mujeres. Tras años dando luchas en liceos, colegios, universidades y empresas, se disponen irrumpir en la política regional y nacional como una fuerza de izquierda y de las y los trabajadores.
Más aún en contextos de un gobierno de derecha con reformas y ataques, pero también de resistencia como las y los profesores de Antofagasta en paro nacional indefinido, así como los trabajadores mineros de Chuquicamata o las trabajadoras educadoras de párvulo. Ante esas luchas, desde el PTR plantean la necesidad de la unidad y coordinación, así como un plan de lucha con paro nacional para ser millones en las calles.
El PTR que tiene presencia en diversas ciudades del país, de norte a sur, viene de dar importantes luchas en la ciudad porteña de Valparaíso, interviniendo activamente en la rebelión portuaria en noviembre-diciembre, pasando por los paros universitarios, el paro de profesores y educadoras parvularias de estas semanas. A nivel nacional, son reconocidos en ciudades como Antofagasta, Santiago, Arica y Temuco, con referentes y trabajos en escuelas, universidades, hospitales y empresas.
En la región, apuestan abrirse paso en la juventud, en las mujeres y trabajadores, como lo vienen haciendo en el colegio Winterhill, en la UPLA, en establecimientos educacionales como el liceo Eduardo de la Barra y en la industria, y tienen entre sus referentes a Pamela Contreras, referente de la organización Pan y Rosas y vocera de la Coordinadora 8 de marzo; así como Antonio Paez, dirigente del sindicato Starbucks.
Tras años de esfuerzos para conformar una fuerza que se organiza en diversos lugares de estudios y trabajos y que se hace parte de las luchas de las y los trabajadores, que participa activamente en la organización de las demandas de las mujeres y la diversidad sexual, hoy se preparan para conseguir la legalidad, y ser una voz anticapitalista de trabajadores, que se proponga terminar con este régimen al servicio de un puñado de empresarios y multinacionales.