Padres de los normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos en septiembre del 2014, han convocado a una marcha para el próximo 26 de abril, para demandar, entre otras cosas, que el GIEI pueda continuar la investigación en México sobre el paradero de los estudiantes.
Sábado 23 de abril de 2016
A casi 17 meses de la desaparición de los 43 normalistas y a través de varias acciones, entre ellas un encadenamiento a las puertas de la Secretaría de Gobernación, los padres de los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa demandan el esclarecimiento del paradero de sus hijos y lo sucedido la noche del 26 de septiembre del 2014.
Para ello piden que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos permanezca un periodo más en el país para continuar la investigación, pues el periodo asignado concluye este 30 de abril.
A pesar de que el GIEI planteó importantes evidencias en el último periodo para que la investigación sobre Ayotzinapa continúe, como las declaraciones de un “testigo” de que un grupo de estudiantes habría sido llevado a Huitzuco, el gobierno de Enrique Peña Nieto y la Procuraduría General de la República se negaron a extender el plazo de su estancia.
Y es que, desde finales del 2014 la urgencia para cerrar el caso de la desaparición de 43 estudiantes en Iguala, Guerrero, es la línea seguida por el gobierno mexicano. Cada vez resulta más insostenible la llamada “verdad histórica” impuesta por el ex procurador Jesús Murillo Karam.
En la conferencia “Ayotzinapa y el GIEI. Balance y lecciones”, realizada el pasado 21 de abril, participaron las expertas Ángela Buitrago y Claudia Paz y Paz, quienes en diferentes declaraciones enfatizaron la necesidad de continuar la investigación para aclarar lo sucedido.
Afirman que existe evidencia científica de que la incineración de los cuerpos correspondiente a la “verdad histórica” no fue realizada.
Denunciaron también las trabas impuestas por el gobierno mexicano para la realización de su trabajo durante su estancia. Así sucedió con la negación a la posibilidad de entrevistar a miembros del 17 Batallón de Infantería o el descarte y ocultamiento de pruebas por parte de la PGR. En este sentido, advirtieron que por la participación directa de diversas instituciones y agentes del Estado la verdad puede no “conocerse pronto”. Esto debido a que la línea de gobierno es insistir en “asuntos ya descartados”. De esta manera hablaron de “un pacto de silencio” para acallar la verdad.
Pellicer también se refirió a los costos internacionales que el caso de Ayotzinapa trajo consigo, que derrumbaron la imagen impuesta durante el primer periodo sobre el gobierno de Peña Nieto, y ejemplificó las declaraciones de la aspirante demócrata a la presidencia estadunidense, Hillary Clinton.
En este contexto, el comité de padres convocó a una marcha, el próximo 26 de abril, en la Ciudad de México a las 17:00 horas, del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez.
Es necesario que las organizaciones sociales, de derechos humanos y sindicatos que se reclaman combativos salgan a movilizarse para demandar la presentación con vida de los desaparecidos y el castigo a los responsables políticos y materiales del hecho. Esto junto a proponer el fin de la represión que este régimen ejerce contra estudiantes, trabajadores, mujeres y jóvenes todos los días.
