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Red Internacional
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Mundo Obrero. Panorama de la lucha obrera en México contra los efectos de la pandemia

En medio de una de las peores crisis económicas en México y en el mundo. ¿Qué está sucediendo en el mundo del trabajo?

Viernes 3 de julio de 2020 14:19

El mundo del trabajo en México está en una crisis. Millones de personas han sido despojadas de su fuente de empleo. Sin embargo, existe un singular proceso de descontento y de indignación en el mundo laboral. Antes de la pandemia ya existían dos huelgas, la de Notimex y Chapingo así como un movimiento por la basifiación de los profesores de asignatura de la UACM.

En abril se realizaron diversos paros en contra de seguir laborando en el inicio de la pandemia. De acuerdo al sindicalismo de Mexicali se fueron a paro laboral unas 90 maquilas. En Reynosa, Tijuana, Baja California y en Matamoros también hubo paros labores.

En resistencia a la crisis económica y sanitaria emergieron los siguientes movimientos obreros en denuncia y rechazo a la precarización laboral en los meses de mayo y junio.

Los trabajadores de Recal en Jalisco denuncian que los salarios como obreros no alcanzan a cubrir los costos de la canasta básica, por eso la empresa se ve obligada a dar compensaciones que hacen que el salario aparente no ser tan raquítico. Ahí se han realizado cientos de despidos.

En las empresas Sanimna y Jaibil, maquiladoras electrónicas, se realizaron paros laborales para exigir licencias al 100% durante los primeros días de la pandemia. Pero, pasaron desapercibidos para los medios nacionales. Después comenzaron los despidos.

Las y los trabajadores de General Motors de Silao, desde antes de la pandemia, han denunciado la situación de la empresa pues siguen los contagios en las líneas de producción.

En junio en la maquiladora Desarrollo de Talento Omega, ubicada en Tepatitlán propiedad de Alejandro Ruiz Barba más de 70 empleados maquiladores decidieron impulsar un movimiento en denuncia de la empresa por falta de pagos de salarios.

En Aguascalientes, también en junio, trabajadoras maquiladoras de Jobar, que maquila mezclilla para grandes marcas, denunciaron que han protestado pues en el talón de pago se comenzó a quitar un porcentaje del salario por “préstamo covid”. Eso quiere decir que el tiempo que no estuvieron en labores por la pandemia no era un salario sino un “préstamo”. Esto es completamente ilegal y tendrá repercusiones en las utilidades de este año para las trabajadoras.

De acuerdo a la página de internet del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de Industrias y Servicios la maquila Erika de Reynosa se fue a paro laboral. En la maquila Erika en mayo un trabajador murió por paro cardiaco. El infarto de un hombre de 45 años de edad el 14 de mayo implicó un movimiento inusual de policías en la empresa.

Trabajadoras y trabajadores de Tridonex en Matamoros Tamaulipas, dieron a conocer el fallecimiento de un trabajador de intendencia de planta 2, a causa de covid. La muerte de su compañero, fue la gota que colmó el vaso y decidieron irse a paro en planta 2 y 3. Con esta lucha declaran que las vidas de las y los obreros importan más que sus ganancias.

El 1 de julio alrededor de las 6 p.m. trabajadores de reparto, integrantes del colectivo Ni un repartidor menos y de motociclistas unidos, se dieron cita en la glorieta de Cibeles. Esta caravana se convocó como un homenaje a los trabajadores que han perdido la vida en accidentes viales. También se están organizando los trabajadores de las apps. Esta es la segunda acción y es parte de un proceso internacional de organización y resistencia de las y los trabajadores de las apps.

Finalmente el sector salud producto de la crisis económica y sanitaria y la incapacidad de gobiernos federal y local para atender las demandas de los trabajadores de salud, lanzaron el llamado a la Unión Nacional de Trabajadores por la Salud de México, quienes convocan movilizaciones para los próximos días. Los trabajadores de la salud se han movilizado durante toda la pandemia. Han luchado por falta de insumos, por falta de material y en todo el país han enfrentado la austeridad repúblicana.

Por la coordinación de las luchas

Desde 2015 las y los trabajadores en México hemos comenzado a decir basta: las primeras huelgas en la maquila con la lucha de Lexmark y la segunda con la rebelión de los trabajadores de San Quintín en Baja California dieron paso a las huelgas en Matamoros con el movimiento 20-32. Le siguieron paros laborales en varios puntos del país: Goodyear, Rintex, Civac Nissan y se organizaron movimientos emblemáticos y poderosos en General Motors. Por lo menos, desde ese año, han surgido unos 250 resistencias obreras. Pero, el problema, es que no tenemos organización. Pero no solo hay luchas en el sector industrial sino también en los servicios como el caso de los movimientos de las apps.

Requerimos un movimiento nacional contra la precariedad laboral y contra los despidos. Un movimiento que recorra las maquilas del norte, las tiendas departamentales de la Ciudad de México, los ranchos de jornaleros en la península, los call center, las empresas de electrónica del Salto, la industria del automóvil en Silao, las universidades como la UACM, las dependencias del Estado.

El dramatismo de la situación actual nos pide celeridad: luchemos contra los despidos, por licencias laborales pagadas, por aumentos salariales, por derecho a la estabilidad en el empleo. Pero también tenemos que llamar a las grandes centrales sindicales a que abracen esta lucha: los telefonistas, los sindicatos universitarios, los maestros democráticos deben recuperar nuestros reclamos y ayudarnos a impulsar la lucha. Un movimiento de estas características debe proponerse recuperar los sindicatos para organizar la lucha a nivel nacional.

Somos la sal de la tierra, los esenciales en tiempo de covid-19. Los capitalistas no son esenciales para la vida, los precarios sí.
Urge la construcción de un movimiento que pueda coordinar las luchas.