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Red Internacional
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Mundo Obrero. Papelera Molarsa: si tocan a uno, tocan a todos

Desde el miércoles 4 de Mayo los trabajadores de la Papelera Molarsa, ubicada en el Parque Industrial de Neuquén vienen llevando adelante una lucha ejemplar por la reincorporación de Maximiliano Poblete, despedido sin causa tras reincorporarse de una licencia por accidente laboral.

Martes 10 de mayo de 2016

A tono con la política del gobierno nacional y los gobiernos provinciales, la multinacional Sanovo Greenpack, viene llevando adelante distintos ataques a los trabajadores que van desde “ensuciar” legajos –para cubrirse con excusas ante despidos- y ofrecimientos de “retiros voluntarios” hasta el despido directo de un trabajador, después de haberse reincorporado a la fábrica tras un “accidente” de trabajo a causa de la desidia y los ritmos de trabajo impuestos por la patronal. Fue la gota que rebalso el vaso. Si “tocan a uno, nos tocan a todos” fue el grito de los trabajadores en asamblea y desde el viernes decidieron trabajar “a reglamento” y se encuentran en estado de Asamblea permanente. Mientras desarrollaban una acción en la Ruta Provincial Nº 7, a la altura de la fábrica La Izquierda Diario conversó con Juan Brusain, delegado de la Comisión Interna.

¿Cuál fue la reacción de los trabajadores ante el despido de Maximiliano?

La empresa jugaba con que era un compañero nuevo, que por ahí con el tiempo que hace que esta laburando no alcanzo a tener mucha relación con los compañeros y con las tradiciones de la fábrica. No se esperaba la respuesta de los compañeros, hay mucha madurez, veníamos con mucha pasividad dentro de la fábrica. Y con el cambio de gobierno empezó a haber una agresividad de parte de la gerencia hacia nosotros buscando cualquier motivo para suspender, apercibir y también fue sorpresivo el despido de este compañero para nosotros, de un día para otro. La empresa se sorprendió de la respuesta, pensaba que no iba a pasar más que de una queja de escritorio, de los delegados o del sindicato. La gerencia venia acostumbrada a eso.

¿Cuáles son tus expectativas?

Ver que los distintos trabajadores de la zona, distintas organizaciones y partidos de izquierda nos apoyen nos da un impulso enorme porque muchas veces más allá de que hayamos tenido varias luchas, nos comparten experiencias que por ahí nosotros no tenemos, nos empujan, nos dan animo, sobre todo porque son otros trabajadores como nosotros.
Ahora la mayoría de la fábrica esta acá. Somos 105 de los 110. Hubo un avance muy grande. Ahora hay nuevos compañeros, que antes estaban terciarizados. Te cuento que la pelea por ellos para dejarlos efectivos surgió porque todo el tiempo cuando laburábamos veíamos los abusos, de la empresa y de la terciarizadora hacia ellos. Hacían el mismo trabajo que nosotros y cobraban mucho menos, cobraban miserias, los obligaban a hacer horas extras y muchas veces no se las pagaban, se la robaban entre recursos humanos de la empresa y la terciarizadora. Dimos la pelea y pasaron a planta. Ahora hay un sector que queda terciarizado. La empresa se excusa en que son temporarios pero la realidad es que hace años que trabajan “temporales”, pasa que es un sector que es complicado de que se organicen porque los están cambiando continuamente. La contratista los va cambiando a otros trabajos afuera de la fábrica, los rota o los despide, como estrategia para que no generen relaciones o pertenencia.

¿Cuál es el plan de la empresa?

La gerencia que tenemos ahora viene de “Topsy” viene de encargarse de dejar muchas familias en la calle, fue el que hizo el cambio de firma a “La Anónima”. Y por eso lo trajeron porque tiene experiencia en vaciamientos y despidos. En realidad desde hace muchos años la intención es desarmar la Comisión Interna y la organización de los compañeros. Al enterarnos de quién era este gerente, la reacción fue rápida de parte de los compañeros porque también fue mucha la bronca de saber que no solo lo hace acá sino que se lo hizo a otros trabajadores, que los dejo en la calle. Las intenciones para nosotros son de cerrar turnos, alrededor de 24 trabajadores por turno, que también se ven en la otra planta que tiene la misma firma en Cipolleti, Rio Negro. Ahora somos 110, entre los distintos sectores. . En este conflicto avanzamos en hacer asambleas con los trabajadores de las dos plantas. Allá el tema es que no tienen la organización que logramos acá y allá hay muchas diferencias de personas con la misma categoría pero con una diferencia enorme con los sueldos por ejemplo. A los que entraron con la compra de SANOVO les sacaron muchos ítems que antes cobraban, haciendo diferencias entre los que se quedaron desde la venta de la firma anterior y los que entraron después de que compró SANOVO.

¿Conoces la historia de la empresa?

Si, el grupo económico se llama SANOVO GREENPACK, es un grupo multinacional que además de las dos plantas que te dije tiene muchas acciones en las papeleras de Uruguay que tuvieron tantos problemas en Gualeguaychu, hace unos años.
Ese grupo compro MOLARSA hace unos años. Y yo veo lo que era la empresa antes de ser comprada por la multinacional y después. Estuvo muchos años en complicidad con el sindicato. Nosotros era muy común que hagamos 16 horas por día y si te negabas te echaban. Hasta que la bronca exploto, y encima se cobraba miserias. Yo todavía no trabajaba acá. Los trabajadores se cansaron, empezaron a organizarse y dando la pelea lograron crear la Comisión Interna. A partir de ahí se dieron luchas salariales en principio y después se logro hasta reincorporaciones de despedidos. Se fue tomando consciencia de que para nosotros lo primordial es defender el trabajo de los compañeros antes que el dinero. Además a partir de que compro la multinacional se empezó a ver un proceso de ataque a la Comisión Interna para desarmarla y sobre todo con un proceso de vaciamiento de la fábrica, dejaron de prestarle atención a mantenimiento y a los distintos sectores, sin inversión, están apostando a que esta fabrica funcione hasta que las maquinas queden inservibles.

¿Y sobre el trabajo de ustedes también sienten que incidió ese cambio?

La falta de inversión en la fábrica repercute directamente. Al no invertir en maquinaria, lo que más nos afecta es que no hacen inversiones en nuestras herramientas de trabajo y en los sectores en los que trabajamos, y esto hace que empeoren cada vez más nuestras condiciones de trabajo y corra riesgo nuestra salud.

Estamos viendo mientras conversamos que las personas frenan a preguntar y colaboran con ganas en el fondo de huelga…

Yo creo que es por el contexto nacional. Se identifican con nosotros porque ahora no hay alguien que no tenga un familiar, amigo o vecino que no haya sido despedido. Reciben los volantes, frenan, participan del fondo de huelga, aportan, nos apoyan. No quieren más despidos y nosotros tampoco. Por eso vamos a pelear hasta el final para que Maxi vuelva.