La ministra de Seguridad quiso evitar el escándalo por la represión a la murga del Bajo Flores. Pero no pudo. La Procuvin denunció a la Gendarmería y Patricio Del Corro presentó un pedido de informes en la Legislatura.

Daniel Satur @saturnetroc
Miércoles 3 de febrero de 2016
Cuando las imágenes tremendas e irrefutables de los pibes de la Villa 1-11-14 del Bajo Flores baleados se viralizaron en las redes sociales y a través de medios como La Izquierda Diario, el gobierno mostró a pleno su perversidad y cinismo.
Como se informó ayer, primero el Ministerio de Seguridad quiso anticiparse al escándalo y, con la ayuda de Clarín y La Nación, difundió la (intensionadamente) confusa versión de que en un operativo “de rutina” contra “el narcotráfico” dos gendarmes habían resultado baleados en la Villa 1-11-14.
Después, ante los testimonios contundentes de los heridos y sus familiares, y ante la circulación masiva de un video que muestra la balacera de Gendarmería, la versión oficial hizo aguas y comenzaron los problemas para el gobierno.
Aunque parezca ridículo, Clarín, La Nación y algunos otros medios esperaron a que las y los jóvenes de la murga declararan ante la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) para publicar algo de información real.
Al quedar demostrado en los despachos judiciales que los pibes que bailan y cantan en Los auténticos reyes del ritmo no portaban armas de fuego y no hirieron a los gendarmes que les estaban disparando, entonces el foco empezó a dirigirse hacia la fuerza represiva verde oliva que conduce Patricia Bullrich.
Denuncia a Gendarmería
Tras recolectar numerosos testimonios, fotos y videos de la represión, ayer el fiscal Miguel Angel Palazzani, a cargo de la Procuvin, denunció penalmente a los miembros de Gendarmería por su actuación la noche del viernes 29. La denuncia se radicó en el Juzgado Nacional de Instrucción 22 a cargo de Guillermo Rongo.
Allí se destaca el testimonio coincidente de las víctimas, sobre todo en lo referido a la violencia ejercida por los gendarmes y a que ninguno de los vecinos se encontraba armado o habría ofrecido resistencia. En la investigación intervendrá la fiscalía n°43 a cargo de Carlos Belarde.
La Procuvin dijo que debe analizarse también la posible responsabilidad de funcionarios jerárquicos de Gendarmería Nacional, por lo que solicitaron "la investigación de la cadena de mandos de la fuerza en el marco del operativo de Cinturón Sur” que actúa desde hace varios años en la zona.
En este contexto vale recordar que cuando la Gendarmería estaba al mando de Cristina Fernández y Sergio Berni también fue denunciada por la Procuvin (a cargo de otros funcionarios) por reiterados casos de privaciones ilegítimas de la libertad de niños y adolescentes. Se llegaron a registrar 18 hechos que tuvieron lugar en barrios del suroeste de la Ciudad de Buenos Aires, entre los años 2013 y 2014. La denuncia se realizó en septiembre de 2015.
Precisamente el operativo Cinturón Sur fue una de las políticas represivas privilegiadas del gobierno kirchnerista luego de la represión en el Parque Indoamericano en diciembre de 2010.
Pedido de informe a Bullrich
Ayer también se conoció que el legislador porteño del PTS y el Frente de Izquierda Patricio del Corro oficializó un pedido de informe sobre los hechos ocurridos el viernes en el Bajo Flores. La exigencia es al propio Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich.
El proyecto de resolución que Del Corro presentó en la Legislatura porteña exige informes a la cartera de Seguridad sobre los hechos represivos contra la murga Los auténticos reyes del ritmo.
“Entre otras preguntas, queremos saber qué organismo dio la orden para que intervengan Gendarmería Nacional y la Policía Federal y cuál fue el objetivo del operativo”, precisó Del Corro en un comunicado de prensa.
En ese sentido, Del Corro agregó que “parece que ser pobre es un delito en la Ciudad de Buenos Aires. El 18 de enero se votó en la Legislatura porteña el traspaso de sectores de la Policía Federal a la Ciudad. En esa oportunidad denuncié que el PRO buscaba no solo ’despejar las calles’ frente a las protestas por los despidos y el ajuste, sino también tener el control de la calle para perseguir a los jóvenes y a los vecinos pobres. No pasaron dos semanas del traspaso que este hecho desgarrador impacta en pleno Bajo Flores”.
Crisis de Carnaval
Intentando mantener limpio el disfraz de Bullrich, Clarín ayer informaba que “el Gobierno abrió una investigación por la denuncia de represión a una murga de chicos en la villa 1-11-14”. Pero la operación no puede ser más cínica.
Mientras intentan pegar un giro para cubrir sus enchastres previos, el gobierno y sus aliados mediáticos ahora reconocen que hay denuncias contra Gendarmería por la represión, pero se animan a poner en duda, por ejemplo, que haya existido verdaderamente una murga la noche del viernes en el Bajo Flores.
“Somos los primeros interesados en que se esclarezca esto”, dijo el Jefe de Gabinete Marcos Peña y agregó que al gobierno le “preocupa” el tema. Sin embargo desde la Casa Rosada siguen insistiendo en que los gendarmes Gabriel Baspineiro y Ezequiel Cardozo fueron atacados a balazos en el lugar de los hechos y hasta se animaron a refutar la versión de la represión al agregar que no hubo murga alguna involucrada en el episodio.
Esta información lanzada por Clarín, citando fuentes oficiales, sigue abonando la misma idea que buscaron instalar en las primeras horas posteriores a los hechos, cuando el diario de Magnetto enmarcaba la supuesta balacera contra los gendarmes en la “la situación en la villa 1–11–14 del Bajo Flores, escenario frecuente de guerras narco, (que) está lejos de haberse tranquilizado”.
Así, buscando reubicarse frente a la contundencia de las imágenes y los testimonios, el gobierno de Macri, sus funcionarios reaccionarios y sus medios cómplices brindan un patético ejemplo.
Un corso a contramano, se podría decir, con perdón del Carnaval y de las nobles murgas populares.

Daniel Satur
Nació en La Plata en 1975. Trabajó en diferentes oficios (tornero, librero, técnico de TV por cable, tapicero y vendedor de varias cosas, desde planes de salud a pastelitos calientes). Estudió periodismo en la UNLP. Ejerce el violento oficio como editor y cronista de La Izquierda Diario. Milita hace más de dos décadas en el Partido de Trabajadores Socialistas (PTS) | IG @saturdaniel X @saturnetroc