Amenazas de despidos y cierres, trabajadores con sus contratos vencidos, congelamiento salarial y retraso de varios meses en el cobro conforman las diferentes modalidades con las cuales el macrismo está profundizando el vaciamiento y precarización de los programas educativos nacionales.
Lunes 7 de marzo de 2016 09:19
A lo largo y ancho del país miles docentes de los programas educativos nacionales viven con la pesada carga de no saber si van a poder seguir manteniendo sus familias. A las denuncias de despidos masivos en Conectar Igualdad se suman los trabajadores del resto de los planes nacionales que tienen sus contratos vencidos –despedidos de hecho por el momento- o sufren retraso de varios meses en el cobro. Más allá de las promesas de continuidad no hay aun compromisos escritos al respecto, como así tampoco se actualizaron los salarios del sector.
El jueves pasado los trabajadores del programa Conectar Igualdad denunciaron que toda el área de asistencia e inclusión digital será desmantelada de aquí a abril próximo, dejando más de 1000 familias en la calle. Detrás de los despidos se esconde un gran negociado: "Lo que se abre es una oportunidad millonaria para las compañías que trabajan en la educación online. Por lo pronto, Microsoft será la estructura de software base, aunque hay que ver cómo Google y Facebook se plantan para no perder protagonismo en potenciales acuerdos con el gobierno argentino" señaló una fuente vinculada al macrismo a iprofesional.com
Esteban Bullrich en sus visitas provinciales a principio de año anunciaba: "el plan FINES continuará pero con cambios”, sin especificar nada más. El viernes pasado Rodrigo Recalde, Secretario General de la Junta Interna ATE en Educación y Deportes, denunció: "Hoy cada provincia se tiene que hacer cargo de los programas si los quieren llevar a cabo”. Esto implicaría la descentralización de la financiación de los programas educativos nacionales, con el peligro de que en muchas provincias esto implique cierres o vaciamiento. Esta política ya se venía desarrollando desde el año pasado con la municipalización de algunas Orquestas y Coros Nacionales.
Las y los trabajadores del Plan FinEs nos venimos organizando y desarrollando denuncias sobre nuestra situación. En la provincia de Buenos Aires los docentes del plan denuncian que no han cobrado nada desde diciembre del año pasado. En la Ciudad de Bs As, la situación es peor, los contratos están vencidos y ya anunciaron el retraso del inicio de clases para abril, perjudicando a docentes y estudiantes.
La situación de las Orquestas y Coros Nacionales es similar, según la jurisdicción hay retrasos de 3 meses en el cobro y los contratos están vencidos o con renovaciones por tan sólo 2 o 4 meses. La situación en los CAI es de completa incertidumbre acerca de la actualización de sus salarios.
La precarización que dejó el kirchnerismo en los programas nacionales funciona como tierra arrasada sobre la que avanza el macrismo con despidos, cierres, vaciamiento y aún más precarización. Es tiempo de decir basta, romper el aislamiento, sumarnos a las provincias en lucha y exigir a la Ctera que rompa su tregua con el macrismo.
Ctera tiene que convocar a asambleas conjuntas de todos los programas educativos nacionales por distrito para organizar desde abajo un plan de lucha que derrote los ataques del macrismo. No queremos que sigan negociando a nuestras espaldas, para eso proponemos la elección directa de delegados paritarios por programa y jurisdicción.
Lo que se viene es una gran batalla en defensa de la educación pública. Macri quiere importar el modelo educativo empresarial de CABA a todo el país. Para pelear tenemos que organizarnos de abajo hacia arriba, con asambleas por sector que sirvan para luchar contra los despidos y cierres, y que nos permitan organizarnos junto al resto de los trabajadores y nuestros estudiantes para luchar y terminar con la precarización laboral y educativa.
